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La historia está contada desde tres puntos de vista: Hannah, Misha y Nick. Hannah y Nick eran pareja en danza sobre hielo, aún le quedaba mucho hacia donde poder ascender pero tras un suceso ese sueño se rompe. Hannah no se plantea volver al hielo si no es con Nick, pero es su mundo y debe superar aquello que lleva detrás de ella. Misha tuvo que dejar de patinar por una lesión, sin embargo, podría dedicarse a otra rama del patinaje, solo tiene que encontrar una pareja. No es un libro que vaya a ser muy original, sin embargo, este tipo de libros es el que al final me acaba enganchando. Misha es el típico protagonista masculino que parece un chulillo, sabe lo que quiere y hará todo lo posible por conseguirlo. Puedes intuir conforme vas leyendo lo que puede suceder, pero como he dicho, a pesar de eso, te termina enganchando. La pluma de la autora es fabulosa, y muy fácil de leer. No leí la sinopsis antes de comenzar el libro, como muchas otras veces he hecho, pero tenía claro que el patinaje tendría un papel principal en esta historia. Y efectivamente, tiene muchas explicaciones acerca del él. Cosa que me dio miedo porque cuando ya había empezado a leer el libro, vi que una chica estaba comentando que le había parecido este libro y me dio un poco de miedo continuar con él, por si a mi me pasaba lo mismo que a ella. Comentaba que se hacía pesado por las descripciones que había del patinaje, pero es que creo que son necesarias para entender más sobre este deporte, además así demuestra la autora que se ha informado bien antes de escribir el libro o que ya lo sabía ella por experiencia propia. Así que a mi no se me hizo pesado, hay bastantes, no voy a negarlo, pero por lo menos a mí no me desagradó. Cuando se me hizo más pesado fueron los ultimos tres capítulos, pero creo que fue porque estaba cansada o algo, y a pesar de lo que me gustaba ya quería terminar esos capítulos. Como os he comentado, está narrada desde tres puntos de vista diferentes, por lo que si me gustan cuando lo hacen desde dos protagonistas, porque así puedo llegar a enteder completamente ambas partes de la historia, aquí comprendo mucho más a los personajes principales, a excepción de una amiga de Hannah, que tiene un papel también importante a pesar de no tener relación con el patinaje. Como en la mayoría de libros, no puedes conectar del todo con todos los personajes, y otro momento en el que no tenía tantas ganas de leer, eran los capítulos narradados por Nick. He tardado en conectar con él, y como a mitad de la historia ya si me gustaba, sin embargo a principios de ella, estaba más enganchada a las partes de Misha y Hannah. Por lo tanto, Tan solo un segundo ha sido una lectura que he disfrutado desde su comienzo, quitandole los últimos capítulos donde ya estaba más cansada. Pero, sin duda lo recomiendo, sobre todo para este tiempo. |
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