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Que decir de este libro, no me esperaba gran cosa y aún así me ha logrado decepcionar. El libro cuenta la historia de Valentina una chica de un pueblo de Alicante que va a mudarse para empezar la universidad a Madrid y allí se encuentra con un chico de su pueblo. El resto os lo podéis imaginar. La verdad es que la historia en sí no está mal, pero tiene varios fallos bajo mi punto de vista. Para empezar los personajes son muy simples y no he conectado con ninguno de ellos, solo salvo a Rafa. La protagonista tiene un resentimiento hacia su madre comprensible en cierta manera ya que los abandonó de un día para otro para vivir con otro hombre, pero es que defiende a su padre a capa y espada cuando fue el primero en ser infiel a su mujer. Luego deja la universidad tras el primer día de clase argumentando que no se siente cómoda siendo solo un número más para los profesores y que no sintió ilusión tras el primer día de clase. Que siguiendo ese planteamiento ya os digo que las universidades estarían vacías. Además pone a las personas que no beben café como especiales ya que las hace diferentes a las demás, cosa que no entiendo. Por no hablar de que hay cosas que no se explican bien o lo suficiente y aparecen demasiadas ideas preconcebidas del tipo ya sabemos como son los hombres, etc. Además yo no soy muy fan de este tipo de historias con lo que no me ha gustado nada.
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