En el aspecto formal como unidad de poemario es brillante, pues cierra los significados del poemario en varios círculos comunicados entre sí que a la vez tienen un significado poético y no unívoco ni silogístico. Es un instante estirado desde todos los ángulos, analizado desde todos los ángulos. Quizá demasiado anguloso, a veces la idea o el aspecto filosófico prima sobre el poético lo que le aleja un poco de la realidad de la vida. Es un equilibrio muy difícil de conseguir que se mantiene durante casi todo el libro de una forma muy lograda. Con versos magníficos que dan peso a la totalidad y una singularidad extrema en su escritura, Maillard supera cualquier estimación del libro basada en el título o incluso basada en una idea cualquiera de poesía. Un libro único por muchos motivos. |