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Compré éste libro con muchas espectativas, la portada me encantó y me llamaba a gritos y ha sido todo un descubrimiento. Son quince relatos de terror, algunos muy cortitos pero no por ello menos impresionables. Me ha gustado mucho su forma de escribir sin florituras. Los relatos me han recordado mucho al tipo de terror que veíamos en alguna que otra serie de televisión de los ochenta, estilo a Creepshow, te saca la vena macabra de cualquier cosa mundana. Uno de los relatos que más me han gustado es La camisa, donde un matrimonio se traslada a Canadá por motivos laborales, me ha impresionado bastante. En general es un libro de relatos que dan muy mal rollo pero que te dejan con muy buen sabor de boca. Lo recomiendo 100% |
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