A la caza del diablo

Después de los sucesos ocurridos en el RMS Etruria, Audrey Rose y Thomas desembarcan en Nueva York para intentar resolver el caso que los ha llevado allí. Pero a medida que los días pasan, más sucesos macabros siguen a la pareja, quien cada vez está más convencida de que un imitador de Jack el Destripador acecha en la ciudad americana. Pero esta nueva ciudad esconde muchos secretos y quizás algunos de ellos no sean fáciles de asumir, ¿podrá la pareja resolver este nuevo misterio o será demasiado peligroso para ellos?

Tenía muchas ganas de leer el desenlace de la historia de Audrey Rose y Thomas ya que esta saga se ha convertido en una de mis favoritas y la verdad es que me ha gustado bastante. En esta ocasión la historia tiene lugar entre Nueva York y Chicago, dos ciudades que recorremos junto a Audrey Rose y Thomas mientras investigan la muerte violenta de varias mujeres que tiene lugar primero en Nueva York y luego en Chicago, ciudad en la que se celebra la Exposición Mundial Colombina. La verdad es que aunque he disfrutado este último libro, tengo que decir que el caso que investigan nuestros protagonistas es de los que menos me han gustado. Para mi gusto, todo el tema del misterio que rodea a las muertes y desapariciones de mujeres así como la investigación pierde bastante peso en favor de la trama romántica, cosa que aunque no me ha disgustado sí que me ha decepcionado un poco. Además aparecen poquísimas muertes y las pistas que llevan a los personajes a viajar a Chicago me parecieron muy flojas y metidas con calzador, igual que el culpable del caso, que me pareció muy fácil de adivinar ya que apenas hay personajes sobre los que poder sospechar. Tampoco me entusiasmó la manera en la que la autora relaciona al culpable con Audrey Rose, me pareció todo demasiado conveniente y algo difícil de creer. En cuanto a los personajes, todos me siguen encantando, están muy bien construidos y tienen su papel en la historia. Además me gustó que la autora incluyera a personajes que ya habían aparecido en libros anteriores, me pareció un gran añadido, así como la aparición de nuevos personajes, como la abuela de Audrey Rose. Aunque mis favoritos son, sin duda, Audrey Rose y Thomas, me encantan sus interacciones así como la evolución que han tenido a lo largo de todos los libros. La pluma de la autora me sigue encantando, es ágil, fluida y te mete de lleno en la historia con las maravillosas descripciones que hace de los lugares, la ropa que visten los personajes así como de lo que está sucediendo en cada momento. Otra cosa que destacaría es la edición del libro, está muy cuidada, no solo los inicios de capítulo, sino que incluye numerosas fotografías de la época que te ayudan a imaginarte algunas cosas y transportarte de lleno a la historia. Además incluye un relato de Thomas que me ha parecido muy interesante ya que vemos desde su perspectiva como vivió los últimos sucesos que ocurrieron en A la caza de Houdini. En definitiva un último libro que me parece el desenlace perfecto para concluir una saga increíble.

Y llegamos al final de esta saga tan espectacular para cualquier amante de las novelas negras o se inician en ella. Fue un buen final, tanto por la historia como para los personajes.

El anterior libro nos deja con ese pie de que ya querías saber quien era ese nuevo asesino que estaba en Estado Unidos y que se parecía tanto al tan conocido Jack el Destripador.

Le saco solo una estrellita porque casi al principio del libro con los problemas de Audrey Rose y Thomas con el tema de su boda me resulto un poco fastidioso cuando se estaba alargando mucho YA necesitaba misterios e investigación, pero cuando llegaron a Chicago absolutamente lo ame tanto por quién seria ese asesino y cuando se nombro a un físico que soy muy fans que es Nikola Teslas (más abajo dejare el link de la entrada que hice en el blog sobre él para que lo conozcan un poquito) fascinación total fueron esos capítulos jajaja

Aunque a medida que avanzaba iba sospechando quien podría ser ese imitador o no (los dejo con la intriga ;) ) de Jack el Destripador, cuando al final se supo me decepciono un poco y es que me gusta que mis suposiciones no sean las que pensaban y que el autor me de una sorpresa con algún personaje que no pensara que podría ser, como me paso con los anteriores libros.

Pero sin duda alguna es una saga que me encanto (si, lo vuelvo a repetir jajaja) porque tiene absolutamente de todo misterio, thriller, paranormal, historia y el toque gótico que te absorbe por completo, con unos protagonistas que a pesar de la época de que esta ambientada son una influencia tanto por el respeto por la mujer como la fortaleza con la que hasta el día de hoy luchamos, por esos derechos para que seamos escuchadas y no señaladas que por ser mujeres somos débiles. Thomas es un hombre que cree que la mujer que ama es su par y no alguien que es inferior a él y Audrey Rose es una mujer que demuestra todo el tiempo eso y que nada la limita.

Como todos los libros de esta saga me gusto mucho saber la investigación que hizo la autora para centrarse en los personajes que marcaron en la historia por sus acciones en los fueron conocidos, como dice la autora al final para que nosotros como lectores sigamos investigando y sacar nuestras propias conclusiones o quien dice averiguamos la verdad.

http://plegariasenlanoche.blogspot.com/2018/06/nikola-tesla.html

“A la caza del diablo”, de Kerri Maniscalco, es la última entrega de la saga protagonizada por Audrey Rose Wadsworth y Thomas Cresswell.

Pocas semanas después de su llegada a Nueva York, Audrey y Thomas viajan a Chicago para intentar dar caza al escurridizo asesino que huyó de Londres y ha viajado junto a ellos en el RMS Etruria.

La policía de la ciudad, sede de la Feria Mundial, oculta el gran número de personas que han desaparecido para no empañar los oropeles del gran evento que quiere devolver a Chicago su antiguo esplendor. Lo que los investigadores no sospechan es que las desapariciones están relacionadas con un inteligente asesino que no deja huellas ni cadáveres.

Solo Audrey, su tío y Thomas saben la identidad real del asesino. No conocen su nombre ni su apariencia, pero sí su alias en tierras inglesas: Jack el Destripador.

¡Me ha encantado la novela! al fin se resuelven todas las dudas acerca de la relación entre Audrey y Thomas. El camino va a tener más espinas que rosas, como en las novelas anteriores, pero me ha parecido un magnífico final para su bonita historia.

Una de las cosas que más me ha llamado la atención es que la autora ha utilizado una teoría controvertida sobre Jack el Destripador: que dejó de matar en Londres porque huyó del país y se embarcó a Estados Unidos. Se estableció en Chicago y se convirtió en el primer asesino en serie del país: H. H. Holmes, también conocido como el demonio de la ciudad blanca.

Otro de los puntos a destacar es el empeño de Audrey en que se recuerde a las víctimas. El ser mujeres de clase baja, obligadas a ejercer la prostitución para sobrevivir, no es eximente para que se haga una buena investigación y se encierre a su asesino. Y no cejará en su misión, aun poniendo su vida en riesgo, una vez más.

Un precioso y sangriento final para una de las sagas que más me ha gustado en los últimos años.

Creo que no podría haber llegado este libro en mejor momento, ya que esta saga me encanta, y tanto tiempo sin leer un libro, ya me sentía que me faltaba algo, aunque claro mi cabeza estaba en otra parte. Pero Nai lo empezó antes que yo, y me estaba siempre diciendo que tenía que leer este antes que cualquier otro libro, y que razón tenía. La narrativa de la autora me encanta, es una mezcla muy buena de sencillez, descripciones justas, aunque en algunas ocasiones sangrientas, ya que estamos hablando de asesinatos y que los protagonistas son forenses, todo ello se mezcla en ocasiones con escenarios llenos de belleza, dando lugar a partes donde se recrea muy bien la ciudad de Chicago y su gran feria en La exposición mundial, que tuvo lugar en aquella época, a otros escenarios más tétricos y horripilantes, donde podremos sentir la angustia y el miedo. Lo bueno que me he encontrado y que por lo tanto me ha resultado mucho más fácil asimilar esta lectura y no tanto otras, es que ya me conozco a los protagonistas, no tengo que hacerme a ellos ni a su forma de ser, lo que ocasiona que la lectura incluso fluyera de forma más cómoda, coincidiendo a la vez con una ambientación oscura, bonita y envolvente. También nos ayudará a meternos más en ella, gracias a unas fotografías reales, que aparecen de forma esporádica, que nos vienen acompañando a lo largo de todos los libros de la saga.

Pese que coincidimos en los personajes principales en cada libro, con una narrativa en primera persona contada por Audrey, si que las historias en cada uno de ellos es conclusiva, si van detrás de un asesino o de un caso en concreto la angustia nos acompañará hasta las últimas páginas. Es lo bueno de estos libros, que pese a que te quedas con ganas de más, porque les coges cariño, pero son casos independientes. Lo que me gusta mucho de esta autora, y de estos casos en concreto, es que todos tienen una base real, ya sean los asesinos como Jack el destripador, o escenarios como es el RMS Etruria, como las calles de Londres y de Chicago. Este libro en concreto sigue las pistas de uno de los asesinos más famosos de EE.UU. incluso se considera el primer asesino en serie de la historia de este país. Yo ya había visto documentales sobre su vida, y sobre todo de ese tétrico hotel que construyó, donde asesinaba a mujeres, lleno de trampas, laberintos y un sinfín de atrocidades, todas propias de una película de terror. La autora ya nos comenta que se tomó algunas libertades históricas, como adelantar la fecha de inauguración de la exposición mundial de Chicago en 1893 y los asesinatos de este popular asesino. Pero ya nos dice que era para que coincidiera con la historia de los libros y la llegada de Audrey y Thomas. Algo que no me ha molestado para nada, creo que le ha dado un toque mucho mejor, saber que fue una persona real, y escenarios que existieron de verdad.

Respecto a los personajes, qué decir, que si ya estaba enamorada de Thomas en este tomo me ha encandilado, y ha sido una maravilla, no puedo más que admirar cada paso que ha dado, cada sentimiento expresado, a través de Audrey, pero sentías su devoción y dedicación por la mujer que ama. Es él el que nos ofrece de forma increíble comentarios adelantados a su tiempo, comentarios feministas que hacen que lo adores todavía más, para él Audrey es una igual, y siempre busca ante todo que ella decida por sí misma, sin inculcar su voluntad, algo que era normal en aquella época, recordad que estamos a finales del siglo XIX. Y lo mejor es que en esta edición tendremos un relato exclusivo contado por él, nos meteremos en su cabeza y recorremos algunas escenas decisivas en el RMS Etruria como en algunas partes importantes de Nueva York. Audrey también ha sido una protagonista que me ha gustado, impulsiva y arrojadiza en ocasiones, no ve el peligro, pero ante todo lo hace para proteger a los suyos y a los demás. Ella tiene limitaciones físicas, y lo sientes cómo nos lo va mostrando la autora, dando lugar a una mujer que no es perfecta, pero hace lo posible por ayudar y que todo ello no la limite en su vida. Los personajes secundarios como siempre aparecen, pero tiene poco protagonismo, aunque si ya los hemos seguido desde las entregas anteriores, pues se le coge cariño, como al tío de Audrey. Y para finalizar os comento, que el final de saga es increíble, me ha dejado muy satisfecha en todos los sentidos, tanto en trama, como en la resolución final, en que al acabar el libro lo cerrara con la sensación de haber leído unos libros que me han proporcionado momentos inolvidables, únicos y en ocasiones sangrientos, ha valido la pena por completo, se queda entre mis sagas favoritas.
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En este último libro acompañaremos a Audrey Rose en sus andanzas por Estados Unidos en la época victoriana, persiguiendo a un asesino conocido como el Diablo de la ciudad blanca.

No entraré en muchos detalles sobre la trama para no hacer spoilers de los libros anteriores, pero os diré que esta última aventura me ha parecido el broche perfecto para la saga.

Esta vez vemos más entremezcladas la trama de investigación con las emociones y sentimientos de Audrey y eso convierte este libro en un sin vivir que te atrapa. Me he bebido esta historia porque, literalmente, necesitaba saber qué iba a pasar. Ha sido el típico "solo otro capítulo más" que se convirtió en devorar el libro.

Como siempre, me ha encantado Audrey Rose y en cada uno de los libros se nota la evolución en ella, cómo cada caso que ha resuelto le ha hecho crecer como persona y aclarar sus ideas.

Aunque debo decir que en este libro he adorado especialmente a su abuela, que me ha parecido maravillosa.

En cuanto a la trama de investigación, la he disfrutado muchísimo a pesar de que descubrí quién era el asesino antes de llegar al final.

Otra cosa a destacar es el relato que se incluye al final del libro, que nos adentra en los pensamientos y emociones de otro de los personajes y que me ha encantado. Me ha gustado mucho ver un suceso del tercer libro desde el punto de vista de este personaje.

En general, un cierre perfecto para una saga que he disfrutado de principio a fin, que incluye intriga, investigación, técnicas forenses detalladas (esto conviene saberlo si sois sensibles con este tema, la autora describe con detalle estas técnicas y la anatomía humana) y un desarrollo de personajes muy bien llevado, en el que todos evolucionan en mayor o menos medida, especialmente Audrey Rose.