Tinta y fuego

Cuando leí la sinopsis del libro, la verdad es que me llamó bastante la atención, pero después de leerlo tengo que decir que me decepcionó bastante. Para empezar la historia no me pareció muy original, tenemos por un lado a un pueblo sometido por otro y además la escritura está prohibida y solo tienen acceso a ella los nobles, el rey, la tutora del príncipe y la aprendiza de esta. Como es fácil de imaginar, un grupo del pueblo que se ha visto esclavizado no está contento con la situación y se han unido para luchar por sus derechos. Es ahí donde entra la Resistencia, quien está cometiendo ataques indiscriminados contra el reino de Qilara para luchar por sus derechos. Como he dicho hasta aquí vemos varias cosas que aparecen de manera frecuente en varias sagas conocidas pero mi problema no ha sido ese. Más bien mi problema viene con los personajes principales, a mi modo de ver muy planos y faltos de personalidad, acción e iniciativa. La protagonista, Raisa, quien pasa de ser una simple esclava a la aprendiza de la tutora del príncipe sufre un instalove de manual por dicho príncipe, cosa que determina cada una de sus acciones. Todo lo que hace, lo hace pensando en él, ni siquiera piensa en sus derechos o en los de la gente que le rodea aunque aquí también entiendo que sintiera miedo y no quisiera poner en peligro su vida. En cuanto al príncipe Mati, tampoco me gustó nada, me pareció de lo más infantil, soso, egoísta y algo cobarde. La verdad es que al igual que el romance se me hacía bola a la hora de leer ciertas interacciones entre los personajes. En cuanto a la pluma de la autora, está bien, es ágil y está llena de descripciones lo que te ayuda a imaginarte el lugar en el que se desarrolla la historia así como toda la trama. Además el mundo creado por la autora está bien, no es muy original pero como amante de las historias ambientadas en países árabes o la India me ha gustado. Una cosa que tengo que destacar es que al comienzo de cada capítulo aparece una breve historia de los dioses en los que creen ambos pueblos que se va desarrollando poco a poco y que se entremezcla y enlaza con la trama principal, aunque tengo que decir que al principio era un jaleo con tanto nombre de dios diferente. En definitiva una historia que aunque no es muy original está entretenida y que además es autoconcluva puesto que aunque este libro forma parte de una trilogía, el resto de libros tendrá a otros personajes diferentes.

Hola, hoy os traigo una reseña de un libro que me guié por su portada para querer leerlo, tengo que reconocer y muchos lo sabéis que soy muy superficial con los libros. En esta ocasión pese a no ser todo lo que esperaba me ha gustado, os comento que tal fue su lectura.



Raisa es una esclava, fue arrancada de su tierra y sus raíces, asesinaron a sus padres por ser un pueblo que comparte la escritura entre todos, y es llevada lejos al igual que a otros niños. Su vida se basa en querer aprender a leer ya que su padre lo único que le dejó fue una nota que guarda como su mayor tesoro. Pero esta oportunidad se le presenta cuándo es elegida para ser instruida como tutora para el próximo heredero al trono. Junto a ella está el príncipe y nacerá entre ellos mucho más que una simple amistad.



La narración que se nos presenta es en primera persona, Raisa nos contará de primera mano lo que sufre para guardar sus secretos incluso frente al príncipe, su único amigo y aliado. Los capítulos se nos presentan cortos y eso hacía que pese a carecer de acción no se me hiciera pesado en ningún momento. La historia al principio se me hizo algo introductoria, aunque tenía curiosidad por saber más sobre la jerarquía , ya que se basaban mucho en que los esclavos eran maltratados y tenían prohibido totalmente aprender a leer y escribir. La rebelión es fuerte y llega hasta el mismo palacio, enseguida quería saber quién era la chica que iban a ejecutar por traidora, ya que Raisa ocupa su lugar y la tentación a ir por el mismo camino es muy fuerte.


Este libro me ha gustado en parte y en otras no, tengo que confesar que no me he aburrido en ningún momento pese a lo que he comentado antes que es un libro que carece por completo de acción. Pero si que tenemos mucho de ello en el final, todo se vuelve frenético y me parece muy bueno, pero a mi parecer un final para no sacar más libros, quiero decir que podría considerarse autoconslusivo, por lo menos a mí no me han quedado unas ganas tremendas de leer el siguiente. La trama pese a que tenemos la resistencia se basa más en el romance de Raisa y el príncipe Mati y en las decisiones de esta en elegir un bando u otro. Lo bueno es que también tenemos la historia de la diosa que regala el don de la escritura a los humanos, y de como es sentenciada por ello, todo se nos dará poco a poco al comienzo de cada capítulo.



Los personajes es de las cosas que más me han flojeado, no les veía que tuvieran mucha personalidad, ya que los veía muy pasivos frente a todo el conflicto. Raisa en muchos aspectos no he llegado a empatizar con ella, es impulsiva y no me gustaron nada muchas de las decisiones que tomaba, así que es una protagonista que no ha llegado a calarme del todo. Mati me gustó algo más, creo que tenía más los pies en la tierra que su enamorada, pero todavía así creo que le falta también mucha chicha, aunque al final si que saca algo más de carácter y sensatez. Los personajes secundarios la verdad es que no salen mucho, me hubiera gustado saber mucho más de la resistencia y de su lider y mucho menos del romance de Raisa, menos mal que al final nos dan una buena dosis.


En conclusión, un libro que pese a que no ha sido todo lo que esperaba lo he disfrutado, aunque los personajes flojean mucho. Lo recomiendo a los que os gusten las historias que predomine el amor prohibido con una trama secundaria que nos brinda acción ya al final de la novela.
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Estamos en un mundo donde la escritura es un medio de comunicación directa con los dioses y está restringida solo a la nobleza. Donde pueblos que sabían leer y escribir han sido esclavizados y hacer uso de ello es sinónimo de muerte segura… Solo hay una excepción: la tutora del príncipe.

Raisa ha crecido como esclava en el palacio, pero sabe que sus padres murieron a manos del rey por pertenecer a un pueblo que sabía leer y escribir. Ahora es elegida aprendiz de tutora y recibirá lecciones junto al príncipe heredero para hacerse cargo en el futuro de ser la tutora del siguiente príncipe heredero.

Es su oportunidad para aprender y tratar de descifrar su almaverso, lo único que conserva de sus padres. Con lo que no contaba es con enamorarse del príncipe con el paso de los años… Y tampoco contaba con que la resistencia la pusiera entre la espada y la pared para que los ayude.

Raisa tiene debilidad por los niños esclavizados y esa es la razón que la convence para ayudar a la resistencia, pero no sabe hasta qué punto la están utilizando y poniendo en peligro a Mati, el príncipe heredero de quien está enamorada.

Mati no es como su tirano padre, quiere cambiar las cosas, pero también sabe que tiene las manos atadas por los sacerdotes y nobles que pueden retirarle su apoyo y acabar con sus ideas renovadoras. Su relación con Raisa lo pone en peligro tanto como a ella, pero no se pueden evitar los sentimientos…

El romance ocupa una buena parte del libro, un romance en el que la confianza en el otro jugará un papel importante y decisivo, quizás más que los propios sentimientos. al fin un romance en que no hay chico malo, aunque sí habrá chica en apuros unas cuantas veces…

Paralelamente a la historia principal conoceremos la historia de los dioses al inicio de cada capítulo. Una historia en la que la traición jugará un papel importante y en la que iremos descubriendo poco a poco porqué se restringió el conocimiento de la escritura solo a unos pocos nobles y a la realeza.

Hay un poco de todo en este libro, un precioso romance, alianzas secretas llenas de peligros, elecciones muy arriesgadas que ponen en peligro vidas, engaños y traiciones, luchas por la libertad y por la verdad…

Y lo mejor de todo: un final cerrado. Aunque vaya a haber una continuación esta tratará sobre otro personaje de la historia y la que nos ocupa queda bien cerrada y terminada. Algo muy agradecer ya que no nos deja comiéndonos las uñas en espera de su siguiente entrega.
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¿Qué puede ser más provocativo que un mundo en el que leer y escribir se hayan convertido en delito mortal? Esta premisa es razón suficiente para acometer la lectura de esta novela, aunque alberga mucho más.

Fantasía exótica, para empezar. Sus leyendas de dioses crueles y su realeza faraónica recuerdan a la cultura egipcia, aunque también tiene toques a lo Mil y una noches.

El lenguaje jeroglífico reservado a la nobleza y al rey suponen una frontera infranqueable para los denostados esclavos, arrebatados por la sangre de sus tierras y sus familias diezmadas. La protagonista es uno de ellos, desde niña al servicio tiránico del palacio qilarita. La primera escena ilustra categóricamente la precariedad en la que sobreviven los arnath, siempre al borde del castigo o la muerte. Pronto el lujo, el feroz protocolo y los peligros de confraternizar con la Resistencia forman parte de la rutina de Raisa cuando es elegida aprendiz de tutora.

Me han fascinado muchos aspectos de esta inspiradora historia. Se relatan fragmentos de las vidas de los dioses, con el origen de los signos de la escritura sagrada y por qué es un arma entre los hombres. La joven Raisa tiene su misión personal asociada a la lectura y a su familia, aunque también cae en la tentadora trampa del amor prohibido. Es algo precioso de sentir con ella, aunque doloroso y traicionero. A veces pensaba que él no la merecía, pero esta relación trágica se convierte en un cúmulo de bellas emociones y en un símbolo de dos culturas en choque irreconciliable.

Poco a poco, se despierta en ella el fuego de la lucha por su pueblo, lo que añade actos de espionaje e ingenio interesantes que se entrecruzan con las intrigas palaciegas. Aunque lo más hermoso para mí es cómo se entrelazan el significado de la escritura y su amor incondicional por el príncipe Mati. Nunca ceja en aprender a descifrar los enigmas de las caligrafías de su pueblo y de los dioses, así como nunca se rinde en su amor por el príncipe.

Sufre tremendos pesares y sacrificios. Me ha parecido de una belleza sublime aunque fatídica. Cuenta con un desenlace épico, místico y salvaje, tan poético y esperanzador como su mensaje. Es una oda a la libertad, a la cooperación contra toda crueldad y tiranía, al poder unificador de la escritura. Hermosísima novela de aventura, amor y fantasía. ¡Y escrita por una bibliotecaria! Algo debe de saber sobre la trascendencia de la palabra ;-)

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