Siempre tendremos 20 años

Fantástico, me ha encantado y me ha conmovido. El comic cuenta la historia de jaime, el propio autor. Comienza en Barcelona, la noche en la que murió Franco y la vida en su familia, comunista, dio un giro. A partir de ese momento, Jaime, con grandes cualidades para el dibujo, realiza un recorrido por su adolescencia y juventud hasta el año 2014. En el cómic habla de la familia, de los amigos –el centro de toda la trama– del heavy metal y del despertar a la vida pero sobre todo de un sueño: el sueño de ser dibujante de cómic.

Me he sentido unida a Jaime en algunos aspectos, sobre todo con esa camiseta de Motorhead que yo también adoraba en mi adolescencia; el descubrimiento de los primeros discos de rock que llegaban, sobre todo de AC/DC; el copia y recopia, arma y mezcla cintas de cassette que escuchábamos mil y una veces; los cómics de Milo Manara, y los parches en las cazadoras. ¡Menudo paseo me he dado por la vida de Jaime! Y ¡cuántas cosas de la suya me han recordado a la mía! Fantástico. El final, con ese guiño y reconocimiento al papel de su madre en su éxito profesional, no podía haber sido mejor.

Me gustó especialmente la escena del principio. Por un lado me recordó al presentador de televisión que anunció la muerte de Franco con su profusión de pena en blanco y negro y una afectación idéntica a la de un director de periódico que tuve de jefe. Siempre me imaginé a la gente en sus casas reproduciendo justo lo que describen las viñetas: feliz celebrando la muerte del dictador.
Este cómic es testimonial (por cierto, no sé si se dice cómic o álbum, soy un muy ignorante en este formato). Es curioso que se diga de la década de los ochenta que fue una época de derroche y progreso económico, cuando desde siempre yo solo recuerdo inestabilidad y un sentimiento de angustia por la completa incertidumbre laboral, con independencia del sector al que te dedicases. Es algo que sigue ocurriendo, por desgracia, y esta obra lo refleja bastante bien. Lo mismo puedo decir del irremediable sentimiento de pérdida de la ligereza que existe en la juventud cuando tienes que asumir responsabilidades.

Genial obra en formato cómic, en la que se hace un repaso de la vida cotidiana de unos jóvenes de clase obrera (precisamente, la vida del autor de este título), desde la niñez en los años 70, a la vida adulta ya entrados en el siglo XXI, pasando por la adolescencia y los diferentes sucesos que vivió España a lo largo de esas décadas. En este caso, la historia está ubicada en Barcelona, pero perfectamente nos podemos ver reflejados cualquiera que hayamos crecido en un barrio obrero de cualquier ciudad del país.

Además, se hace un repaso musical también de los inicios del género rockero más duro (el heavy metal) y cómo los jóvenes de toda una generación descubrían este maravilloso género musical.

Maravilloso final, por cierto. Mis felicitaciones al autor, que no conocía hasta la llegada de este volumen a mis manos, por la creación de esta obra (biográfica) ilustrada tan completa.

Sin lugar a dudas, regalaré varios ejemplares para fechas señaladas en un futuro.

A modo de diario gráfico pensé, en un principio, que esta historia no me iba a aportar mucho interés. al fin y al cabo no dejaba de ser la vida de un tipo normal, de clase media en un contexto histórico sin mucha trascendencia. Pero la historia de la vida de Jaime Martin no es más que un pretexto conductor para contar la realidad de la España que le tocó vivir, incluso la que no le tocó directamente, reflejada en las vivencias de sus padres y abuelos. Y finalmente se agradece que sea contada desde una perspectiva humilde. En esta novela Jaime Martin deja al descubierto momentos personales tanto suyos como de sus amigos y familiares dentro de un contexto político histórico que vuelven esta historia intrascendente en la más trascendente para nuestra generación, y acabar leyendo las últimas páginas con un nudo en la garganta sentado en la silla con la mirada perdida pensando en cuanto de ti hay también en este diario.