 |
No tenía ni idea de que este libro iba a gustarme tantísimo. Últimamente no he leído muchas distopías y las que he leído estos últimos años no me han terminado de convencer, así que ha sido una muy grata sorpresa que "La rebelión de la mariposa" se haya postulado para ser una de mis mejores lecturas de este año. La historia me interesó gracias a los comentarios de redes sociales y la promoción que hubo en Valencia, por lo que leerlo en una lectura conjunta ha sido una decisión magnífica. Esta novela juvenil se ambienta en España, en concreto, en un Madrid distópico de dentro de unos 90 años, aproximadamente, y en el que los animales han muerto. No conocía ninguna distopía que se ambientara en España, así que me ha gustado mucho ver cómo adapta y relaciona las inmediaciones de una ciudad actual a un hipotético futuro. La autora emplea los túneles del metro, las calles que conocemos y otros edificios conocidos como el Palacio Real para ubicar la historia de una forma impecable. La sociedad de este Madrid futuro se presenta como una república utópica, pero solo hay que leer las primeras páginas para ver que se trata de una dictadura. La novela está llena de crítica social y no hay puntada sin hilo, todo tiene una razón de ser. Critica aspectos de la sociedad actuales o antiguos que tuvieron lugar como la esclavitud, la prostitución, la discriminación, la violencia de género, violencia a los hijos o, simplemente, violencia; la separación de la sociedad por "ricos" y "pobres", aunque con otros nombres. Como toda buena novela distópica, hay un grupo reaccionario que le hace frente al gobierno y un fuerte peso de la prensa y las apariencias en la sociedad, un detalle que me recordó mucho a la trilogía de "Los juegos del hambre". En la novela hay momentos en los que se te olvida que estás leyendo ficción porque las injusticias se hacen muy reales, aunque, si te paras a pensarlo, algunas de ellas lo fueron y siguen siéndolo. Mis personajes favoritos han sido Abel y Zeta, aunque Eva y Cobra se quedan también en mi corazón para siempre. |
>
