A la caza del amor

Segunda vez que me leo este libro. La primera vez me gustó mucho, pero fue como hace diez años, y creo que ahora lo he disfrutado mil veces más, porque me he podido dar cuenta de todos los matices y detalles que contiene, y que hacen que sea una obra deliciosa de leer. Recuerdo que me lo cogí porque comparaban a la autora con Jane Austen, una de mis escritoras preferidas, y que en ese momento estaba comenzando a leer. En aquel entonces no lo vi, pero esta vez si que me he percatado en las semejanzas que hay entre las dos autoras en sus formas de escribir y narrar y en como representan la sociedad en la que viven. Sus obras se cimientan en una visión irónica y cínica del mundo en que se mueven, del que se burlan por eso de que es mejor reír que llorar, y que es el punto de partida que les permite criticar el conjunto de la sociedad de su época y de la condición humana con gran detallismo y realismo.

Centrándonos en la obra de Mitford, debo decir que este libro me ha parecido una certera representación de la alta sociedad inglesa de la época de entreguerras y de un periodo de cambios sociales y de confusiones previo a la II Guerra Mundial, algo que se palpa durante toda la novela, y que se ve muy bien en un dialogo en las páginas finales de la misma. Sin duda alguna es una obra de personajes, ya que no sería lo mismo sin todos los secundarios que la jalonan. En muchas ocasiones (y esto es algo que había olvidado de la primera vez que la leí) la frivolidad y lo absurdo de los diálogos y situaciones me hicieron sonreír, y no solo eso, también me sacaron más de una carcajada. Son personajes muy carismáticos y que no sabes si puedes o no tomarte en serio. Pero precisamente para mi eso ha sido casi lo más trágico, que viven tanto en su propio mundo que no parecen ver (o no quieren) que este universo está destinado a desaparecer. Eso lo demuestra (entre otras escenas) la “disputa” o desavenencias que se dan entre la familia de Linda y la de su primer marido, que suponen dos formas irreconciliables de entender la vida y la posición social y que demuestran que el mundo va por unos derroteros fríos y materialistas donde gente como los Radlett no tienen cabida. de todas maneras, si hay algo que le da al libro un toque muy especial , y esto se percibe, es que el argumento y los personajes están basados en las vivencias y en la familia de Mitford.

Respecto a los personajes sin lugar a dudas me quedo con Davey, el tío Matt y la Desbocada. Son los tres que más me han hecho reír sobre todo el tío Matt, que será un bruto, un bestia y todo lo que tú quieras, pero se le coge cariño y es con el que más me he reído con muchos (no sé porque, pero la parte en que se pone a llorar desees de ver una representación de ''Romeo y Julieta''me ha hecho tanta gracia, como me ha inspirado ternura). En general, como he señalado más arriba, me parece que esta es una novela de caracteres, donde los secundarios son, muchas veces, lo que da vida y sal a la trama. Tienen personalidades muy definidas, y son tan increíblemente particulares que no sabes si creértelos realmente o asumir que son absolutamente realistas y humanos. Lo que nunca entendí es el inmenso cariño que todo el mundo siente hacía Linda, la protagonista de la historia. Personalmente me ha parecido el personaje menos interesante de todo el libro, creo que porque le ha habido momentos en los que le he cogido un poco de manía y todo, pero no he llegado a hacerlo. al fin de al cabo, Linda no deja de ser el medio para un fin, que en este caso es el de ser una parodia sobre la el romanticismo y la búsqueda del amor, y de como puede llevarnos a equivocarnos si te obsesionas con ello. Además realmente el amor, aunque es importante en esta obra, no lo es todo.

De hecho para mí la parte en la que está centrada en su vida amorosa y la relación que establece con el conde francés Fabrice (porque todo lo concerniente a sus matrimonios y su paso por los campos de refugiados españoles en Perpiñan tras la Guerra Civil española me gusto bastante), me aburrido sobremanera. Me pareció un personaje demasiado frívolo, no entendí como todo el mundo podía quererla tanto por más encantadora y buena persona que fuera. Como he dicho antes, la parte en que conoce al conde francés me ha parecido la más aburrida de toda una novela que por lo demás me ha gustado. Eso y el final, que me ha parecido muy precipitado y por ello me ha dejado con muy mal sabor de boca. Es lo único que no me ha gustado de una novela de esas que ya no se componen, con una prosa exquisita, elegante y ágil y que se lee muy rápido y con deleite, con diálogos ágiles y en la que se describe y satiriza con mucha inteligencia un mundo y unos personajes que la autora conoce de primera mano, y por ello los comprende a la par que los critica.

Si me leí este libro por segunda vez fue porque tengo una biografía de las hermanas Mitford que quiero leerme y que ha editado en español el sello Circe, pero antes quería leerme algunas obras más de la más popular de las hermanas y volver a disfrutar de la única novela que conocía de ella. Me alegro mucho de haberlo hecho, y estoy deseando leer “Amor en Clima frío” (que será la siguiente de fijo) y “No se lo digas a Alfred”.

“A la caza del amor” de Nancy Mitford ha resultado ser una gran elección. Publicado en los años 40, narra la vida de una peculiar familia aristocrática inglesa. La trama nos sitúa en Alconleigh, una casa de campo donde se desarrolla toda la vida familiar Radlett. Allí se nos presentan a los personajes y observamos su particular modo de vida. La narradora es la prima Fanny que, aunque no vive allí, si que pasa desde la infancia largas y divertidas temporadas junto a sus primos. Pero con quien tiene mayor complicidad es con su prima Linda, en la que luego se centrará toda la historia. Fanny se sitúa como mera espectadora de la vida de Linda y nos describe desde el principio la personalidad de su prima llena de contradicciones. Entre cazerias y bailes van creciendo y acaban obsesionandose con el lado más romántico del amor. Y en eso se centra la historia: en la búsqueda del amor de Linda.
Es un libro ameno y divertido, con una excelente ironía inglesa; y que esboza una crítica casi caricaturesca sobre la aristocracia inglesa. El personaje principal, Linda, es una mujer inconformista y que se guía por el corazón, pero que no carece de grandes defectos que la hacen aún más interesante. Los secundarios son geniales y conforman un gran retrato de aquellos aristócratas ingleses de campo y de mente cerrada que abundarían en el periodo de entreguerras. de hecho, la autora conoce muy bien este mundo, pues la historia está basada en su vida y en la de su familia.
Nancy Mitford, hija de un barón inglés, fue junto con sus hermanas conocidas figuras de la aristocracia inglesa. Sus diferentes y divergentes historias parecen sacadas de la más imaginativa ficción: algunas casadas con fascistas, otras comunistas y dos escritoras. Sus vidas dan para diversas biografías y yo en concreto quiero hacerme con la de “Las hermanas Mitford” de la editorial Circe.
En resumen, es una novela muy disfrutable, lo único que me ha fallado un poco es el final. La autora escribe genial y fue muy prolífica en su obra. Gracias a @librosdelasteroide tenemos muchas de sus obras en español que, por cierto tienen relación entre sí.

Alconleigh es una pintoresca casa de campo donde nos presentaran a la familia Radlett, un conjunto de gente muy particular en cada uno de sus rasgos, la narradora principal es Fanny, que pasa largo tiempo con la familia, hija de la hermana descarriada de la familia y del abandono de su padre, es dejada aquí en vacaciones, mientras esta al cuidado de otra tía, aquí Fanny nos comienza a presentar a los hermanos y a sus peculiares tíos. Pero se centrará en la vida de su prima Linda, quien desde pequeña mostrara un carácter especial, soñadora y con un sentido de la realidad un poco extraño, se dejará llevar por las ilusiones de su vida que la llevaran por muchos caminos a lo largo de la historia, comenzando por que tendrá una idea del amor tan idealizada que la meterá en muchos problemas.
Este libro nos muestra un retrato de lo que fue la sociedad en los años cuarenta, ya que parte de la mitad de la historia nos irán dando avisos de la inminente segunda guerra mundial, el choque entre la transición entre las personas, como los Radlett, gente adinerada debido a sus tierras y la gente que se estaba levantando debido a sus negocios, al igual que la burla a la sociedad que tanto nos demuestra a Linda.
Un personaje con el que no pude compenetrar debido a su extravagancia y a su falta de racionalidad.
Si bien es un libro entretenido, creo que puede llegar a ser algo tedioso por lo largo que es, y el montón de historias que cuentan que no llevan a nada más que confirmar la locura de esa familia.

'A la caza del amor' nos narra la vida de la familia Radlett durante el período de entreguerras. Una novela casi autobiográfica por parte de la autora, ya que Nancy Mitford pertenecía a una familia inglesa aristócrata y reconoció haber plasmado algunas de sus vivencias en la novela. Pero, muy a mi pesar porque había visto solo buenas opiniones sobre esta historia, debo reconocer que, para mí, no ha sido lo que esperaba y creo que ha sido por la narración: pese al toque de humor que le da a toda la novela, con personajes cargados de sarcasmo e ironía, la pluma narrativa de la autora no ha conseguido engancharme y muchas partes de la novela se me han hecho pesadas.
Lo que me ha parecido bastante original, y por eso le doy las 3 estrellas, es porque la trama gira alrededor de Linda y su búsqueda del amor pero será su prima, Fanny, la que nos cuente su historia.

Aunque en "A la caza del amor" la protagonista es Linda será Fanny, su prima, la encargada de guiarnos no solo por la vida de Linda también por la de su extravagante y peculiar familia. Linda es el centro sobre el que gira toda la novela y durante la lectura la acompañaremos en la búsqueda del amor de su vida.
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"A la caza del amor" es una novela exquisita escrita con fino sentido del humor, mucha ironía y algo de crítica social. Nancy Mitford supo captar las partes más estrambóticas e incluso ridículas de su familia para crear una novela divertidísima que refleja la vida de la aristocracia inglesa durante el convulso periodo de entreguerras. El trabajo de la autora en cuanto a los personajes es extraordinario, no hay un solo personaje que te deje indiferente y todos tienen algo especial.
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Pero en la novela también tienen cabida temas más serios. Nancy Mitford habla de la Guerra civil española y de los campos de refugiados españoles en Francia, donde las familias eran separadas y malvivían en condiciones infrahumanas. También seremos testigos del estallido de la II Guerra Mundial y de como la apacible vida de la familia pronto se ve alterada por el estruendo de las bombas, eso sí, todo contado con un humor británico excelente. Un humor con el que he conectado desde la primera página y que me lo ha hecho pasar realmente bien.