El autobús de la miel: Las memorias de una niña salvada por las abejas

El autobús de la miel es una historia de superación, una historia autobiográfica, contada desde la perspectiva de una niña de cinco años que ve como el mundo que conocía se desvanece el día que sus padres se separan.
Todo cuanto conoce queda atrás atraviesa medio país para refugiarse en casa de sus abuelos paternos.
Aunque nuestra protagonista es Meredith porque a través de ella vivimos su infancia, la gran protagonista de esta historia es su madre, una mujer que se sume en una gran depresión, incapaz de salir de la cama, de cuidar a sus hijos de afrontar la debacle de una separación. Y aunque conforme avanza la novela vamos entendiendo más a esta mujer destrozada, la verdad es que cuesta empatizar con ella, cuesta meterse en sus zapatos, como puede en esos momentos tan duros rechazar a sus hijos, no acompañarles en el dolor de perder a su padre y al mismo tiempo quedarse sin referente materno.
La abuela asume el mando, pero su visión del mundo también es particular, es muy estricta con los pequeños, se pone del lado de su hija aunque ella tampoco consigue sacarla del estado en el que se encuentra.
Llegados a ese punto en que todo funciona mal en casa, en el colegio, tu padre no te visita, y las pocas veces que lo hace te desarma, te coges a un clavo ardiendo. El de Meredith su abuelo, las abejas y el autobús de la miel, un lugar tan inhóspito como lleno de vida, como lleno de salvación.
Esta novela es un cántico a la vida, al optimismo, a la esperanza, a los modelos de familia distintos. A la organización, al amor porque hay lazos más fuertes que la sangre.
Reconozco que ha habido momentos que a pesar del interesante mundo de las abejas me he sentido agobiada, posiblemente porque soy alérgica a sus picaduras y el estar tan cerca de las colmenas me hacía sufrir, temer por una de sus picaduras. Aún así he aprendido mucho sobre un animal cuya población está disminuyendo mucho y de cuya existencia quizás dependa el mundo tal y como lo conocemos. Cuanto tenemos que aprender los humanos de ese insecto, de su forma de organizar las colmenas, de elegir a sus reinas, de proteger a sus crías, a su comunidad.
Para Meredith supuso su salvación, convertirse en la mujer que es, no se cuanto será autobiográfico en esta novela, y cuanto habrá de ficción, se que cuenta su infancia, y por lo mismo es una novela dura, en algunos momentos durísima. Pero merece la pena adentrarse en el fantástico mundo de las abejas, trasladarse a Carmel Valley, a Big Sur.
El autobús de la miel es ante todo una novela sensorial, en la que se siente el calor pegajoso, la dulzura de la miel, la frustración de Meredith, el color de las flores, el batir de las alas de las abejas.
El autobús de la miel es una novela recomendable por muchas razones, una visión del mundo de los adultos visto a través de los ojos de una niña de cinco años, que va creciendo necesitando a su madre, la constatación de como el maltrato en la infancia deja secuelas y conforma el carácter en la vida adulta, cuan necesario es cuidar las formas en la infancia, dar cariño, no ser demasiado duro, demasiado exigente, demasiado estricto. Aunque ello no signifique irse al extremo contrario.
Te animo adentrarte en esta preciosa y dura novela, a acompañar a Meredith en ese viaje hacia su adultez, a descubrir el mundo de las abejas y a cuidar su hábitat e impedir que desaparezca.