El faro del silencio

En este libro me he vuelto a encontrar la sorprendente ambientación, seña de identidad del autor, que tanto me gustó en la otra novela. Y por supuesto, también está muy presente su forma de describir sin tapujos las escenas de los crímenes y los cuerpos que van apareciendo que no es apta para personas sensibles, y a mí eso me encanta.

El personaje principal es Leire, una escritora que vive sola en un faro apartado de un pequeño pueblo de la costa. Así que los escenarios dan mucho juego para poder crear una buena atmosfera de tensión y misterio. Durante toda la trama la principal investigadora, y en quién recae todo el peso de la trama, es Leire, ya que los agentes encargados de los casos están en un segundo plano.

Otra de las cosas que me han gustado bastante ha sido la historia del pasado que va intercalando con el presente y que va aportando pistas y también dudas sobre quién puede ser el autor de los asesinatos. Una de las mayores características de este autor es la cantidad de sospechosos que aportan sus historias, hay momentos que he llegado a sospechar de todos los personajes que aparecen.

Bien es verdad, que al final me han faltado un par de explicaciones sobre unos detalles que en mi opinión quedan un poco cogidos por los pelos, pero todo no puede ser perfecto. Así que seguiremos leyendo a este autor.