Postales del Este

Antes de comenzar creo que es justo que advierta que la novela de Reyes Monforte es extremadamente dura, y que pondrá, seguramente, al límite la capacidad de aguante de cualquier lector medianamente cuerdo.

Ha habido episodios donde he tenido que parar, abrir las ventanas de mi resistencia y ventilar.

Oxigenar un alma que continuamente vencida, cae en una desazón insoportable hasta que logra recomponerse y decide continuar.

Sin embargo, es necesario rogar que el mutilado leyente no se de por vencido, pues el libro tiene un propósito que Monforte nos cuenta al final del texto y que justifica el apocalíptico relato.

Aún no he sido capaz de depurar el profundo asco que por mis venas ha ido fluyendo página a página.

En lo más intimo de mi ser se ha instalado una idea, un punto del que irremediablemente no tengo retorno, del que no salgo mejor, ni peor, simplemente lo hago distinto.

Y esta idea es que a cualquier persona que haga ostentación de símbolos nazis, habría que obligarle como premio a leer Postales del este y si tras ello persiste en la misma ideología lo más útil sería exterminarlo de nuestra sociedad, por supuesto, en un marco legal; creo, con sinceridad, que sería rotundamente democratico erradicar cualquier atisbo de esta simbología.

Postales del este es una novela sin censura, explícita y dolorosa que narra con todo lujo de detalle las aberrantes atrocidades del mayor parque temático de la tortura.
Auschwitz.

No es un libro más, es una creación muy inteligente en su conjunto, donde los protagonistas son los hechos y quienes los cometen, con el argumento justo para poder novelar ( uff lo que me cuesta no utilizar palabras grosas) la masacre que estos hijos de la gran raza superior, cometieron con total impunidad.

Excelente trabajo de Reyes Monforte que bien merece un planeta, mejorando lo presente, por documentado, por su soberbia escritura, por su necesario mensaje y por ser tan duro como imprescindible.

"Nadie vuelve igual de este viaje, si es que regresa"

Como fanática que soy de los libros basados en la Segunda Guerra Mundial, “Postales del Este” me atrajo mucho desde que salió, y por fin pude leerlo.
Uno de los mejores libros que he leido sobre esta temática, duro donde los haya, real como la vida y maravilloso.
Nuestra protagonista, Ella, judía francesa, es reportada al campo de concentración de Auschwitz junto con sus padres y su novio Joska. Ella, es “escogida” por la jefa del campo de concentración Maria Mendel para que sea una de sus “mascotas”, algo que las demás prisioneras creen que es un privilegio…, es escogida gracias a que tiene una caligrafía magnifica, y eso le servirá para trabajar como copista en la orquesta del campo. Que fuera “mascota” de Mendel, no impedirá que sufra maltratos y abusos tanto por su parte como por parte del medico del campo Joseph Mengele.
La historia comienza con BELLA, descubriendo la verdad tras la muerte de su madre en unas postales escritas en el campo de concentración por su propia madre, ELLA. Así la historia estará narrada en dos líneas temporales, aunque con un predominio del pasado. Para mi, el presente es como un prologo y un epilogo final.
El personaje principal, Ella, me ha fascinado, aunque es un personaje ficticio, la autora ya nos dice que las cosas que vive, si son reales, que ha construido el personaje teniendo en cuenta testimonios contados por otros prisioneros y prisioneras. Y es que tenemos, a una mujer que vivirá cosas horribles, pero que a pesar de todo logra sobrevivir, lucha por quien quiere y por lo que quiere, y se juega la vida por escribir postales con nombres de gente para que estos sean recordados.
El trabajo de documentación que hay detrás es alucinante, la autora ha estudiado mucho la situación de los prisioneros, la vida en el campo, los SS, los guardianes, la vida después del campo de cada uno… y de todo esto, y a pesar de lo que leo sobre esta temática he aprendido muchísimo.
No habia leido a Reyes Monforte, y me ha encantado la forma de narrar la historia, una novela escrita con una pluma maravillosa, que hay que leer con calma, incluso a veces dejar de leer y reflexionar sobre todo lo que has leido. Había momento que se me daba la vuelta al estómago por cómo están contadas las cosas tan horrendas, se me han puesto los pelos de puntas en muchos momentos y además al final del libro he soltado unas lágrimas que hacia mucho que no me pasaba…
El final para mi es magnífico, como cierra la historia, y como nos cuenta que ha pasado con cada uno de los personajes que son reales, que paso después de la guerra con cada uno, como se les condena… etc..
No es un libro para todo el mundo, pero si es un tema del que debe saber todo el mundo, quizá este libro es demasiado duro para muchas personas y recomiendo otros para adentrarse en el tema, pero para mi, ha sido maravilloso y de ahí mi puntuación.
Asique como conclusión… un libro recomendado para las personas que les guste mucho este tema, que ya hayan leido mas sobre ello, creo que con este libro se aprende mucho y se sufre mucho a la vez… una historia dura, trágica, emotiva, pero para mi imprescindible.

Tras el fallecimiento de su madre, Bella recibe de manos de su tía Mia una caja que contenía unas postales y con las que comienza la historia de Ella desde que en 1943 llegó al campo de concentración de Auschwitz.
Gracias a sus conocimientos de idiomas y una hermosa caligrafía es destinada como copista de la orquesta de mujeres del campo y también en un almacén donde van a parar las pertenencias de los prisioneros, a pesar de resultar una ventaja sobre el resto, deberá sufrir también en sus carnes la violencia y la humillación de los guardas, sobre todo de la jefa María Mandel y del sanguinario Joseph Mengele. A pesar del riesgo que corre, Ella, decide esconder postales y fotografías en un intento de que no se olvide todo lo que está sucediendo en ese auténtico campo de la muerte.
Otra sobrecogedora novela sobre lo sufrido por tanta gente en los siniestros campos de concentración nazis. Llama la atención la incongruencia de la crueldad humana, asistimos a asesinatos, humillaciones, violaciones, torturas y experimentos médicos sin ningún tipo de sentimientos por parte de los perpetradores que al mismo tiempo son capaces de apreciar la música de la orquesta e incluso llorar por una buena interpretación. Me pareció una gran historia aunque es difícil recomendar una obra cargada de tantos hechos de difícil comprensión y extrema brutalidad, sobre todo muy duro leer lo que eran capaces de hacer con mujeres embarazadas y con niños pequeños descritos en toda su crudeza. A pesar de tratarse de una obra de ficción, aunque los personajes alemanes son reales, representa muy bien muchas de las cosas que pasaron en los campos de concentración nazi, otro documento que no debemos olvidar en estos tiempos, cuando todavía no ha pasado un siglo y estamos repitiendo muchas de las cosas que derivaron en esa masacre trágica.

Una novela increíblemente directa y verídica donde, a través de un personaje no real, ELLA, se nos sitúa en el mismo centro del horror, Auschwitz – Birkenau, uno de los tres complejos que forman parte de Auschwitz durante la II Guerra Mundial. Bella, tras la muerte de su madre, descubre la verdad del pasado que nunca le había contado. ELLA, su madre, se convierte en un testigo directo de lo que ocurrió en ese centro de exterminio, de las personas que pasaron por allí, de los millones de muertes y del horror del olvido, además de sufrir en sus carnes parte del sinsentido de su propia realidad.

Es cierto que, si bien ELLA es un personaje inventado, la fuerza de esta narración viene acompañada de la verdad de lo que se cuenta además de todos los personajes reales que intervienen como actores de esta historia. Si pensamos que siempre la realidad supera la ficción, es fácil quedarse sin aliento por lo que fue y lo que implicó para tantos y, en consecuencia, para todos.

El valor de Postales del Este es la capacidad de hilar una trama con sentido, perfectamente encajada en un lugar que existió, donde se cometieron atrocidades que imaginarlas ya es difícil, y en un momento histórico que debe avergonzar a la humanidad porque demostrar lo que es capaz de hacer. No obstante, os aseguro que Reyes Monforte consigue llevarnos hasta allí y contar las cosas sin cortafuegos, pero sin hacernos sentir lo insufrible para conseguir que nos encontremos ávidos de lectura. ELLA se convierte en un personaje tan cercano para el lector que es fácil querer acompañarla en su dolor y así evitar se sienta tan sola.

Por un lado, está el valor de las palabras, sobre todo para ELLA, que se convierten en su tabla de salvación. A través de ellas, le da voz a los que allí estuvieron y allí se quedaron, y quizá también a sus propios miedos; y, a través de ellas, nos plantea lo acertado de recordar para conocer y para honrar. Por otro lado, tenemos la fascinación que la música clásica ejercía sobre los nazis; cómo la valoraban y la vivían, y cómo la integraron en el horror diario que generaban. Esto último me ha sorprendido muchísimo.

No penséis en este libro como en otra novela de la II Guerra Mundial, es decir, no es simplemente una novela histórica (aunque la protagonista no existió, podría haber existido, podría haber sido real), es un texto realista, directo, intimista, narrativamente interesante y con todo el significado que conlleva la verdad de lo que cuenta. Es fácil quedarse sin palabras ante el doctor Josef Mengele, Maria Mandel, Alma Rosé, Irma Greese, Gisella Pearl, así como muchos otros que aparecen y existieron, y que se convierten en personajes con su propio espacio en el texto, dando todavía más veracidad a todo lo que lees. También te habitúas al vocabulario propio impregnado en ese campo de exterminio: el Kanada, SS-Lagerführerin, Zyklon-B, sonderkomandos…

Es curioso, pero me ha resultado una lectura muy personal. Muchísimo. Y al final, con Bella asimilando todo, es cuando ha salido todo el sentimiento que yo llevaba atesorando durante la lectura, y eso ha hecho que me acerque más al libro. Una lectura difícilmente olvidable.

El único pero que podría ponerle es que he notado cierta repetición en la narración, en relación con pequeños detalles sin importancia, dentro de la parte en la que la propia ELLA nos cuenta cómo era la vida en el campo y quiénes eran las personas con las que se relacionaba, lo que me ha llamado la atención. Es algo que no hace desmerecer el conjunto de esta novela, para mí, pero que me impide cerrar el libro con la sensación de que ha sido insuperable.

#ea

Los que me conocen saben que no puedo resistirme a los libros que tratan sobre la II Guerra Mundial, el Holocausto y los campos de concentración.  Es verdad que hay muchos libros escritos sobre ello, pero no deja de sorprenderme la maldad que encierran algunas personas, con esa capacidad de humillar y hacer daños hasta límites insospechados por el mero hecho de creerse superiores. Y como contrapunto como el ser humano tiene la capacidad de soportar todo lo anterior y luchar por sobrevivir en ese ambiente de crueldad y muerte.
Además esta es la primera novela que leo de esta época en la que las protagonistas son las mujeres: tanto prisioneras como guardianas.

Dicho esto vamos con este libro que, desde ya, os puedo decir que es sin duda la novela más dura y cruel que he leído hasta ahora.

El libro comienza en el año 1980 cuando a Bella su tía le entrega una caja que perteneció a su madre, recientemente fallecida. al abrirla descubre un montón de postales y fotografías de personas que no conoce pero que tienen algo en común: en todas aparece la bella caligrafía de su madre, Ella. A través de ellas irá descubrirá un pasado que le era desconocido y que le hará entender el porqué de muchas de las reacciones, miedos y manías de su madre.

A partir de ahí, la autora nos traslada a septiembre de 1943 cuando Ella, una joven judía francesa, llega al campo de concentración de Auschwitz-Birkenau.  Gracias a que habla varios idiomas y tiene una caligrafía perfecta será una privilegiada dentro del horror. Su físico, es rubia de piel blanca y ojos azules, hace que María Mandel la convertirá en su “mascota” y la concederá el privilegio de ser copista de la Orquesta de Mujeres y trabajar en el bloque Kanada donde se organizan todo lo requisado a los prisioneros a su llegada al campo.

Reyes Monforte nos traslada al campo de concentración para mostrarnos una historia basada en hechos reales. Una historia llena de dolor y horror que no dejará de provocarnos sensaciones: conmoción, compasión, espanto… Realidad y ficción se entremezclarán de la mano de la pluma de la autora de una manera intensa, emocional y escalofriante.

Entre sus páginas desfilan personajes reales como Heinrich Himmler, Irma Grese "el ángel rubio", Rudolf Hoss,comandante del campo, Ana Frank…  o los dos que más peso tendrán en la historia: la cruel y despiadada jefa del campo, María Mandel, “La Bestia”, y Josef Mengele, “el ángel de la muerte”, oficial médico que decidía quien moría en las cámaras de gas o quien sería víctima de sus “experimentos científicos”.
Junto a ellos, nuestra protagonista, una joven Ella, da voz a todas las mujeres reales que fueron enviadas como prisioneras a Auschwitz. Castigos, torturas, humillaciones, vejaciones…  son narradas de una forma tan real y con tanta crudeza que ha habido momentos en los que la angustia que sentía era tal que he tenido que dejar de leer y tomar aire.

La autora, a través de una narración en tercera persona hace que el lector se sumerja en todo el horror de las escenas que se suceden en dicho campo de concentración. Con un ritmo pausado pero que mantiene la tensión de principio a fin, ha logrado crear una novela con un lenguaje directo y una narración cuidada y elegante. Una novela en la que la ambientación y documentación trasladan al lector dentro de la narración haciéndole que viva y sienta la historia.

En esta novela la autora destaca dos protagonistas más: la Música y las Palabras.  La primera es esa presencia constante a lo largo de toda la novela, que interpretada por las mujeres judías hacia aflorar una sensibilidad en quienes no dudaban en cometer atrocidades sin pestañear.
Las segundas usadas como acto de resistencia, en un intento de dejar testimonio de lo sucedido y evitar que personas y hechos cayesen en el olvido. Palabras que eran una condena pero también una forma de salvación y de mantener viva la esperanza.

Reyes Monforte ha creado una historia difícil de olvidar y que desde luego no te dejará indiferente. Postales del Este es una novela cruda, intensa y muy dura que nos muestra la contradicción entre maldad y bondad, amor y odio, belleza y horror...
Un libro sobre una época histórica que no debería caer jamás en el olvido. Los horrores y el sadismo, que se sucedieron por causa de una ideología totalitaria basada en el fanatismo y el odio, no deberían volver a pasar nunca más.