Humo: Una novela corta española, negra y criminal

«Humo» es una novela corta, no llega a 130 páginas, y pertenece al género negro. La trama se desarrolla a través de tres historias diferentes que, en principio, nada tienen que ver.

En la primera conocemos a Miguel, un boxeador con problemas familiares que se refugia en la violencia y los golpes.

En la segunda, la protagonista es Clara, una prostituta que no sabe cómo salir de ahí.

En la última y tercera historia el autor nos pone en la piel de Javier, un asesino que intenta reinsertarse trabajando en una panadería.

Conforme avanza la lectura, se van descubriendo detalles que van conectando las tres historias y realmente es donde te atrapa.

Los tres protagonistas tienen en común que llevan vidas muy difíciles, llenas de dolor y de sufrimiento, y luchar por seguir adelante es su única opción. de los tres, con la que más he empatizado ha sido con Clara, quizá por su fortaleza y su valor. Las escenas que se narran son impactantes, pero tristemente muy reales.

No puedo decir que no me haya gustado, simplemente me ha costado mucho conectar con esta novela, a pesar de ser uno de mis géneros favoritos. Me ha resultado una escritura demasiado intensa, unas escenas rápidas y muchísimos puntos y seguido que me dificultaban la lectura. Creo que esto puede deberse a que, en principio, Humo iba a ser un guion cinematográfico en lugar de una novela, y la redacción está más orientada al cine.

Aun así, opino que es una trama muy interesante, muy cruda y muy real. El autor no escatima en descripciones, por muy duras que sean, y eso es un punto a favor que te hace meterte en la vida de los personajes y sentir su dolor.

Si os gusta el género negro, os recomiendo darle una oportunidad a Humo.

Hoy os quiero dejar la reseña del libro Humo de Adrián Marco de la Torre. Ya sabéis que me gusta la novela negra y que raro es el mes que no caiga un libro de este género o thriller o policíaca... etiquetas varias para géneros que al final son muy parecidos.

En Humo encontramos tres historias narradas por tres voces diferentes. Aunque estén contadas de forma independiente tienen un nexo en común que descubriremos a medida que avancemos en la lectura del libro. 

No es una novela muy larga, no llega a las 130 páginas, por ello ya podéis imaginar que cada una de las historias es bastante corta, eso sí, corta pero cruda e intensa.  

Primero conocemos a Miguel, un boxeador que solo sabe solucionar sus problemas a través de la violencia.
Después vendrá Clara, una prostituta que intenta salir del ambiente que la rodea y del mundo en el que vive.
Y finalmente, Javier, un asesino que acaba de salir de la cárcel y está trabajando como panadero. 

Para todos ellos la vida no es fácil, el pasado les marca y no pueden huir de él, aunque intenten soluciones desesperadas. Toda la lectura tiene un aire de pesimismo, ves que los personajes hagan lo que hagan no consiguen salir del agujero en el que están, de hecho, incluso sus acciones y decisiones pueden empeorar la situación inicial hasta terribles consecuencias. 

Cada uno de los personajes tiene su propia personalidad, a pesar de la brevedad de la historia que nos cuentan todos tienen sus características bien marcadas.

Encontramos mucho diálogo y no tantas descripciones, ya os decía que depende un poco de la voz que nos esté contando la historia. Lo anterior ayuda a que aún leamos más deprisa Humo. 
El autor no nos evita conocer la sordidez de los escenarios ni del lenguaje de sus protagonistas. 
Es una narración corta que necesita que le prestemos atención, que nos nos perdamos los detalles que vamos encontrando pues no nos lo vamos a encontrar todo masticado, tendremos que ir uniendo piezas para solucionar el enigma que encierra la historia. 

Humo iba a ser un guión cinematográfico pero el proyecto quedó en novela, que oye, pues tampoco está tan mal y quién sabe, quizá empieza así y luego acaba de nuevo en guión y en la gran pantalla.

Al basarse en una plantilla de guión cinematográfico las escenas se suceden rápidas y dinámicas. Las historias son los caminos que recorren los personajes en sus vidas. Vidas difíciles de un mundo donde no hay lugar para la esperanza y todo es desolador.

En definitiva, una novela interesante, entretenida, fácil de leer pero que necesita nuestra atención para que no se nos escapen las piezas que nos darán la visión final del conjunto. Si os gusta la novela negra, no lo dudéis, seguramente os va a gustar Humo. 
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Un boxeador aficionado, una prostituta que quiere dejar de serlo, un asesino arrepentido. ¿Pueden tener algo en común estas tres personas? Para descubrirlo tendrás que leer esta novela.

Los errores del pasado siempre desencadenan consecuencias en el futuro, un único acto de una persona en concreto puede tocar muchas vidas además de la propia.
Una interesante premisa que el autor nos plantea a través de tres historias cortas para contarnos la vida de Miguel, Clara y Javier.

Por supuesto todo el peso de este libro recae en unos personajes muy bien trabajados y desarrollados. Con personalidades muy marcadas y en distintos contextos consiguiendo conectar con ellos y meterse en su propia piel.

Todo esto es posible gracias a la pluma del autor: directa, clara, concisa pero también brusca con un uso del lenguaje que tal vez no sea apto para personas sensibles o que se puedan ofender por la dureza de sus palabras pero necesario para relatar el entorno y vida de sus personajes.

Esto hace que Clara sea el más complicado de leer pero a su vez resulta fácil empatizar con ella. Me ha parecido un trato muy realista de lo que por desgracia sufren muchas mujeres como ella a diario y ha conseguido tenerme leyendo con un nudo en la garganta.

Miguel también ha sido un personaje muy destacable que sorprende gratamente rompiendo estereotipos a la vez que reprime sus deseos más profundos debido a las circunstancias que le rodean.

Por último Javier. Admito que después de leer a los otros dos personajes es con quien menos he conectado pero es la última pieza de un rompecabezas al que tienes que estar atento desde el comienzo de su lectura prestando atención a los pequeños detalles.

Una ambientación correcta sin necesidad de explayarse en exceso consigue que la personalidad de los personajes prime por encima de todo.

Humo invita a la reflexión de cómo nuestros actos pueden traer consecuencias, no solo a nosotros y al presente si no que pueden repercutir en vidas ajenas y en un futuro lejano e incierto.

Miguel es un joven que se gana la vida boxeando. Con ello consigue, no sólo ganar dinero, sino también descargar todas las frustraciones personales que no le dejan ser quien es.

Clara es una prostituta con un hijo con problemas. Está harta de su trabajo pero no sabe cómo salir de ese mundo.

Javier comienza a trabajar en una panadería intentando esconder ahí su pasado.

Son tres personajes, tres protagonistas, tres historias. Parecen tres relatos y como tal se leen. Eso me chocó algo al principio pues pensé que se trataba de una novela. Pero no, cuando terminó la historia de Miguel, empezó la de Clara. Y luego la de Javier. Y parecía que las tres historias no tenían nada más en común que los ambientes marginales en los que se movían los personajes, también marginales. Peroooo, cuando lees el de Javier te das cuenta de que, en realidad, sí que hay algo que une las tres historias y los tres personajes y que este libro disfrazado de colección de relatos, en realidad no lo es. Ya sólo por eso, por ese punto de originalidad, merece la pena su lectura.

Son Miguel, Clara y Javier quienes nos van a contar, en primera persona, sus propias historias. El autor ha sabido dar el tono correcto a cada una de estas tres voces, haciendo partícipe al lector de lo que estos personajes tan complicados sienten. Y eso lo hace en apenas cien páginas, algo muy meritorio. Me han gustado las tres historias pero la que más, sin duda alguna, la de Clara. Aunque todas las historias son duras, la suya me ha parecido la más terrible, la más trágica, por su pasado, por su presente y por cómo termina. Me ha puesto los pelos de punta y no será porque no he leído historias parecidas.

Los ambientes, los personajes, las historias y el tono de la narración son tremendamente negros, sórdidos y brutales. Con una prosa descarnada y unos personajes en el límite, Adrián Magro de la Torre dibuja unas historias muy negras y, al mismo tiempo, muy reales. Me parece que ha acertado con el tono narrativo, frío y ajeno por una parte pero, al mismo tiempo, te implica y atrapa.

El libro se lee en nada. Son poco más de cien páginas, divididas en tres partes o historias y éstas, a su vez, en capítulos. La narración es ágil y hay alguna que otra sorpresa. Adrián no se para demasiado a la hora de dibujar los escenarios y personajes; no podría hacerlo en una obra tan corta. Sin embargo, con pocas palabras bien puestas, consigue dotarles de muchísima realidad; demasiada incluso.

Conclusión final

“Humo” es una novela compuesta por tres historias tremendamente duras. Me ha gustado.


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3.5. Una novela muy oscura, muy cruda, sin pelos en la lengua, directa a la acción.
Estas páginas narran tres historias distintas, pero entrelazadas por un denominador común. Nuestros tres protagonistas, intentan escapar del mundo pesimista y terrible en el que viven, intentan luchar por sobrevivir sus denigrantes y difíciles situaciones.
Una trama original, distinta. Interesante desde el principio. Te engancha y se lee rapidísimo. Te invita a reflexionar sobre un montón de actuaciones, ¿hasta donde es capaz de llegar una persona cuando se siente acorralada?
Sin embargo, a veces te encuentras con una prosa un tanto difícil de seguir. Si bien elegante, quizás excesivamente reflexiva y cargada de adornos lingüísticos que, inevitablemente te extraen demasiado de la trama. Esto también hace que pierdas el hilo, o no entiendas en determinadas ocasiones los caminos que toman las historias.
Por otro lado, a pesar de que su corta longitud acelera la velocidad de lectura, creo que a esta obra le falta algo de trasfondo, tanto con respecto a los acontecimientos como a los personajes. Así, no terminas de conectar con ninguno de los tres, y no asimilas del todo sus actos.
A pesar de esto, creo que es una lectura entretenida, que se puede leer de una sentada, y que refleja en muchas situaciones la otra cara, tan amarga, del ser humano.