EL FRUTO PROHIBIDO ES EL MÁS APETECIDO

Sally MacKenzie es una autora de romántica histórica que me gusta bastante. Sus libros suelen ser sencillos y divertidos, pero en este caso me he encontrado con una historia que quizás me ha parecido demasiado simple por decirlo de alguna manera.

La trama gira en torno a la maldición que hay sobre Marcus, el duque de Hart, y que le impide llevar una vida normal y los deseos de soledad e independencia de Cat, la hija del vicario del pueblo donde Marcus tiene que ir a ocuparse de unos asuntos relacionados con la maldición. No es que esto no sea una buena base para la historia pero yo me he quedado con la sensación de que se exageraba todo muchísimo cuando la solución a casi todo estaba al alcance de la mano. La propia historia de la maldición ni siquiera se explica bien, se acaba sabiendo que ocurrió pero que hizo exactamente Isabel y cuales fueron sus planes nada de nada. Yo quiero creer que en los siguientes libros irán saliendo las cosas poco a poco pero eso no evita que el primer libro haya quedado un poco a medias. Y tengo que añadir algo sobre el final, de la misma forma que antes, asumo que veremos a estos protagonistas y sus vivencias en las siguientes historias pero ese final sigue siendo un horror. Básicamente termina de golpe en mitad de una escena y se acabó el libro, no hay más. Te quedas un poco cortada la verdad.

En resumen, el libro no me disgusta y lo he leído bastante rápido, pero las razones de que me guste tienen más que ver con que me va mucho el estilo de Sally y por que se que en los próximos libros de la serie tendré toda la información que echo de menos ahora.