Hijas del castillo Deverill

Advertencia: Hijas del Castillo Deverill es la segunda parte de la saga de Las crónicas de los Deverill.

Dicen que a veces las segundas partes no son una buena idea o que en una trilogía la segunda parte es la más floja pero aquí afortunadamente no pasó así. La autora sigue deleitando al lector con una pluma tan detallada que te mantiene completamente absorto en la historia, te transporta desde Londres, Irlanda y Sudáfrica con una facilidad que cautiva a cualquiera y nuevamente sus más de 500 páginas pasan inadvertidas.

En esta ocasión volcaremos la mira hacia Celia Deverill, su personaje logra un desarrollo muy notorio pues deja de ser la jovencita sosa para alcanzar una madurez que la convierte en pieza clave de muchos de los acontecimientos que se van desarrollando a lo largo de la historia. Gracias al esplendido Archie, ella se convierte en la nueva dueña del castillo pero desafortunadamente con la más catastrófica caída del mercado de valores, mejor conocida como la gran depresión, vuelve a caer la desgracia en el castillo y ¡de qué manera!

Ahora todos los chiquillos de aquella primera parte se han convertido en adultos que ya no sé dejan llevar por sus instintos y piensan más en lo que es menos perjudicial para todos. Kitty se convierte en una adulta simplona y conformista, inclusive las hermanas Arbolillo resultan más interesantes que ella. Por otro lado, lograremos conocer un poco más el interior de Bridie y por un momento nos hará justificar su comportamiento, pero solo por un momento… La fortuna se ha puesto de su lado y ahora es una mujer adinerada y resentida que no puede dejar su pasado para ser feliz a pesar de que su "éxito" en la sociedad llega a tal punto de que ahora llevará el título de Condesa.

En lo personal, disfrute más esta segunda parte que la primera porque aun cuando se deja un poco de lado el tema de los fantasmas, la autora nos ameniza con aproximadamente 10 años más de la vida de esta familia tan peculiar que te hace sentir que todos tienen su momento, que no te quedas sin conocer más a fondo a alguno de los personajes y eso es algo que yo disfruto mucho.

Mis partes favoritas sin duda fueron cuando se profundizo más en la maldición que persigue a los Deverill y en cuanto a los personajes, no podría decidir cuál es mi favorito pues todos están en constante evolución, pero la aparición que más disfrute fue la de Martha Wallace y ni qué decir del salseo que provocaron Harry y Boysie :S

En resumen, si les encanta conocer la vida de todos los personajes, como a mí, las Crónicas de los Deverill ¡les encantará! Es de esos libros en los que no puedes amar a un personaje porque en los próximos capítulos lo estarás odiando y ni que decir de los giros de la historia… ¡Me fascinan los Deverill!