Sin corazón

-A veces, tu corazón es lo único que merece la pena que escuches. -Cath cuadró los hombros, preparada para la batalla-. ¿Quién sabe? Quizás estén tan cansados por el festival que no les queden ganas de discutir.

Es un placer mirarte hoy, Lady Pinkerton, eso es todo.

Uno será un asesino,
el otro será mártir.
Uno será un monarca,
el otro enloquecerá.


Tal vez nos conozcamos en el futuro y solo estés recordando hacia atrás.

Fascinante, ¿no es así? Con qué frecuencia lo heroico y lo tonto resultan ser lo mismo.

La forma más fácil de robar algo es dárselo voluntariamente.

Cuando me complace, golpeo como un tambor. Cuando estoy triste, me rompo como un cristal. Una vez robado, nunca me podrán recuperar. ¿Qué soy yo?

"Estas cosas no pasan en los sueños, querida niña", dijo, desapareciendo hasta el cuello. "Ocurren solo en las pesadillas".
Su cabeza giró en espiral y se fue.

Por eso le gustaba hornear. Un buen postre podría hacerla sentir como si hubiera creado alegría en la punta de sus dedos. De repente, las personas alrededor de la mesa ya no eran extrañas. Eran amigos y confidentes, y ella compartía con ellos su magia.

Aquí todos estamos locos, ¿lo sabías?

Pero al final, la esperanza es el camino para hacer posible lo imposible.