De cada quinientos un alma

CONOCIENDO AL AUTOR

- Ana Paula Maia nació en Nova Iguaçu, Brasil, en 1977. Es escritora y guionista. Entre sus libros se encuentran O habitante das falhas subterráneas (2003), Entre rinhas de cachorros e porcos abatidos (2009) y Carvão animal (2011).

- Sus libros han sido publicados en Serbia, Alemania y Francia. Es autora, además, de numerosos cuentos, que forman parte de diversas antologías y han sido traducidos al alemán, al croata, al español, al inglés y al italiano. Su novela A guerra dos bastardos (2007) se destacó en Alemania como uno de los mejores policiales extranjeros.


OPINION

He tenido mucha suerte con las últimas novelas conseguidas a través de #masacritica de @babelioenespanol . Me he encontrado con lecturas muy interesantes, fuera de los circuitos comerciales, que no habría leído si no hubieran llegado a mí de esta forma.

"De cada quinientos un alma" me atrajo en un primer momento por su título y su sinopsis para después conquistarme con la calidad narrativa de la autora y su narrativa profunda llena de metáforas.

Me encontré con una novela corta que se desarrolla en un futuro postpandémico donde el caos y el vacío se han apoderado del mundo conocido para llevarlo al límite de la desesperanza y la desolación. Sus personajes son turbios, crudos, rudos, llenos de debilidades pero valientes a la vez, enfrentados a crisis de fe y a la violencia humana que nos acosa día a día.

Me ha encantado cómo escribe Ana Paula, encontrándome párrafos muy buenos que me han invitado a parar y reflexionar. Quizás lo que menos me ha gustado del libro y ha hecho que baje un poco mi nota es que es demasiado abierto y falto de respuestas. Pero en general me ha parecido muy buena lectura y me ha dejado con ganas de seguir leyendo a la autora.

Vuelvo a la carretera, a los cadáveres y a Edgar Wilson. Vuelvo a su humanidad entre la barbarie y a encontrar la luz entre los escombros. Para mí eso es ya una característica en la escritura de Maia y parte de lo que espero encontrar en sus novelas.

Con su estilo habitual estilo y su capacidad para crear ambientes asfixiantes, la autora brasileña nos sitúa prácticamente en el fin del mundo que conocemos. Tras una extraña epidemia que obliga a las personas a permanecer encerradas (¿queremos llamarlo distopia?) Edgar Wilson debe continuar con su trabajo de retirada de cadáveres de animales de las carreteras. Para él hay muchas cosas que no han cambiado, sin embargo nada es igual y un día sucederá algo que provocará la irrupción de una verdad demasiado dura.

De nuevo Ana Paula Maia nos muestra un trasfondo de crítica social y religiosa en este texto además de una preocupación medioambiental. Como siempre, logra en poco más de 100 páginas que me haga un sinfín de preguntas, y yo, que no lo puedo evitar, me lanzó a ellas de cabeza, si es necesario hasta ahogarme.

Ay, Edgar Wilson, qué personaje tan inolvidable 🖤

Nos encontramos en un futuro posapocalíptico tras una desbastadora epidemia. El mundo está gobernado ahora por el caos, un caos absoluto. Ahora solo hay desolación por todas partes.

Los personajes de la novela son personajes muy oscuros y duros, debido a la nueva sociedad en la que están viviendo. También son personajes fuertes y valientes, con sus luces y sus sombras y también sus grandes debilidades.

Este libro tiene un toque de crítica social, pero también de crítica de la fe o religiosa. Se trata de una lectura bastante interesante y que tiene un especial encanto. La novela está muy bien escrita y es bastante rica, con muchas metáforas y momentos geniales de una gran profundidad.

Me gusta bastante esa forma que tiene la autora de transmitir la atmósfera casi asfixiante en la que viven los personajes. El ritmo es muy bueno, también el libro es bastante corto y se lee en un suspiro. La única pega que le pongo es que es una historia muy abierta.