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Cuando una novela empieza y termina con una frase tan especial como la de El color de las mareas, está muy claro que vamos a enfrentarnos a una gran historia de amor. Otra cosa es que luego lo sea, o nos encontremos con un pastelón muy edulcorado. No es el caso. Aunque todavía queda mucho año y muchas novelas que leer, sé que El color de las mareas estará entre mis mejores novelas de amor del 2018. Además, no tiene una buena historia de amor sino dos. A pesar de que Beatriz, la mujer protagonista de la novela, al principio de la novela no me pareció un personaje lo suficientemente atractivo como para montar sobre ella una novela, su evolución me hizo cambiar de opinión a medida que Beatriz crecía y evolucionaba como mujer. En realidad mi personaje favorito es Marcel Hugarte el cobarde, por encima de su alterego Marcel Noviembre el poeta. Una personalidad muy compleja la de este simpático conquistador por cuyas venas más que sangre corre agua de mar. Porque por encima de todo, Marcel es un hombre de mar, el único lugar en el que actúa como un valiente. O como un insensato suicida, que de todo hay. 500 páginas para narrarnos casi un siglo de vida partiendo desde finales del siglo XVIII, aunque en ningún momento pueda considerarse una novela histórica, pues apenas profundiza en el marco histórico. Lo importante en todo momento son los personajes y su evolución. Porque cambian y mucho a lo largo de la novela, especialmente Beatriz que pasa de ser una cría que no sabe nada de la vida, a una mujer con mucha fuerza. Pero no son solo Marcel y Beatriz. Es una novela con muchos otros personajes, con muchas historias que van entretejiéndose a lo largo de la misma para contarnos esta historia de amor de un hombre y una mujer que nunca consiguieron casarse. Aunque tal vez eso, sea lo menos importante Enlace: http://www.elbuhoentrelibros.. |
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