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Aunque leí este libro a una edad muy temprana, años después he decidido volver a leerlo. Cuando lo compré, años atrás sin duda tenía claro que se trataría de un romance adolescente. Ahora, tras haberlo vuelto a leer se ha convertido en uno de mis libros de cabecera. El libro está escrito de forma que leerlo se hace fácil, hablando tanto de la historia como de la complejidad literaria del texto. Es ameno desde la primera página, a pesar de que reconozco que otros libros de Mathias Malzieu no lo son. Aunque aparentemente y quizás bajo una lectura superficial podamos estar ante un libro de amor adolescente, trata temas como el amor de una madre, y las mentiras. Una obra en la que desde luego se pueden apreciar numerosas metáforas, siguiendo la esencia de Malzieu. Los personajes, son bastante planos en mi opinión, a excepción del protagonista. Quizás porque este es el único que realmente nos acompaña durante todo el libro. Jack muestra en mi opinión una gran evolución, en cuanto al control de sus sentimientos, a la forma de expresarlos. Aunque no tengo palabras malas para este libro, me quedo sin duda con ese final, |
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