Amistad de juventud

Alice Munro es una de mis escritoras favoritas y quizás también es la culpable de que me lea tantos relatos, cuentos, que no son más que otra forma de descubrir también autores nuevos, porque ¿qué mayor talento puede tener un escritor que comprimir toda una vida, toda una historia en unas pocas páginas?? Alice Munro es una maestra en este aspecto y la culpable, como he dicho antes, de que a través de ella, llegara a otros magnificos cuentistas. En mi caso concreto, primero fue Alice Munro y luego vino Chejov, Si, es un sacrilegio pero ya digo, gracias a ella llegué a los demás.

"Tienen una historia de pasión, del mismo modo que tienen una historia las familias, o las personas que han ido juntas a la escuela. No tienen mucho más. Nunca han comido juntos, ni han ido a ver una película".

La maravilla de sus historias radica quizás en su forma elíptica de narrar, sus saltos en el tiempo: no te lo te cuenta todo o si te lo cuenta, lo hace de una forma soterrada. Uno de sus cuentos puede ser también varios cuentos a a vez, lo que me parece un prodigio total, la capacidad de la autora de saltar de una historia a otra dentro de un mismo relato mientras que cuenta como niñas crecen y se convierten en mujeres, otras se arriesgan en infidelidades y que también las hace crecer como mujeres, y otras envejecen recordando su juventud. En mi caso cuando empiezo uno de sus libros de relatos es como abrir una caja de tesoros. Es complicada a veces en el sentido de que parece que te escondiera algo durante la lectura, pero cuando llegas al final de sus relatos, te sientes en la necesidad de reelerlo para descubrir más capas escondidas, quizá por una pista o por un pequeño detalle que te deja entrever entre lineas hacia el final.

"Los problemas empezaron, quizá, en cuánto se dijeron que se amaban ¿Por qué hicieron aquello: definir, exagerar, confundir lo que fuera que sintieran?" Parecía algo obligado eso era todo...."

En "Amistad de Juventud" no hay historias malas, solo hay una con la que no conecté pero eso no significa necesariamente que sea una mala historia. Todas tienen el nexo común de la amistad, de amigas que se reencuentran, otras, amigas que se traicionan, y en la mayoría de los casos, esto solo demuestra que en la vida no hay blancos ni negros, sino una infinidad de gama de grises. A continuación, pequeñas reflexiones en torno a los nueve cuentos de esta antologia:

1.Amistad de juventud: lo que no se dice o no se cuenta pero que Alice Munro consigue colar entre lineas, es siempre lo más fascinante de sus cuentos. Aquí la narradora empieza hablándonos de su madre pero termina hablando de Flora, una amiga de juventud, uno de esos personajes femeninos munronianos elípticos y llenos de aristas. Ambiente rural y mujeres nada idealizadas, todo lo contrario. Me flipa esta escritora.

2. Five Points: Dos historias entrelazadas: por un lado la de Brenda, envuelta en una relación extramarital con Neil y por otro la historia de Maria, que surge del recuerdo que Neil tiene de ella. Dos historias que tienen en común el sexo, usado como un poderoso lazo de manipulación, de control... Una historia lleva a la otra, como una de esas cajas chinas que se multiplican.No hay nada que dure eternamente.

3. Meneteseung: La narradora (la misma Alice Munro, imagino) reconstruye la vida de Almeda Roth, una poetisa que vivió entre 1840 a 1903, y lo hace a través de un prólogo de uno de sus libros y del periódico local, pero lo bueno es como la narradora va creando su propio personaje: la crea o la imagina, no como la ven otros, o como lo que le llega de ella. Un cuento magistral.

4.Agárrame Fuerte, No Me Sueltes: Una viuda viaja al pueblo donde su marido pasó parte de su estancia durante la guerra. Su marido se pasó décadas hablando de las anécdotas y del amor de juventud de aquellos años. Pero cuando la viuda llega, nadie se acuerda ya de Jack...la memoria y los recuerdos son tan selectivos y subjetivos. ¿Quizás los recuerdos de Jack tampoco eran objetivos y se los medió inventó?

5. Naranjas Y Manzanas: Este es uno de sus cuentos más elipticos, quizás haya uno o dos cuentos más que se podrían sacar de aquí, leyendo entre lineas. Murray nos habla de como conoce a su mujer y de como se casa con ella, y de como un día cuando llega a casa, su vida cambia por completo. Es una maravilla de cuento porque una vez terminado, te das cuenta que si lo relees quizás podrías verlo desde otra perspectiva.

6. Fotografías de Hielo: Austin tiene 70 años, recién viudo y está a punto de rehacer su vida. En apenas unas pinceladas, la Munro te hace un retrato de un hombre con una vida que había sido plena, y que ahora, se siente inútil, aunque durante todo el cuento no es eso lo que parece. Y las primeras frases del cuento son toda una declaración de intenciones. Deja un sabor agridulce este cuento pero es la vida misma.

"Los padres y los hijos, Karin -dice suspirando, suspirando jocosamente-. Oh, que red tan enmarañada tejemos cuando tenemos hijos. Luego ellos siempre quieren que seamos los mismos, quieren que seamos padres... Les trastorna terriblemente que hagamos algo que ellos no creían que fuésemos a hacer. Terriblemente."

7.Oh, de Qué Sirve: Es de las historias que menos me han gustado de Alice Munro, encima está dividida en tres partes y se hace eterna. No me voy a extender porque no disfruté con ella.

8. de Otro Modo: Otro de esos cuentos donde Alice Munro explora sobre la complejidad de las relaciones ¿amorosas? o la infidelidad. En esta antología hay otro cuento parecido que habla sobre infidelidades, pero realmente de lo que te está aquí hablando es de Georgia y de su relación de amistad con Maya. Por lo que sé de la vida de Alice Munro, podría ser algo autobiográfico porque Georgia también trabajó en una libreria oyendo las historias de los clientes que entraban, pero no es tan importante este detalle.

9. El Día de la Peluca: Otra nueva historia de amigas que se reencuentran, y ese reencuentro lleva a Anita a recordar su adolescencia con Margot, ambas hijas de granjeros, unidas en sus bromas y en la tonteria de la edad. Pero algo ocurre que las distancia, un hombre... y cuando ya adultas se vuelven a reencontrar y a recordar..., quizás el prisma y la perspectiva ya no sea igual, la vida misma. Un cuento maestro.

"Ella se siente inquieta, pero feliz. Su felicidad es hermética y privada, no de la clase que sale de uno y lo empaña todo y te hace desconsiderado con lo que dices. Muy al contrario. Se siente ligera, hiriente e inconexa."
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