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Un libro que se deja leer, aunque lo mejor de él es su portada, es de esos libros que compras por su portada, pero en los que luego no encuentras lo que esperabas en su interior. pensaba encontrar algo distinto algo más adulto, pero en realidad es una historia New Adult. A causa de una relación pasada Elizabeth se ha prometido no volver a poner su corazón en una relación, por lo que aplica sus propias reglas a sus relaciones: Que no sean populares, ni guapos, ni ricos. Que no beban ni tomen drogas y solo por una noche, no volver a hablar con él, nada de repetir. Bajo esas reglas vive su vida y mantiene a salvo su corazón. Declan es un universitario que se dedica a la lucha clandestina, y acaba de romper su relación con su novia a la que encontró engañándolo con otro. Realiza sus estudios mientras intenta poner en marcha su sueño; abrir un gimnasio e intentar llegar a ser luchador profesional. El chico a pesar de su aspecto de chico duro, es un romántico que solo busca una relación de para siempre. Pues ya os podéis imaginar que vais a encontrar, ella lo desea pero sabe que no se adapta a sus reglas; demasiado guapo, demasiado rico, demasiado popular. Él por el contrario, conoce su reputación y sabe que ella no es lo que busca y que no le conviene. Pero la atracción y la química son muy fuertes y cuando se miran a los ojos ambos pueden ver al otro realmente a través de sus miedos. Alguna que otra referencia y que al personaje protagonista masculino le encanta el libro y nos lo mostrarán leyéndolo en alguna ocasión, son las únicas similitudes que vais a encontrar con Orgullo y prejuicio de Jane Austen. Una historia sencilla que se deja leer, entretiene un rato pero tampoco va a ser de las que pase a la historia ni deje marca en mi memoria lectora. Ahh, la siguiente entrega de esta historia será sobre Dax, el gemelo de Declan y está inspirada en Romeo y Julieta. |
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