El salto de la araña

Cuando lo has perdido todo, solo te queda volver la vista atrás.

A ninguno nos gusta reconocer que nos hemos equivocado. Vivir ese momento en el que lo ves todo con claridad, en el que asumes que nadie puede sacarte del pozo en el que tú mismo te has metido. El momento en que en el espejo solo está tu peor cara.

Dicen que la ignorancia es atrevida. Yo diría que más que atrevida es estúpida. Cuando no sabes lo que haces, y sobre todo, cuando no sabes con quien tratas, haces estupideces.

Cuando empieza tejer, se la juega, tira su hilo y allá va, es un salto al vacío. El salto de la araña. No sabe lo que se encontrará, si va a ser o no un buen lugar para atrapar a sus presas o vendrá otro animal a rkmpérsela; lo hace porque no tiene más remedio. Es su instinto. Pura supervivencia.

Alba era una yanqui de las emociones, estaba enganchada al sentimiento; todo lo vivía al máximo, en grado superlativo, ya fuese bueno o malo.

...creo que nos gusta inventarnos excusas, pensar que no podíamos haber hecho otra cosa, que nuestras decisiones fueron las correctas en ese momento y en ese lugar. No deja de ser una forma de protegernos, una estrategia para aceptarnos, para no volvernos locos. Forma parte de nuestro egoísmo. Porque somos despiadados con los demás pero siempre nos falta valor para serlo con nosotros mismos.

Porque nuestros actos tienen consecuencias, y los de Alba no iban a a ser la excepción. Y los míos, tampoco

Romperte la cabeza pensando en qué momento se torcieron las cosas por culpa de eso que algunos llaman destino, o si solo ha sido la mala suerte. Y te engañas un tiempo, no demasiado, porque sabes que eres el único culpable de las decisiones que tomaste un día.