Los príncipes azules también destiñen

Desde el principio me ha dado la impresión de que Megan Maxwell está creando un libro tras otro con la esperanza de conseguir un bombazo similar a Cincuenta sombras de Grey, pero "made in Spain". Su estilo no cambia un ápice de uno a otro: simple, con diálogos largos y repetitivos, y una narración tan insulsa... Me molesta leer libros con descripciones tan pobres que pasan desapercibidas y con diálogos taaaaan cargantes.

Tiene un ritmo rápido, demasiado rápido. Cuenta en un espacio muy corto cosas que suceden a lo largo de años. Aparecen muchos personajes y se hace confuso saber quién está hablando, y a veces los secundarios eran más interesantes que la pareja protagonista.

Al principio puede enganchar el tema de los huérfanos hawaianos que surfean y conocen a las chicas un verano, pero hacia la mitad pierde interés porque la trama es más de lo mismo (que si te quiero, que si te odio...) Se trata de un amor pegajoso desde los primeros capítulos y ya se sabe cómo va a acabar: "Vivieron felices y comieron perdices". Estoy cansada del amor a primera vista. Podría haber sido un libro mejor... pero no.

Era la segunda y última oportunidad que le brindaba a esta mujer, y me temo que no ha superado la prueba.

Saludos ;)

Me ha encantado. Nos cuenta una bonita historia de amor que tienen dos hermanos con sus respectivas parejas.

Usa un lenguaje muy sencillo que logra que la lectura se haga amena y que quieras seguir leyendo más y más.

Queriendo destacar algunas partes del libro me ha gustado la manera en la que relata que Sam ha tenido una aventura paralela con otra mujer mientras estaba casado y tenía dos hijos. Por otro lado, el planteamiento de la relación que tienen los hermanos entre ellos, lo bien que se llevan las chicas y cómo han querido juntar a todos los hijos de él me ha parecido espectacular. Yo no me lo esperaba así.

De hecho cuando al leer, ya estaba viendo que los iban a juntar a todos los niños yo pensaba que iba a ser un caos.

Es una novela maravillosa que te cuenta una mágica historia.

Me ha gustado mucho mucho mucho, desde el primer momento que empiezas a leerle te engancha la historia y lo que va ocurriendo. Las descripciones de lo que ocurre y de igual manera que de los escenarios son tan precisas que llegas a poder "incluirte" dentro de la historia y que llegues a simpatizar con los personajes. Y, como en sus otras novelas que voy leyendo, también tiene sus puntos graciosos. Me encanta como escribe Megan!!!

Quizá sea el libro que menos me ha gustado de la autora, demasiadas vueltas, demasiada paja para llegar a un final precipitado, sus personajes que siempre me sorprenden por tener personalidades fuertes en este libro dse desdibujan por ratos. Final precipitado en una historia que me deja la verdad bastante indiferente.

Pongo en situación a quien no la haya leído: Sam y Kate sienten un flechazo desde el primer momento en que se ven en un bar de Hawai. A partir de aquí comienza su idílica relación. Tienen todo lo que pueden desear: su bufete de abogados y dos hijas maravillosas, pero como suele pasar, no es oro todo lo que reluce. Me abstengo de contaros quien comete según que errores, si os lo cuento, se perdería el factor sorpresa de la trama jajaja así que si os queréis enterar tendréis que leeros el libro. El caso es que tras un error, la idílica pareja pasa por un bache que no será fácil de superar para nadie. Además de esta historia, que es la trama central de la novela, en paralelo vemos también la relación de amor-odio que tienen Terry y Michael, se sienten atraídos pero no terminan de dar el paso de luchar por lo suyo cuando Sam y Kate están a la gresca.

El libro tiene una infinidad de personajes maravillosos como Serena, la madre de Kate y Terry, aunque es un poco métome en todo, adora a sus hijas y es capaz de hacer lo que sea por verlas felices. Sasha y Tommy, Vaitere, Shalma, Cat, Ollie, todos tienen especial importancia en el avance y final de la historia.

Lo que más me ha gustado de la novela y no deja de sorprenderme es el giro que da la trama de manera repentina, precisamente porque no te lo esperas y te quedas pensando ¿WHAT?
Por otro lado, hay algo que no me ha gustado y es precisamente esa imagen de perfección que raya la fantasía, aunque creo que es una artimaña de la autora para que el choque con la realidad se acuse más. Otra cosa que no me trago es la comprensión de todo el mundo con el culpable del asunto, pero es ficción y aquí todo puede ser posible, jajajaja

En definitiva, esta novela nos enseña que todos tenemos derecho a equivocarnos y que cuando hay amor del bueno existen las segundas oportunidades.

Kate y Sam se conocieron en su juventud y empezaron una hermosa vida juntos, formaron su familia y fundaron un exitoso negocio, pero la vida no les resultó tan perfecta como querían, por diversas circunstancias, se ven obligados a tomar decisiones que les romperán el corazón y los harán dudar del verdadero amor. Por su parte Terry y Michael han estado con ellos como amigos y hermanos durante toda la vida y ya no pueden ocultar más la atracción que sienten el uno por el otro. Será posible que la vida cambie y sus caminos se vuelvan a encontrar o será que en el amor las segundas oportunidades no existen?. Esta novela inicia de forma muy buena pero al ir avanzando no sucede nada realmente interesante, me esperaba conflictos mayores y giros que nunca ocurrieron por lo que a pesar de atraparme al inicio después estaba considerando dejarlo. Solo lo recomendaría si se busca algo tranquilo pero no si se espera una historia con la que no puedas parar de leer.

Después de leer libros más recientes de Megan, decidí coger una historia anterior para intentar recuperar esa esencia que sentía que estaba perdiendo cada vez más; sin embargo, creo que tampoco he acertado con este libro.
La premisa de la historia me gustaba al comprarlo, pero cuando me decidí a leerlo, ya casi no me acordaba y decidí ir más a ciegas, aunque admito que tenia ya una idea mas preconcebida de cómo iba a ser el libro. Las primeras páginas se me hacían largas, incluso haciendo que no necesitara seguir conociendo la historia.
Conforme iba avanzando el libro, mi opinión iba mejorando, gustándome el final, dejándonos claro que las segundas oportunidades existen; aún así, siento que sus historias se hubieran solucionado antes si los personajes se hubieran comunicado como personas adultas.
Una pena que me haya costado más de un mes acabar con él siendo que es una lectura rápida y fácil, pero creo que esta historia no ha sido para mi.
Megan Maxwell está dejando de ser una escritora para mi.

En este libro vamos a conocer la historia de Sam y Kate, los protagonistas principales, y también vamos a conocer a Michael, Terry, Ollie, Cat y Serena.
Sam y Kate son un matrimonio feliz, junto a sus hijas Ollie y Cat. Michael es el hermano de Sam (hermano del corazón), y Terry, hermana de Kate.

Estas 4 personas (Sam, Michael, Kate y Terry) se conocen en la isla donde Sam y Michael crecieron. Estos chicos son bien guapos y tienen locas a todas las chicas, pero la afortunada es Kate, que es quien logra enamorar a Sam.
Tras unos años forman una bonita familia y se mudan a la ciudad, donde todo transcurre de maravilla hasta el día en que al celular de Sam le llega una llamada desde un hospital, llamada que atiende Kate... Y ahí comienza a "desteñir" esta historia. Pero ojo, no solo los príncipes destiñen, algunas princesas también pueden hacerlo.

Y bueno, eso es todo lo que les cuento o terminaría contando todo.

La edición del libro es muy linda pero me gusta más la portada de los zapatos azules y el piso azul por haber "desteñido".

Cuando empezas a leer este libro crees que conoces a todos los protagonistas pero en realidad que no es así porque vaya tremendos secretos guardan algunos, algo que no te esperas para nada.

La lectura al principio es un poco lenta, incluso se me hizo repetitiva pero conforme fueron pasando las páginas la historia consiguió engancharme y la disfruté mucho.
Lo que pude notar en este libro es que la pluma de Megan es un poco diferente a lo que nos tiene acostumbrados ya que es algo lenta y pausada. Pero no quita que sea un lindo libro y, sobre todo, cargado de sentimientos en esta familia tan dispuesta a hacer todo por mantenerse unida.

Kate y Sam se conocen en la universidad, desde entonces siempre han estado juntos, se han casado y han formado la familia perfecta. Con su propio bufete que sube como la espuma y dos hijas preciosas, La pareja se considera afortunada y agradecida con la vida, hasta que un accidente de trafico pondrá su vida patas arriba. Ambos deciden separarse, pero a pesar de lo ocurrido, de los corazones rotos y las lágrimas, queda el amor y los sentimientos que aunque escondidos debajo del dolor y la culpa también están ahí, solo queda luchar por ellos o olvidarlos para siempre y seguir adelante.

Por otro lado tenemos a Michael y Terry. Michael es el mejor amigo de Sam, su hermano, no de sangre pero sí del alma. Ambos se han criado juntos en la casa de acogida y nunca más han vuelto a separarse. Cuando Sam se traslada a Nueva York siguiendo a Kate, Michael no dudará en dejarlo todo atrás con tal de seguir junto a su hermano.

Terry es la hermana de Kate, conoce a Michael en la adolescencia y desde ese momento saltan chispas. Ambos establecerán una relación amor-odio cuyos límites no se atreven a cruzar por miedo a estropear su amistad. Es una mujer impulsiva y sin filtros que actua siempre antes de pensar, por lo que muchas veces acaba arrepintiéndose de su impulsividad.

En esta historia también conoceremos a Ollie, Cat, hijas de Sam y Kate, y a Serena, la madre de Kate y Terry, todas ellas conspirarán para darle a su familia el "empujoncito" que les hace falta para que vuelvan a estar todos juntos.

Pero las cosas no serán tan fáciles y las heridas son profundas, y es que 15 años de matrimonio y los errores cometidos por ambos dejan una huella que será muy difícil de borrar.

Nos encontramos una historia de segundas oportunidades, llena de enredos y malos entendidos, donde los errores del pasado pasaran factura a todos, y en la que tendrán que luchar contra el orgullo para perdonar y seguir adelante. Y es que en esta historia los príncipes destiñen, pero las princesas también. Eso es algo que me ha gustado, porque esperaba encontrar una historia donde uno de los protas era el "malo" pero no ha sido así, conforme vas leyendo vas entendiendo las motivaciones de cada uno, y ves como a pesar de saber que se habían equivocado, no pueden evitar el seguir adelante y ser responsables y consecuentes con sus actos.

Una de las cosas que más me ha gustado ha sido las descripciones de Hawái, la autora nos describe con detalle las islas, su cultura y su forma de vida de una forma envidiable que dan ganas de mudarte a vivir allí inmediatamente.

La narración es en tercera persona y tiene ese estilo tan característico de Megan, coloquial y sencillo que hace que devores la historia casi sin darte cuenta. Situada entre la sofisticada y cosmopolita Nueva York y la exótica y bella Hawái, podrás disfrutar de una comedia de enredo digna del mismísimo Hollywood que hará las delicias de las fans de la autora.





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Los príncipes azules también destiñen como bien dice la jefa guerrera Megan Maxwell, aunque también hay que reconocer que las princesas también pierden su purpurina.

Una novela familiar donde los enredos y engaños se mostraran como las cartas de una partía de póker, despacio pero terminando sin ningún ganador y muchos perdedores, aunque si sois fieles a vuestro corazón y creéis en las segundas oportunidades quizás esta novela os sorprenda muy gratamente.

Entraremos a formar parte de la familia de Kate y Sam, sus hijas, Serena la madre de Kate, Michael el hermano del alma de Sam y Terry la hermana de Kate.

Kate y Sam se enamoraron muy jóvenes, ella le falló y él la perdono por amor pero con ese perdón nació el engaño y la distancia. Ahora, un trágico suceso mostrará la realidad de la vida de Sam y con ello el final de un matrimonio que parecía perfecto.

Por otro lado todos esos años entre Michael y Terry se ha cocido a fuego lento una gran pasión, un cortocircuito constante en que ambos por miedo a perder su amistad y su familia han apartado de su vida.

No sabemos lo que tenemos hasta que lo perdemos y en este momento todos los adultos de la familia dejan de escuchar a su corazón y lo que fue o pudo ser parece un espejismo en el mar.

Afortunadamente contaremos con Serena y sus nietas, unas crías capaces de dar los empujoncitos necesarios a sus padres y tíos para que se reencuentren y volver, quizás, a ser una sola familia aunque con nuevos miembros.

También debemos tener presente el pasado de Sam y Michael y como el destino, la amistad y el buen corazón les reportaran aquello que para uno de ellos era solo un sueño inalcanzable.

Como todas las novelas que nos presenta Esencia y que han surgido de la rauda pluma de Megan Maxwell, es una delicia, sus descripciones de Nueva York y Hawái son espectaculares, parece que el lector pueda pisar la arena blanca y dejar que la brisa marina le reconforte en las noches tristes, del mismo modo que hilvana con gran maestría las tramas entre los adultos y sus hijos mostrando que a veces los jóvenes son muy racionales y que prestan atención a pequeños detalles que pueden marcar grandes diferencias.

Entre sus páginas se esconde el latir de dos pares de corazones, uno ha estropeado su pasado y el otro no se ha atrevido a vivirlo.

Con sus certeras palabras el lector podrá leer entre líneas, descubrir la importancia de la familia y de las segundas oportunidad y sobretodo que hay que escuchar al corazón y no al orgullo.

Una caricia de sol en forma de novela, una familia que espera que os unáis a su mesa y más de un secreto que aportaran desdicha o felicidad.

Si sois valientes de corazón, está es vuestra novela.

Aquí os dejo sus primeras páginas.

¡Aloha a todos!
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