Todos los personajes tienen una construcción similar, pues se encuentran en una misma situación. No he logrado empatizar con ninguno de ellos. La autora escribe bonito y con delicadeza, logrando que el lector avance en su lectura con fluidez. Además, alternar entre pasado y presente aporta un ritmo más ágil. No recurre a excesivas descripciones, pero sí aporta datos de la trama que poco a poco irán conectando. Además, consigue adentrarte en el mundo de Taylor y en su mente, a pesar de no lograr conectar con ella. La historia se me ha hecho bastante aburrida, pues tardó mucho en despertar un interés en mí que se volvería a ir rápidamente. Esperaba una historia profunda y ha resultado ser bastante plana para mi gusto. |