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Este libro le tenía fichado: narrativa histórica en África. Hace mucho que no leía algo ambientado allí y me puse a ello, Un piano para los masáis. La novela narra la historia de los hermanos Kast en los primeros años del siglo XX. Leopold Kast recibe una carta de su tío Bertram para que vaya en su busca a África ya que quiere volver a su patria, Alemania. Leopold acepta y vuela hacia allí a pesar de las voces que le dicen que su tío es mala persona y que no debería acudir. Decide ir y preguntar a su tío la verdadera historia entre él y su padre, muerto en África… ¿tendrá que ver su tío algo con la muerte de su padre? La verdadera historia ocurre en los años 1905 ya con los hermanos Kast: Frank, el padre de Leopold, y Bertram. Frank está deseoso de viajar y vivir en África, pero su hermano no quiere, cuando Frank decide ir con su reciente mujer Gerdi a la zona alemana de África, su hermano se siente obligado a cuidar de él, y decide seguirlo en su aventura africana y llevarse a su enfermiza mujer con él. En África sufrirán mucho, vivirán cosas inauditas y sufrirán un cambio radical en su vida. Bertram es el gran protagonista de esta historia, una persona obsesionada con su hermano y su mujer Jocelyn, en cuidarlos y sobreprotegerlos… una persona llena de dolor y rabia que en diferentes momentos tiene ataques de ira y solo le puede doblegar su mujer con esa especial y armoniosa música cuando toca el piano, pero con la llegada a África, todo se vuelve oscuro, malicioso y obsesivo ya que ese piano nunca llega. Un personaje con muchas sombras que sorprende con una evolución mágica y que espera contando su historia a su sobrino una posible redención, y consiga hallar por fin el perdón y pueda descansar tras una trágica y complicada vida. Jocelyn en cambio consigue esa fuerza para subsistir en un ambiente hostil, pero a la vez fácil por la cercanía con los nativos que tiene. Un personaje femenino bien construido y que consigue transmitir muchos sentimientos al lector. Un piano para los masáis es una completísima novela de ficción histórica. Con una ambientación crucial y muy visual tras la que entenderemos la belleza y la obsesión por ocupar estas tierras. Me ha parecido una maravilla este libro porque mezcla la historia del país y sus conflictos políticos-bélicos en los que la Primera Guerra Mundial llegó y se materializó de forma distinta que en la viaja Europa con la historia ficticia de los personajes. Allí en unas tierras inhóspitas, llenas de gente africana, de tribus diferentes que querían y creían en sus derechos y en sus tierras, llegan unos alemanes que invaden su territorio y que deciden hostigarles para que trabajen para ellos… narra una historia que aunque sea ficcionada narra muchos hechos verídicos y con personajes reales alberga una carga emocional trágica importante: se transmite al lector ese halo de amargura de todos ellos porque todas historias (de amor o de superación) contienen mucho dolor. La novela me ha gustado muchísimo. Es muy completa, visual y aunque tiene algún aspecto que no me ha encandilado, defino a la novela como especial y muy emotiva. Los aspectos menos apetecibles quizás es la exagerada y minuciosa explicación de la guerra, de los aspectos más feos y rudos de ésta. Llega a ser algo denso y aunque la prosa y la narración son muy fluidas, no ha conseguido despertar mi anhelo por leer esa parte. Lo que sí me ha encandilado es el ambiente y el exotismo que destila, los secretos y los engaños que hay, la intriga por saber si volverán a encontrarse, y simplemente conocer la historia de Bertram que es ya de por sí muy interesante. Una historia sencilla y atractiva ambientada en un contexto histórico real lo que conlleva detrás un gran trabajo de documentación. Una novela muy entretenida que termina con un desenlace muy emocionante. Enlace: https://eltemplodelalectura... |
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