La vida secreta de los escritores

La mayoría de los escritores sueñan con el éxito. Un éxito que, cuando llega (si es que lo hace) es difícil de soltar. La mayoría de las veces lo que sucede en realidad es que el éxito se pierde porque los lectores se cansan de lo que escribe el escritor y las grandes editoriales dan la espalda. Es decir, casi nadie renuncia al éxito por gusto. La pregunta es: ¿qué podría llevar realmente a abandonarlo todo a un escritor que ha conocido los placeres del triunfo en su profesión? Este es uno de los misterios que Gillaume Musso nos invita a descubrir en su nueva novela, La vida secreta de los escritores; precisamente el libro que comentaremos a continuación.
Tras conocer el mayor de los éxitos con sus tres novelas publicadas, Nathan Fawles decide retirarse a la idílica isla de Beaumont, en el mediterráneo francés, a los treinta y cinco años de edad. Casi veinte años después, acudirán a la isla dos personas en su busca. La primera de ellas es Raphaël Bataille, un joven aspirante a escritor que ve en Fawles todo lo que a él le gustaría llegar a ser; y la segunda, Mathilde Monney, una joven periodista suiza que aparece justo el día en el que lo hace el cadáver de una mujer en la playa. Está claro que Mathilde busca más en Fawles que el cándido Raphaël, pero, ¿qué exactamente? ¿Y qué tendrá que ver la mujer asesinada en todo este asunto? ¿La habrá matado el escritor?
Beaumont es una encantadora isla francesa en la que la afluencia de turistas y el asentamiento de nuevos residentes están muy limitados por expreso deseo de sus habitantes originarios. El lugar es el refugio ideal para Nathan Fawles, un escritor que, tras conocer el total beneplácito de crítica y público, decidió retirarse misteriosamente un buen día. Aunque él afirme que no hay ningún misterio, si no lo hubiera está claro que no tendríamos trama para este zigzagueante thriller. La cuestión es: ¿hasta qué punto es complicado aquello que le llevó a dejar de escribir cuando estaba en lo más alto de su carrera?
Buena parte de esta historia nos es contada por Raphaël, un muchacho de veinticuatro años que lo ha dejado todo por ser escritor. Para él es muy importante que su ídolo le dé su bendición. Es por ello que acude a la isla, en calidad de empleado de la única librería, para mostrarle su manuscrito. Lo que allí encuentre, desde luego, será mucho más de lo que pudiera haber esperado nunca antes.
Mathilde, por su parte, es una inteligente y misteriosa mujer capaz de hacer cualquier cosa por sacar al lobo de su guarida. El lobo, por supuesto, es Fawles. Aunque, ¿será tan fiero como esperamos?
La vida secreta de los escritores no es solo el nombre de esta novela, sino también el de la que Raphaël se supone que está escribiendo. Guillaume Musso ha jugado inteligentemente con el título para mostrarnos varios niveles de lectura en su historia. Así, por un lado, nos encontramos el enrevesado thriller ubicado, en su mayor parte, en la paradisíaca isla francesa en la que el famoso escritor se ha refugiado; y, por otra, el libro de escritura creativa que podríamos armar tanto con las reflexiones de sus protagonistas, acerca del mundo de las letras, así como con las interesantes citas de tantísimos escritores de éxito reconocido (Margaret Atwood, John Steinbeck, Umberto Eco, Milan Kundera y un larguísimo etcétera) que nos hablan de lo que de verdad es ser escritor: de esa vida que no es secreta en realidad, pero que sí pasa desapercibida porque para muchos lectores la escritura ha de tener algo de mágico, tal vez de divino, cuando en realidad es algo mucho más mundano de lo que parece.
La vida secreta de los escritores, en definitiva, es un interesante thriller, lo que estoy segura de que os hará vivir esta lectura con emoción. Pero también, y sobre todo, un homenaje a los escritores, al sacrificio que supone escribir, a todos los momentos de soledad y los aspectos que solo los que escriben parecen tener en cuenta. Un libro que te ofrece la oportunidad de conocer tantos secretos, ¡una oportunidad única que no deberías dejar escapar!

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o cierto es que cuando leí la sinopsis de este libro me pareció que se planteaban varios temas, quizá dispares, y me entró la curiosidad de saber cómo se iban a entrecruzar.

Sin embargo, debo decir que he tardado mucho en entrar en la narración. Cuando llevaba cerca de la mitad del libro aún me preguntaba qué pintaba en toda la historia el joven escritor que desembarca en Beaumont buscando a su autor referencia: Nathan Fawles. Personaje del que no se comenta absolutamente nada en la sinopsis y que es quien encabeza los primeros capítulos de la lectura.

Eso sin tener en cuenta que me cuesta tremendamente cuando una novela entremezcla textos y narración. A ver si me explico. Entiendo cuando en medio de una trama un personaje escribe / recibe, por ejemplo, una carta o similar, y eso sirve para acciones futuras o para argumentar algo del pasado que tiene repercusiones en el presente. Pero no es lo que nos encontramos aquí. En este libro hay una narración base: la historia del escritor de éxito retirado (por motivos misteriosos). Ese hilo es el que argumenta la aparición del resto de actores. Pero luego el autor decide incluir entrevistas sobre Nathan y otros textos que le tienen de protagonista, y que tampoco aportan (a mi juicio) demasiado.

Dicho esto, es evidente que la obra me ha gustado, así que voy a explicaros las cosas positivas.

Las descripciones de ambientes son magistrales. Se nota la buena pluma del autor en este punto, al igual que si hablamos de los personajes fuertes de la novela, que serían tres: Nathan Fawles, Mathilde Mooney y Raphaël Bataille.

El problema principal que le encuentro es que me surgen bastantes dudas a la hora de terminar el libro, no termino de sentir que me he quedado a gusto con la lectura, sobre todo siendo autoconclusiva. Es decir, ¿puede estar bien construido un hilo argumental si tengo cuestiones abiertas incluso con el propio papel de personajes principales de la obra? No sé qué os parece a vosotros.

En cualquier caso, creo que es una novela que los amantes del thriller van a disfrutar mucho, así que os la recomiendo.
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Hay novelas que se leen en un suspiro. La vida secreta de los escritores (2019), de Guillaume Musso, pertenece a esa categoría. Entiéndase esto como un elogio.

Nathan Fawles ha sido un escritor de éxito y estrella mundial. Sin embargo, en 1999 toma la decisión de alejarse del mundo y no volver a escribir. Su retiro es una espectacular casa, casi una fortaleza, situada frente al mar en la isla de Beaumont, en la costa mediterránea francesa.

Veinte años después llega a la isla un joven escritor llamado Raphaël Bataille, en busca de su esquivo ídolo. Casi al mismo tiempo desembarca también en Beaumont una mujer llamada Mathilde Monney, dispuesta a desenterrar un terrible secreto sobre la vida de Fawles.

Aunque la historia está narrada en tercera persona, Bataille nos explica sus aventuras y sus descubrimientos en primera persona. Sin darnos cuenta, en pocas páginas nos hallamos metidos de lleno en el microcosmos de la isla y atrapados por una historia de intriga que parece no tener sentido. Hay que leer hasta el final para conocer, “la verdad indecible”, como la llama Fawles. Y entonces todas las piezas del rompecabezas encajan.
(Leer la reseña completa en el enlace):
Enlace: https://humildelector.com/20..

Nathan Fawles lleva retirado veinte años y nadie sabe porqué. Un día, llega a la isla, un chico que "intenta ser novelista" y le pide que lea su obra antes de entregarla a alguna editorial. Después de decirle que no, su perro desaparece y lo encuentra una periodista. Cuando iba en busca de su perro, encuentra un cadáver, una mujer llamada Apolline. A partir de ahí, es cuando la periodista (Mathilde) y él empiezan un juego del más peligroso, en que la verdad no es lo que parece y tienen que retomar el pasado tanto de ellos como de Apolline y Karim. Un personaje que me sorprendió porque no hizo "nada" en todo el libro, es el librero Audibert.

Un libro entretenido, ágil, muy del estilo del autor, de esos que enganchan. Confieso que el principio me costó un poco entender de que iba el libro y por lo tanto su lectura, pero una vez que me metí en la historia fue un leer sin parar.
Una trama original, tanto por lo que cuenta y por como elige el autor contarlo, el final me dejó con una sensación rara, una confusión entre realidad y ficción que no me terminó de cerrar.
En conclusión, me gustó, es un libro entretenido, que se lee rápido, pero que para mi no fue el mejor libro que leí de este autor y creo que me dejó esta sensación por las cosas que no me terminaron de cerrar.

¡Libro perfecto para verano!

Corto, con una historia que te atrapa, personajes interesantes y giros de infarto. Me encantan los libros que tengan que ver con el mundo literario y las referencias a otros autores, y en este caso lo he visto como una mezcla entre el Harry Quebert de Dicker (fama, folios en blanco, bloqueo escritor, editores, plazos de entrega y demás) y la escritura/trama de Mikel Santiago (escritor que se refugia en una isla perdida de nosédonde + cadáveres + misterios…)

Se podría leer en una tarde (me he obligado a parar para que me durase un poco más) pero que después de unos días siga pensando en él es buena señal. Destacaría que me ha producido una especie de amor-odio hacia las últimas páginas ya que el final ha sido un poco brusco, como si el autor estuviese deseando acabar cuanto antes, pero en cambio el epílogo ha sido genial.

“La única salvación para el vencido es no esperar alguna…” Virgilio-capítulo 10 Los escritores contra el resto del mundo-.

Me ha gustado este entretenido thriller, de lectura ágil, lenguaje y personajes sencillos y con una trama interesante, aunque ha habido algunas cosas que no me han terminado de convencer, muy "pilladas por los pelos", luego la novela empieza a ponerse interesante a partir del 60% del libro, demasiado tarde para ser un libro corto y con el final, me esperaba otra cosa....Así y todo es ideal para desconectar.

Me llamó mucho la atención por su título y su sinopsis, me gustan las tramas con escritores, pero no me ha acabado de entusiasmar. Novela corta que se lee del tirón con una ambientación ficticia en una isla que podría haber dado más de sí. Un autor famoso que, con tres novelas publicadas lo dejó todo y se retiró, y la narración en primera persona de un autor joven con un manuscrito rechazado por varias editoriales que va hasta la isla a trabajar en una librería a punto de cerrar llevado por el famoso autor retirado al más puro estilo Salinger. Aparece un cadáver, una periodista... y una cámara fotográfica que ha estado dando vueltas durante años y destapa un triple asesinato del pasado de una forma un tanto inverosímil. Con el final he tenido un sentimiento agridulce. Por un lado, me ha gustado, pero por el otro, he sentido que el autor me ha engañado durante toda la trama.

Nathan Fawles es el autor del famoso libro "Lorelei Strange", luego de haber publicado su última obra, se retira a una isla del mar Mediterráneo para evitar a la prensa, ya que no piensa volver a escribir, ni dar entrevistas, ni nada, solo quiere estar solo y que nadie sepa de él
.
Raphael llegó hace poco a la isla y trabaja en una pequeña librería, es un gran admirador de Nathan y decide ir a verlo para pedirle que lea lo que él escribió y le dé consejos, ya que todas las editoriales a las que ha presentado su escrito lo han rechazado. Así que un día se acerca a la mansión y como no puede entrar empieza a trepar por las rocas, una vez que el autor lo ve comienza a dispararle con una escopeta, mientras Raphael le dice por qué está ahí y le lanza la mochila con su libro.

Tenemos también a Mathilde, una periodista que se acerca hasta la mansión a llevarle el perro perdido a Nathan, y como la hace pasar ella comienza a hacerle preguntas, pero Nathan le corta el interrogatorio y la echa; ella se despide diciéndole que ya se conocían, de cuando ella tenía catorce años.

Entre todo esto, aparece una persona clavada en un eucalipto, la policía toma medidas y no deja que nadie entre ni salga de la isla. Pero al parecer ésta persona está relacionada con Nathan y Mathilde...

Bueno, no estoy muy segura de cómo hacer esta reseña. La historia en un comienzo me pareció super lenta y los personajes tienen actitudes que se alejan de la realidad o que no terminé de entender por qué actúan de ciertas formas. Cada uno tiene una voz propia, queda muy claro quién hace qué cosa, pero no pude empatizar con ninguno... si bien Nathan me parece interesante, sus cambios de carácter hacía que me tiraran para atrás.

La ambientación está bien planteada, sin detalles excesivos, que hacen que puedas posicionarte en todo momento en los lugares donde pasan las cosas, la descripción de la pequeña librería en la que trabaja Raphael dan ganas de visitarla.

Lo que más destaco, que me encantó son las referencias literarias, nombran libros, autores, hay citas literarias, y hay reflexiones muy interesantes hacia el mundo literario en general, hacia las editoriales, hacia la pasión de escribir y de leer.

Lo que no me convenció para nada es el ritmo. Como les dije más arriba, al comienzo es lento, en la mitad toma mayor velocidad y se vuelve interesante, todos tienen secretos, todos saben cosas de los demás (o las sospechan), pero sobre el final, la cantidad de cosas que pasan es demasiada y se vuelve extenuante. Eso y si contamos que el final no me convenció para nada...

La vida secreta de los escritores es una historia donde los secretos salen a la luz y se quiere cobrar venganza; donde todos suponen conocer lo que los demás ocultan y terminan tomando decisiones de las que luego no hay vuelta atrás.
Enlace: http://letrasplutonicas.blog..

Este libro se ha ganado una posición en mi top del género thriller.

Todo sucede en la isla de Beaumont, un lugar discreto donde sus habitantes buscan privacidad y tranquilidad. Aquí vive Nathan, un escritor que con varios libros de éxito en el mercado, hace años se retiró de forma repentina e inesperada del paronama público. No ha vuelto a escribir y no quiere ser una figura famosa, por lo que pasa sus días en una gran casa en esta isla junto a su perro.

Aparecen en escena dos personajes. Un muchacho fan de Nathan que ha escrito un libro y quiere publicar, que se ha trasladado a la isla para trabajar en una antigua librería. Y por otro, una periodista que al principio no sabemos por qué motivo ha llegado a la isla... El tema es que de pronto la isla queda cerrada a tráfico porque aparece un cadáver de una mujer asesinada.

Con estos personajes y este escenario empieza la investigación en la que cómo imaginaréis todos estos personajes están relacionados. Es una lectura que me ha enganchado muchísimo, porque unido a los interrogantes del asesinato aparecen secretos del pasado de los personajes y una trama con bastante intriga.

Aparte, la estética y la ambientación de la historia es genial: una isla idílica, misterio, escritores... ¡Fabuloso! Además creo que este libro para las personas que aspiran a ser escritores (o ya lo son) les puede resultar muy interesante porque hay escenas relacionadas con la escritura con las que podrían sentirse identificados.

Los personajes son cercanos y bastante profundos. El autor consigue que empaticemos rápidamente con ellos y que tanto en los momentos felices como en los más duros sintamos esa sensación de protegerlos, porque os advierto que con algunos se os puede caer alguna lagrimilla.

La pluma del autor también ayuda bastante porque es muy fácil de leer. Me ha parecido que tiene un estilo muy especial, porque utiliza una prosa con una amplia riqueza léxica pero a la vez con lenguaje coloquial que hace que sea una mezcla bastante sorprendente y resulta una lectura muy cercana.

Es uno de los trhillers que más me ha sorprendido, es muy impredecible y ha conseguido impresionarme de principio a fin. El final, como los que me gustan, con giros y sorpresas pero en el que todo cuadra.

En resumen, muy recomendado, una lectura bastante completa y que los amantes del género estoy segura que lo disfrutarán.