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Crítica de JuanjoAranda


JuanjoAranda
25 April 2021
Aquí me tenéis. Escribiendo esta reseña desde un calabozo. Una larga historia…
A lo que vamos. Este libro me ha gustado muchísimo. He tenido que leerlo con una manta echada por los hombros, pero a medida que avanzaba la historia he ido entrando en calor bastante rápido. La autora tiene una forma de contarlo que hace que te traslades instantáneamente al mundo que te describe con todo lujo de detalles. Otro punto a su favor ha sido que la historia está narrada desde el punto de vista de varios personajes. Esta hace que se desarrollen varias subtramas simultáneamente y te ayuda a sentir mejor cada personaje.
Me ha encantado la forma que tiene Novik de hacer no tengas ni pajolera idea de como va a acabar todo al mismo tiempo que vas disfrutando de cómo se van sucediendo los acontecimientos.

Es alucinante también lo bien construidos que están los personajes y la fuerza y el peso que tienen cada uno de ellos en la historia.

Del final solo puedo decir que me ha fascinado y que me ha sorprendido. Y me encanta como poco a poco se ha ido resolviendo el puzle y todas las piezas han acabado encajando.
Me ha gustado tanto, que cuando terminé quise tomarme un gin tonic para celebrarlo, pero me di cuenta de que no tenía hielo, así que decidí salir a una gasolinera, que era lo único que había abierto a las tantas de la madrugada, para comprar una bolsa. Recuerdo que hacía mucho frío, y que salí dándole vueltas a una pregunta que me rondaba desde hacía días por la cabeza: ¿Por qué estará tan mal visto que la gente chupe la tapa del yogur? Iba pensativo cuando pasé por delante de un salón de bodas y pensé: Ya que lo celebro, que sea por todo lo alto. Así que me colé. Creo que pasé desapercibido. de vez en cuando me encontraba una mirada de interés, pero supongo que era porque ese día estaba estrenando un chándal nuevo de marca y debajo llevaba la camiseta de la selección española del año 2002. Llegué en el mejor momento: barra libre y perritos calientes de recena. Me pedí el gin tonic y me fui a felicitar a los novios, un tipo muy alto y muy blanco y una chica bastante robusta. Imaginé que se dedicaba a trasladar mulos a cuestas de un pueblo a otro. También felicité al padre de la novia, un tipo al que solo le quedaba un diente sano (¿Familia del cuñao? Podría ser…). Me quedé embobado viendo una redifusión de un partido del Altletic que se estaba jugando en el Wanda, cuando me fijé en la hermana de la novia. Que belleza… intenté llamar su atención de todas las formas posibles, pero ella tenía la vista fijada en algún punto a mi derecha. Después de un rato, vi que se acercaba, aunque seguía sin mirarme. Ella dijo: “Hola”. Yo miré a mi derecha, pero no veía a nadie… Ella siguió hablando: Me llamo Iri, aunque todos me conocen como Iri la bizca. (¡Puñetas, pues sí que me miraba a mí! Seguro que me ha visto cuando me he limpiado las manos en el vestido de una dama de honor). Me quedé tan absorto que ni siquiera le dije mi nombre. El caso, es que empezamos a hablar, fuimos a por unos perritos y me dijo: “Te voy a hacer tres preguntas y me tienes que responder sinceramente: 1- ¿Oro o plata?” Yo le dije que, si lo decía por elegir unos dientes postizos para su padre, cualquier cosa le iba a venir bien… Se quedó muy seria. Tal vez esperaba una respuesta más directa. Puede que fuera una pregunta tipo test. Puede que incluso me restara puntos. La verdad es que era muy difícil saber que pasaba por su cabeza. Me miraba de aquella forma tan… característica. Así como un poquito escorada a estribor. al cabo de un minuto volvió a hablar: “2: ¿calor o frío?” A ver, es que está pregunta era muy ambigua. A mí me gusta una mezcla de los dos, pero no siempre. Por ejemplo, cuando hace mucho calor en verano, le echo un puñado de hielos más a la sangría. O cuando hace mucho frío en invierno, le echo un par de palos más a la chimenea… pero luego está el gel efecto frío/calor… ¿Lo conocéis? ¡Es una guarrada! El anuncio dice: Es un gel muy bueno, es un gel muy bueno (voz cantarina)… ¡Una leche! La primera vez que me duché con él me quedé como como si me hubiera metido en una piscina de Vicks Vaporub de la marca blanca del chino.
En fin, que ella seguía con la mirada perdida hasta que llegó la tercera pregunta: ¿De qué conoces a mi hermana? Yo me metí todo el perrito en la boca para hacer tiempo hasta que se me ocurriera algo con qué salir del paso, con tan mala suerte que la salchicha resbaló, se me quedó en la mano y me comí el pan. le hice algún gesto diciéndole claramente: Ahora te respondo maja, tú sigue hablando… El caso es que me entendió perfectamente, porque me empezó a contar que si trabajaba en una ganadería, que si tenía animales, que si los alimentaba todos los días… y no sé que más, porque cuando me dijo que tenía tres almacenes llenos de paja desconecte. ¡Con lo afrodisíaca que es la paja…! ¡Y lo difícil que es masticar pensando en eso…! La parte buena es que cuando terminé de tragar se lo olvidó que tenía que responder y directamente me dijo que ahora me tocaba a mí preguntar. Ya sabéis que pregunta me rondaba por la cabeza desde hacía días, así que pensé: Esta es la mía. Justo cuando me metía la salchicha que había resbalado en la boca le dije: ¿A ti te gusta chupar…? Y no me dejó terminar. En un segundo su cara se incendió y se puso como si un demonio la hubiera poseído. Yo hice lo único que se puede hacer en esas situaciones: Correr. Y corrí por todo el salón como alma que lleva el diablo… sin querer le arranqué una cadena a la madre del novio y tropecé con el padre de la novia (el mellado) con tan mala suerte que cayó en la perola de agua hirviendo de las salchichas… Lo siguiente que recuerdo es verme esposado camino a pasar la noche en dependencias policiales. Cuando pensaba que la cosa no podía ir mejor, antes de subir al coche de policía apareció, Dios sabe de donde, Iri la bizca. Esta vez no dijo nada. Me arreó un sopapo que por un momento le vi los ojos derechos…
Y aquí estoy, con la cara ardiendo en un calabozo que ni siquiera es No Frost (que frío leche). ¿Quién hablaba de contrastes frío/calor?
Un policía me ha dicho que me está esperando en la calle una chica de mirada ausente echando espuma por la boca… Si es que en el fondo es buena gente. Me ha perdonado y no ha podido esperar ni a terminar de lavarse los dientes para venir a hacer las paces. Esta noche acaba prendiendo la hoguera. de momento acabo de ver tres pingüinos tiritando en una esquina… ¡Hay que fastidiarse! Esto sí que es Un mundo helado…
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