Postales del Este

En Auschwitz la vida siempre podía esperar. Era la muerte lo que realmente urgía.

Kramer (oficial SS) había llegado a derramar alguna lágrima, conmovido al final de la interpretación del sólo del violín. Lloraba el mismo hombre que esa mañana había reventado la cabeza de una presa de un disparo por no haberse detenido cuando le grito que lo hiciera. No valoró el hecho de que fuera sorda.

La normalización del mal. Eso era Auschwitz-Birkenau.

No dejes nunca de contar a las nuevas generaciones lo que nos pasó. Las personas olvidamos muy rápido, sobre todo los jóvenes. No puede volver a suceder. Nunca más.

No intentes entender la vida, Bella. No eres tú quien vive la vida, es la vida la que te vive a ti; te atraviesa y existe a través de ti, te utiliza, que va poniendo el lugares y ante personas que tú no eliges, y te obliga a seguir, pase lo q pasé.

Siempre es más difícil contar historias que escucharlas o leerlas.¿Por qué crees que los supervivientes necesitamos tanto tiempo para poder narrar lo que vivimos? Y aún así, siempre hay gente que no quiere escucharlo, que no nos creen, que tienen más preguntas que respuestas necesitan. Así es el ser humano

La raza germánica es superior a las otras razas y la lucha contra el judío, contra el eslavo, contra todas las razas inferiores es una guerra santa. Si el judío, con la ayuda de su credo socialdemócrata, o bien, del marxismo, llegase a conquistar las naciones del mundo, su triunfo será entonces la corona fúnebre y la muerte de la humanidad.

La farsa llegaba a la antesala de las cámaras de gas, donde se aconsejaba a los prisioneros que recordaran el número de percha en el que dejaban la ropa.

Si alguien te dedica unas palabras, es porque sabe que existes, y eso te hace sentir querido.

La flor de loto nace en el fango, y no sólo es bellísima, sino que renace cada día, y cada día es más hermosa, resistiendo a la adversidad, plantándoles cara a los que la dan por muerta.