La novia gitana

¿Qué decir de esta novela que no se ha dicho ya? Una historia adictiva al 100%, con una trama interesantísima y un desenlace sorprendente.

Ayer no pude dejar de leer hasta que terminé la novela de madrugada, me la he leído en menos de 36 horas. Es una novela de lectura espeluznante donde la maldad se ve reflejada con una crudeza excepcional, no apta para todos los estómagos. Pero la maldad existe en nuestra sociedad y no podemos huir de ella, está ahí por mucho que queramos ignorarla y mirar para otro lado. El personaje de la protagonista está muy bien logrado, es totalmente creíble, una mujer fuerte que aún está intentando superar la pérdida de su hijo que fue secuestrado con 5 años y del que no ha tenido noticia en los 8 años que han pasado desde la tragedia que la ha marcado para toda la vida.
La protagonista, la inspectora de policía Elena Blanco, junto a su equipo, se enfrenta a un asesinato espeluznante, el de Susana Macaya, que ha muerto en circunstancias muy parecidas a las de su hermana mayor hace 7 años, lo que hace pensar en un mismo asesino; el problema es que el asesino de su hermana está en la cárcel y no ha salido nunca desde que está encerrado.
La historia te atrapa de tal manera que tienes que hacer un esfuerzo para dejar el libro aparcado para más tarde, cuando puedas cogerlo de nuevo y seguir con el relato, aunque solo sean 5 minutos. Es asombroso lo que consigue la autora con un lenguaje impecable, frases no muy largas y concisas, sin una palabra de más, solo las justas para entender lo que pasa sin distraerte con frases o explicaciones innecesarias.
Vives la historia como un espectador en primera fila, sientes y padeces con los protagonistas, sigues el argumento como si fueras parte de él y te aventuras pergeñando algunas hipótesis que se desprenden de tu atenta lectura y de los datos que te suministran los protagonistas; así pasas un buen rato en tensión leyendo, más bien devorando, páginas y más páginas para llegar al final y a una verdad incontestable que ni habías sido capaz de imaginar...
Muy recomendable para los amantes del género y con buen estómago.