Palabras que nunca te dije

Desde el inicio de la reseña hay que destacar uno de los aspectos que me han gustado más: los personajes. En el caso de Sara -la protagonista- está hecha con un cariño especial en el que se muestra la fragilidad, la incertidumbre, el desconcierto que supone la pérdida de algo anhelado y la impotencia de la desesperación y la insatisfacción personal. Crear un personaje tocado por circunstancias emocionales no es fácil de desarrollar y de Sara, lo que puede decirse es que es real. Todos los que hemos sentido decepción en la vida entendemos los sentimientos de Sara y verlos reflejados con esa exactitud es una experiencia dolorosamente purificadora. Respecto a Jayden, es de ese tipo de personajes con los que conectas de inmediato y complementan y engrandecen al personaje principal, que para mí es Sara

Unido a los personajes, sin lugar a dudas lo que más me ha impactado de la novela es lo emocional, tierna y bonita que es su lectura. Lo más importante de la historia que nos cuenta María Martínez no es la historia en sí, las relaciones que surgen ni la interacción de personajes (que también), sino los valores tan potentes que transmite con sus palabras. Lealtad, lucha, constancia, valor, amor. Sobretodo amor, ese motor que mueve el mundo y lo hace un poquito más brillante en momentos de oscuridad. Y no solo nos habla de un único amor, sino del amor hacia la familia, hacia las promesas hechas que significan algo más que meras palabras, del amor hacia uno mismo, tan difícil de trabajar y conseguir a veces.

Soy de la opinión de que para escribir sobre sentimientos (y que transmita y traspase el papel), tienes como autor que dejarte un trocito de tu alma en lo que escribes. Creo firmemente que María aquí lo ha hecho sin lugar a dudas, dejando en el lector un poso de sentimientos positivos que te arrancan el corazón y te lo reconstruyen poquito a poco.

Creo que con esta historia, María ha creado lo que en japonés se llama Kintsugi: el arte de recomponer algo dañado pero enalteciendo lo imperfecto. A lo largo de sus páginas, sus personajes aparecen en cierto modo fragmentados, con imperfecciones, pequeñas grietas en su armadura. Pero en lugar de intentar ocultarlas, María las exhibe al lector y las resalza como algo digno de mostrar. al igual que en el arte del Kintsugi, los daños que muestran los personajes son dignos de exponerse porque cuentan una historia, un camino de guerrero que consigue que ese personaje sea único y especial. La historia no va de intentar arreglar los desperfectos, sino que muestra que la auténtica belleza está en la reconstrucción, en la existencia de un fragmento roto y una voluntad de recomposición; un Ying y Yang que nos hace más hermosos y fuertes.

Más allá de la historia en sí, ha sido increíble viajar y recorrer la campiña francesa con Sara y Jayden. Ha sido fantástico pasear junto a ellos entre viñedos y embarcarme en este viaje tan emocional. Yo solo aviso: si alguien de los presentes está dispuesto a comprarme un chateau en la Provenza, yo estoy dispuesta a sacrificarme y aceptarlo. Que conste en acta.

¡Pero, eh! No todo van a ser buenas palabras para esta novela. Estoy terriblemente molesta con María Martínez. Mucho ¡Muchísimo! de la cárcel se sale, pero ¿y de las ganas que te genera esta novela de visitar los viñedos y de ver puestas de Sol en mitad de campos de lavanda? No amigos, de eso no hay solución, ni alternativa posible. Esta novela debería venir con un WARNING gigante para que las pobres almas como la mía sepamos que va a ser leerla y generarse un deseo irrefrenable de querer perderse en la Provenza francesa.

En definitiva, Palabras que nunca te dije es un viaje sensorial que te removerá los cimientos del alma y te hará sangrar un poquito el corazón (pero merecerá la pena). Con unos personajes muy humanos, un entorno idílico entre campos de lavanda y unos valores y enseñanzas preciosos, es de esas historias que se quedan contigo aún después de haber pasado la última página.

No había tenido la oportunidad de leer a la autora , por lo que esta es mi primera toma de contacto con ella.
Palabras que nunca te dije es una novela que cuenta con protagonistas de caracteres diferentes .Este libro contiene tanto problemas de autoestima, ganas de salir adelante, la responsabilidad, amistad, romance,...
Sara y Jayden se encuentran un verano. Ambos guardan situaciones que prefieren mantener en silencio , pero la conexión entre ellos hará que poco a poco se vayan quitando esa carga que tanto les pesa.
Lo que menos me ha gustado es lo malhablado que es Jayden , pero entiendo que es un rasgo de la personalidad del personaje.
Y , aunque Jayden es un encanto , y desde el principio cae bien , a Sara la he comprendido mejor, pues ella tenia mucho mas que perder a la vez que quitarse muchísimos miedos. Se nota bastante la evolución que ha dado desde el principio al fin.
No es una historia que me haya hecho engancharme al máximo , pero si la he disfrutado , he sufrido , y he sentido junto con los personajes.
Además , se que volveré a leer a la autora.

Palabras que nunca te dije, es una novela de amor muy linda, pasional y con un lindo mensaje que consigue hacer reír, llorar y suspirar. Nos adentrara en la vida de Sara una mujer con un matrimonio infeliz, además la acompañaremos en su proceso de la superación y el amor propio.

La historia nos cuenta la vida de Sara, una mujer que está a punto de cumplir los treinta años, tiene un hijo y está enfrascada en un horrible matrimonio. Ella hace hasta lo imposible para que su matrimonio funcione, pero es imposible cuando su marido es un hombre arrogante, tóxico y que al parecer tiene un concepto muy diferente de los que es una esposa. Aún así ella alberga la esperanza de que el amor no haya muerto del todo entre ellos y las cosas mejoren, sin embargo, la dura realidad a la que no quiere enfrentarse es que allí ya no hay nada que pueda arreglarse, solo penas, reproches, dolor y palabras que no tiene la valentía suficiente para decir.

Las cosas empiezan a cambiar para Sara cuando su amiga Christina la contrata para hacerse cargo de la remodelación de un hotel que ella posee, para eso ella tendrá que hacer un viaje a un pequeño pueblo de la Provenza llamado “Tulia”. Allí conocerá a Jayden un joven soldado que lleva siete meses viviendo allí con el único fin de afrontar su pasado. al ellos encontrarse sienten cosas por el otro desde el primer momento, pero ya que Sara está casada y la infidelidad es una línea que no quieren cruzar, deciden comenzar una linda amistad y no llevar las cosas más allá, sin embargo, con el paso de los días empiezan a necesitar del otro más de lo necesario y eso resulta muy complicado, más cuando la atracción entre ellos está a punto de explotar y los besos y caricias para ese momento son imposibles de evitar.

Considero que la autora consigue algo muy especial con esta historia. Es ese tipo de libros que te engancha, no puedes parar de leer y terminas leyéndolo en nada, porque logra sin mucho esfuerzo que desde el principio te adentres en ella y por consiguiente logra transmitir tantos sentimientos.

a trama me sorprendió mucho porque, aunque tenemos el amor como factor principal también se introdujo levemente otros géneros, nos da algo de drama y unas pinceladas de acción, hay varias escenas capaces de arrancarnos lágrimas y poco después hacernos sonreír.

Algo que me gusto es la manera que se desarrolla la relación entre los protagonistas. Es una relación que a pesar de que sabemos que se desarrolla en poco tiempo, no se siente para nada apresurado. Nuestros protagonistas se toman el tiempo de conocerse, ser amigos y con el tiempo dar el paso a sentimientos que puede que ya sentían pero que no querían dejar salir.
Es que la química de los personajes es tan fuerte. Su relación es simplemente hermosa, fresca y llena de pasión, todo lo contrario, a la relación entre Sara y su marido.

Lo que no me gusto es que, siento que le falto darle al final a Sara más autonomía. Me hubiera gustado que el cambio que decidió darle a su vida al final, fuera por ella, por su salud mental, porque no estaba dispuesta a soportar palabras destructivas, porque quería ser feliz, no por otra persona y porque algo malo sucedió.
Enlace: https://booksandstoriesofmyh..

Sara, una mujer que está a punto de cumplir los treinta años, con un hijo de diez años y se encuentra estancada en un matrimonio sin futuro. Hace lo imposible para que funcione y espera que las cosas mejoren, pero ya no queda nada que arreglar, solo reproches y dolor. Cuando su mejor amiga Christina le pide que le ayude a remodelar un hotel que le quedó en herencia, al principio se rehúsa ya que tendría que hacer un viaje a un pequeño pueblo de la Provenza llamado Tullia, pero ocurre algo que le hará cambiar de opinión. Allí tendrá la oportunidad de reencontrarse consigo misma. Por si fuera poco a esa ecuación hoy que añadirle a Jayden, un soldado que lleva siete meses viviendo allí con el único fin de afrontar su pasado. La atracción entre ellos es innegable pero ¿será suficiente como para dejar atrás sus miedos? Si queréis saber como sigue la historia os recomiendo que la leáis una preciosidad me a gustado mucho.

Sara, nuestra protagonista, a sus 30 años lleva media vida casada, tiene un hijo de 10 años al que adora y por el cual sigue luchando día a día por su matrimonio. La relación con su marido hace mucho que no funciona y ella está resignada a que esa sea su vida.
Su mejor amiga, Christina, quiere sacar a su amiga de ese bucle y le pide un favor, que se vaya se vacaciones a reformar la château que fue de su padre. Aunque Sara tiene reticencias sobre esto al final da el paso y esa experiencia cambiará el rumbo de su vida. Allí conocerá a Jayden, un militar que llega a Tullia con el propósito de enfrentar algo que le pasó estando de servicio. Ambos encontraran el apoyo del otro imprescindible para seguir adelante.
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Este libro ha sido el primero que leo de la autora y ojalá lo hubiera hecho antes, se ha convertido en un libro muy especial para mí y de mis favoritos.
La trama es sencilla, real, un amor imposible que ambos saben que es así, se da despacio, y va creciendo sin que puedan hacer nada.
Los protagonistas son perfectos. Sara me ha hecho sufrir mucho, su vida, su resignación y el amor hacia su hijo son puntos muy importantes en la historia y conocer a Jayden hacen que su personaje tenga una evolución espectacular.
Por otro lado y como favoritísimo para mi ha sido el personaje de Jayden, tenéis que conocerlo, no puedo decir más sobre él, pero ojalá y no se hubiera acabado nunca esta historia.
Hacia mucho que no podía dejar de leer con un libro, así que solo puedo recomendároslo mucho y si lo leéis contadme que os parece.

Llevaba tiempo para leer este libro y aunque está bien no ha sido todo lo que esperaba.

Con el personaje de Sara he tenido momentos en que quise darle de tortas por tonta y otros en los que me daba mucha pena al verla tan apocada. Esta chica necesita quererse más a si misma, sin necesidad de apoyarse en otra persona...
En cuanto a Jayden... me ha parecido un personaje un tanto forzado, y todavía no lo termino de entender.
La trama está bien, entretenida en ocasiones, conmovedora en otras, aunque un poco lenta en su parte inicial, y la narrativa de la autora me encanta (como en otros libros que he leído de ella) con el equilibrio justo entre narración y diálogos.

Una historia que sin duda gustará a los lectores de novela romántica

"Las personas necesitamos sentirnos amadas y deseadas, si no, nos marchitamos."

Es el tercer libro que leo de la autora y sin duda se ha convertido en mi favorito hasta el momento. Palavras que nunca te dije relata la historia de Sara, una mujer que vive en un matrimonio que la consume y en el cual no es feliz, pero del que no sabe salir porque esa es toda la realidad que ella conoce. Su hijo y su dependencia económica y emocional hacen que no vea una salida más que seguir luchando por un matrimonio sin futuro y en el que no es feliz. Pero todo esto cambia cuando por cosas del destino va a Tullia, un pueblecito de Francia en el que conocerá a Jayden, un americano que se encuentra ahí con un propósito, y que sin él saberlo la vida le dará una segunda oportunidad.

Estos dos personajes me han tocado el alma. Con Sara he vivido en primera persona lo que por desgracia muchisimas mujeres viven a día de hoy. Como una persona tóxica puede hacerte sentir menos, despreciarte, humillarte con sus palabras y actos. Aclarar que no hay maltrato físico en la historia, pero en mi opinión he visto reflejado maltrato psicológico en el matrimonio. Jayden por el contrario es el reflejo de lo que debería ser un amigo, amante y compañero.

La historia de amor entre Sara y Jayden se basa en el amor, en querer ver a la otra persona feliz, logrando sus sueños, superándose y valorandose. Y de no dejar pasar ciertas oportunidades en la vida para ser feliz.

Os ánimo a que leáis esta preciosa novela en la que llorareis a mares y veréis las decisiones que toman nuestros protagonistas para ¿finalmente dejarse llevar y ser felices o renunciar a sus felicidad a causa de sus miedos?

“Palabras que nunca te dije”. Si ya de por sí el título llega, esperad a leer la historia de Sara y Jayden. Reconozco que al principio me costó engancharme, incluso la abandoné y leí otros tres Libros hasta volver a darle una oportunidad tras varias recomendaciones. Y cuánto me alegra!! He vivido la historia de Sara y Jayden narrada en tercera persona con una sensibilidad maravillosa como si la estuviera viviendo de verdad. He llorado, he sufrido, he reído y, como deben provocar estas tramas, me he enamorado, cómo no, de Jayden, el hombre perfecto. Sí, demasiado perfecto diciéndole a Sara, entre otros dones, lo que a todas las mujeres nos gustaría escuchar alguna vez en la vida, pero eso es lo que buscamos en una novela romántica, así que, para mí, no es un defecto, sino una invitación a soñar y a dejarnos llevar. No solo hay amor, también acción. Todo narrado de manera inteligente y muy bien documentado, sientes que de verdad estás en la Provenza y en esa casa que le cambia la vida a sus protagonistas. Todos y cada uno de sus personajes son extraordinarios (incluso el que nos cae tan mal, Colin, el marido) y me ha dado una pena terrible despedirme de todos ellos en los tres días que me ha durado el libro. Para las más románticas, leedlo hasta el final. Una delicia.

María Martínez nos enamoró con “Cruzando los límites” y “Rompiendo las reglas”, con “Una canción para Novalie” nos mostró la fuerza de la vida y hoy regresa a nuestras manos con Palabras que nunca te dije, un título muy sugerente, solo al leerlo ya me sedujo y me invitó a pensar cuales eran las palabras que nunca le he dicho a alguien y casi todas las respuestas me llevaban a una despedida, a no haber reconocido algo a tiempo o al mero hecho de haber podido decir algo y por cobardía haber callado.

Nuestra protagonista es Sara, una joven treintañera, casada con un hombre que no la ve y con un hijo maravilloso. Sara no existe, está escondida bajo un gran caparazón de inseguridades fomentadas por su marido y que ella se ha creído, es muy vulnerable pero afortunadamente tiene una amiga que ve mucho más allá de su caparazón y que la invita a vivir una locura.

Christina le pide que vaya a la Provenza, a su château para controlar las reformas, un lugar precioso donde pasar unas semanas consigo misma y aunque parece que solo va a vigilar la construcción de una casa, Sara acabará construyendo una nueva Sara, una joven vital, con ilusiones, con nuevos sueños aunque encadenada a su marido por el bien de su hijo.

Allí, Sara conocerá a Jayden, un americano con el alma rota y que ha tomado ese destino por un motivo muy concreto pero que aún no está preparado para afrontar.

Juntos descubrirán una dinámica maravillosa, se complementan a las mil maravillas y se aman con locura, pero ambos saben que aquello no puede durar, Sara volverá con su marido y Jayden a su hogar.

Quizás ese verano les de las suficientes alas para vivir una vida separados o quizás sea el destino cruel el que los separe para siempre, pero como muy bien dice el título, ambos callan lo que sus corazones sienten, esa puerta blindada a su corazón ya tiene las bisagras rotas y oxidadas, solo hace falta un empujoncito para que caiga con un gran estruendo y les revolucione para siempre.

Una novela profunda, donde el rol de madre se antepone al de mujer, donde un marido ausente tiene un gran poder y donde el amor florece entre la lavanda y brilla como luciérnagas en una noche de verano.

Una prosa ligera, un tempo sostenido y unos personajes sólidos y muy reales hacen de esta lectura el sueño perfecto para el verano.

Nadie sabe que nos deparará el futuro, pero cuando un amor de verdad llega a nuestras vidas es capaz de poner el mundo patas arriba y despertar no solo la lujuria, sino la ternura y sueños de princesas.

Tanto Sara como Jayden deberán afrontar una prueba muy dura, destruir los fantasmas de sus pasados y dar un paso al frente para poder decir algún día aquello que en su momento no se dijeron.

A veces hay que ser muy valiente para decir “Te quiero”, pero aún mucho más para luchar por ello.

Titania nos presenta un secreto a voces, un sueño de verano y un futuro demoledor. Una historia que quedará grabada en vuestra memoria por su ternura, su valentía y su promesa.

No esperéis a que os lo cuenten, mejor que las palabras que opinan queden en silencio y se compartan con otras que ya la hayan vivido. Aquí os dejo un pequeño rayo de sol.
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Sara no es feliz con su vida y aun así lucha con todas sus fuerzas para salvar su matrimonio pero su marido no se lo pone nada fácil y ella no puede más. Las cosas no salen como había planeado y harta de lo que siente decide hacerle un favor a su mejor amiga y viajar sola a la Provenza. Allí su vida comenzará a cambiar y conocer a Jayden solo hace que por fin se sienta bien.

Con Palabras que nunca te dije la autora comienza una nueva etapa ya que nos encontramos con una historia de Romántica adulta, un género completamente distinto a lo que nos tiene acostumbrados y las expectativas estaban altas pero tengo que admitir que me ha enamorado por completo.
Sabía de esta historia desde hacía mucho y le tenía unas ganas inmensas. La verdad es que no podía pedirle más a la historia ya que es todo lo que podía desear.

Nos encontramos con una historia real que tiene como una denuncia encubierta y que nos enseña un par de valores muy importantes como por ejemplo a no tener miedo de los cambios o a dejar atrás aquello que nos impide avanzar, me ha parecido precioso.

La historia engancha mucho y se lee en nada. El estilo de la autora es sencillo y ágil pero consigue trasmitir muchísimo y aunque el principio es bastante introductorio enseguida te sumerges en la historia.

Sinceramente la historia me ha encantado, María Martínez consigue hacer la historia muy especial y he terminado de leerlo con una gran sonrisa. Aunque tengo que admitir que como me pasa siempre con sus libros he sufrido y me he cabreado pero merece tantísimo la pena pasar por eso.

Con los personajes tengo un tira y afloja muy fuerte. Sara es una mujer que me ha puesto muy nerviosa. Por un lado, entiendo sus razones y sus miedos pero por otro lado, no aguantaba lo que provocaba. Pero aun así es un buen personaje que tiene una evolución asombrosa. Puede ser alegre y cariñosa y al final me ha gustado mucho. Jayden es el hombre perfecto, no hay otra forma de describirle. O sea no puede estar más idealizado y yo admito que me ha enamorado por completo. Es fuerte, valiente, atento... He suspirado por él y hasta he suplicado por uno en mi vida (la autora me ha dicho que era imposible 😢)

Encontramos otros personajes que componen la historia y que también me han encantado. A la mejor amiga siempre la recordaré porque un apoyo así siempre hace falta.

Solo me queda recomendar el libro hasta la saciedad y si sois tan románticos como yo este libro os va a encantar.

En resumen, Palabras que nunca te dije nos muestra una historia increíble y preciosa que consigue hacer reír, llorar y suspirar. Sin duda, se ha convertido en una de mis mejores lecturas y solo espero que os apetezca conocer a Jayden y Sara y su gran historia.


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