Directamente, me ha encantado. Es como un cuento, con tintes del folklore ruso, magia y personajes fuertes y carismáticos. Hay verdaderos villanos, malvados y crueles, otros grises, y personajes complejos en una trama entretejida con maestría. La ambientación te atrapa de tal manera que hasta sientes el frío y la nieve, el misterio y las ganas de saber qué pasará a continuación. Va alternando la narración entre unos y otros, pero no se hace confuso en absoluto, ya que cada voz está tan bien definida que es fácil saber a quién pertenece cada una. Sé que hay opiniones opuestas con respecto al romance, pero a mí, sinceramente, me ha parecido precioso. Lo he disfrutado muchísimo, y estoy segura de que será un libro que volveré a leer. |