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Al quedar huérfano de muy niño, Philip Ashley ha sido criado por su primo mayor Ambrose. Esto, sin embargo, no lo ha hecho infeliz, ya que comparte una relación muy especial con su primo, al que quiere y admira, y al que cada vez se parece más. Todo este maravilloso mundo que comparten ambos primos acabará cuando Ambrose tenga que viajar a Italia por motivos de salud y acabe casándose con Rachel, una prima lejana. La posterior muerte de Ambrose provocará un profundo odio en Philip del cual hará objeto a su prima Rachel. No os cuento más allá de la sinopsis aunque no lo parezca. Después de leer "Rebecca" me sorprendió la capacidad de Daphne du Maurier de crear tensión y ambientes tétricos de la nada. Consigue sacar suspense a través de sensanciones, secretos y mentiras, girando la trama en una espiral de tensión continua, aunque no haya grandes eventos que puedan provocarlos. Esta señora es una genia a la hora de ambientar, porque sabe hacerlo desde la primera frase, mientras otros autores no consiguen crear un ambiente tenso ni en un libro completo. Genia absoluta. Aunque es muy diferente a "Rebecca", me recordó bastante a este en el hecho de la importancia de la mansión donde viven, estas descripciones que convierten de alguna manera a la casa en un personaje más. Es la forma de narrar de la autora lo que le da tanta intensidad a sus tramas o personajes, porque siempre lo consigue rápidamente. Además, siento su toque y su forma de contar las cosas muy actuales, como si estuviera leyendo algo mucho más cercano de lo que es. Lo que menos me ha gustado de "Mi prima Rachel" es que Philip, el protagonista, me ha caído mal prácticamente durante toda la novela. Que personaje más cansino, más pesado, y más repetitivo. Pocas veces me pasa que deteste profundamente a un personaje protagonista considerado "bueno", pero de verdad que me parece inaguantable, desde la primera página hasta la última. Por lo demás, me ha parecido un nuevo acierto de Daphne du Maurier, lo he disfrutado muchísimo y prácticamente me lo he bebido. Y si esta mujer tiene la habilidad de enganchar desde la primera frase, también consigue finales que son una absoluta pasada. El final me ha encantado y me ha puesto los pelos de punta. En ambos libros me pasó igual. Cierra los libros igual de bien que los abre. La única pregunta que me hago ahora es por donde seguir con ella. |
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