Lolita

A pesar de todo lo que este libro ha generado en mis compañeras de grupo y otros lectores, a mí me ha dejado indiferente.
Quizá es que he leído cada cosa, que ya nada me asombra o perturba demasiado. ¿Era Humbert Humbert una persona normal? No, era una persona con grandes problemas psicológicos y unos gustos sexuales descarriados, abominables. ¿Era Lolita completamente inocente, un ser pervertido por un mayor? Tal vez, a pesar de ser una niña precoz sexualmente, que ella misma en ocasiones busca al protagonista, se supone que es el adulto quien tiene que poner los limites.

El único momento en que la novela me ha conmovido un poco hacia el lado de la pobre Dolly, es al final, cuando el protagonista rememora viejos recuerdos, cómo transformo para mal, la niñez y adolescencia de Lolita con sus perversiones, pasiones y celos desmedidos.

Eran dos personas (un adulto y una niña) perdidos en sus deseos y pasiones desvirtuadas.

Lo que mas me ha llamado la atención es como un autor puede escribir una novela así, tan exquisita en sentimientos y deseos, tan estudiada en profundidad la psicología del protagonista, es que se escriba una novela de esta índole sin haber vivido o sentido alguno de esos sentimientos, me parece algo contado desde adentro con todo el sentimiento, no una confusión pero si una manifestación de gustos y preferencias. Nunca se sabrá que pasaba por la cabeza del escritos al hacer esta novela y por cierto que no me convence la explicación que da el mismo al final del libro.

Un libro para leer porque pertenece a la "literatura universal" pero que ciertamente desde mi punto de vista no es una obra imperdible.