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Tenía ganas de leer a esta autora por estar tan bien considerada dentro del género de misterio y policial pero la decepción ha sido enorme. Cuando la abogada fiscal Katie DeMaio tiene un accidente de tráfico y es ingresada en el hospital, desde su habitación presencia como un hombre mete el cuerpo sin vida de una mujer en el maletero de un coche. No obstante, Katie cree haber tenido una pesadilla infundada por su miedo a los hospitales pero cuando al día siguiente la policía y fiscalía del condado de Valley se presenta en casa de los Lewis por un presunto suicidio, Katie ve que la suicida tiene un parecido idéntico a la mujer que vio la noche de su ingreso, ¿estaría frente a un caso de asesinato? Desde el principio, la historia me parece bastante estúpida y sin sentido, ya que la propia abogada de la fiscalía que lleva el caso, es testigo de que algo pasó en ese hospital con Vangie Lewis pero en vez de comentarlo con sus compañeros no dice nada en ningún momento .Vamos a ver alma de cántaro, ¿de verdad no ves raro soñar con que alguien a quien no conoces muere y que al día siguiente esa persona aparezca muerta en extrañas circunstancias? Y más cuando al poco de la investigación, se descubre que Vangie Lewis era paciente de ese mismo hospital. Pues bien, no solo es este personaje el que se comporta de manera incoherente durante toda la investigación. El médico forense deja pasar pruebas evidentes de que hay algo más que un simple suicidio pero luego está el resto del libro lamentándose de no haberlas tomado en serio. El marido de la víctima tampoco habla con la policía sobre detalles y cosas importantes porque tiene miedo de ser acusado y claro todo el mundo sabe que si no quieres que te acusen de asesinato lo mejor que puedes hacer es esconder información para entorpecer la investigación. Y así con absolutamente todo: personajes que ven actitudes sospechosas que dejan pasar porque si, información y pruebas que no toman en serio, etc. Por otro lado, la autora pretende dar unos giros a la trama que no sorprenden a nadie y que no la hacen más interesante porque utiliza de manera muy descarada las casualidades para que se descubran ciertas cosas. Y el supuesto misterio y conspiración médica que hay detrás de todo es evidente desde el principio. Que no digo que en la época en la que fue escrito el tema médico que trata no fuera novedoso pero ahora es algo que no sorprende. Una de mis peores lecturas de 2020. + Leer más |
El 31 de enero de 2020 fallecía a los 92 años la prolífica escritora neoyorkina Mary Higgins Clark, autora de más de 50 novelas, enmarcadas, en su mayoría, en el género del suspense. Sus obras carecen de violencia y de sexo explícito, una de las características por las que sus libros han tenido tantísima difusión, consiguiendo que veintiuno de ellos se convirtieran en bestsellers.
En este vídeo, Ana Ballabriga nos hablar de algunos hitos de la vida de esta autora, así como de algunas de las claves que definen su obra literaria.
