Rompiendo las reglas

CRÍTICA DEL PRIMER Y SEGUNDO LIBRO DE LA SAGA

Cruzando los límites y Rompiendo las reglas, primera y segunda parte respectivamente, son los libros que forman la nueva saga de María Martínez. Cuentan las historias de amor entre una chica de una clase más rica o acomodada y un chico de una clase más baja, argumento que se repite en los dos libros, independientes entre si. Y, como la trama principal no es lo único que se repite, he decidido hacer una reseña conjunta, para comentar los puntos positivos y negativos de una vez y no tener que repetirlos en dos entradas distintas.

Si juntásemos los típicos clichés de la literatura romántica YA (Young Adult), con su previsibilidad, su chico malo y chica buena y su sexo sin compromiso que termina siendo algo más, tendríamos como resultado Cruzando los límites y Rompiendo las reglas. Por suerte, su pluma de la autora consigue que, a pesar de su uso de tópicos que no aportan nada novedoso a la trama, el lector encuentre unas historias divertidas y tiernas que le harán disfrutar y le sacarán más de una sonrisa. Ese es, en mi opinión, el punto fuerte de María Martínez, su capacidad de crear un relato fresco y entretenido a pesar de lo manido de muchos de sus elementos. al igual que muchos libros y películas de corte romántico, sabes cómo van a acabar los libros incluso antes de empezarlos pero se disfrutan igualmente.

Personalmente, he de decir que me ha gustado mucho más Rompiendo las normas, el segundo libro. Me ha parecido una historia con más chispa (y no me refiero solo a entre los protagonistas), con diálogos más ingeniosos y situaciones más comprometidas y entretenidas. Los personajes también me han agradado más; los conocimos un poco de pasada en Cruzando los límites así que está genial poder conocer su historia de amor más a fondo.

Cruzando los límites, en cambio, resulta un libro algo más pausado y los personajes secundarios quedan más en un segundo plano. Eso último es algo pasa en las dos partes pero se aprecia más claramente en la historia de Savannah y Caleb (los protagonistas de Cruzando los límites). Además, el principio no terminó de convencerme, me pareció forzado, lo que hizo que no entrase en la lectura de muy buena manera.

Resumiendo, son dos historias de amor tiernas y muy bien escritas, de esas que la romántica empedernida que hay en mi disfruta de especial manera, a pesar del punto negativo mencionado (punto negativo que en el 98% de las novelas contemporáneas también encontramos).
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