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Márgara Averbach (Traductor)
ISBN : 8408170007
592 páginas
Editorial: Destino (30/05/2017)

Calificación promedio : 4.66/5 (sobre 557 calificaciones)
Resumen:
Feyre está destrozada. Y aunque tiene a Tamlin por fin a su lado sano y a salvo, no sabe cómo podrá dejar atrás los recuerdos que la acechan... ni cómo mantendrá en secreto el oscuro pacto que hizo con Rhysand, que la mantiene intensamente unida a él y la confunde.Feyre ya no puede seguir siendo la de antes. Ahora es fuerte y debe romper con todo lo que la ata. Su corazón necesita libertad.
La seducción, el romance y la acción, alcanzan niveles épicos en esta... >Voir plus
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Críticas, Reseñas y Opiniones (216) Ver más Añadir una crítica
Lid02
 02 June 2019
¿Por qué leer este libro? Jolines, porque está Rhysand, RHYSAND, el mejor alto fae de todas las cortes, ese que te saca una sonrisa con cualquier comentario, el modesto Rhysand, el implacable Rhysand, el alto fae más inteligente y poderoso, un cabrón al que no se puede odiar.

"Trata de no gemir demasiado cuando sueñes conmigo. Mi belleza necesita descansar un poco."

En el primer libro no me gustó nada como nació ese romance entre Tamlin y Feyre. Si bien es cierto de que tiene momentos muy cucos porque la autora sabe constuirlos, fuera de eso la verdad es que es una relación muy inestable. Lo que me ha sorprendido en este libro es que muestre esa inestabilidad, que muestre que la relación no es sana porque, aunque los dos se quiera muchísimo, Tamlin se comporta como una bestia sobre-protectora y Feyre acaba decidiendo que no puede soportarlo y que tiene que huir de ello. Me ha sorprendido pues no me esperaba que se diera cuenta de que no es una relación sana y mucho menos me esperaba que hubiera una separación a un grado tan grande. Esta separación es tal que ella se va y disfruta de su independencia, de su libertad sin apenas pensar en Tamlin durante la mayor parte del tiempo. Me ha encantado este grito a la libertad, el grito a la necesidad de no doblegarse por otra persona, por no encerrarse en una prisión y vivir mal por culpa de un sentimiento pasado. Todo ello se agrade porque puede verse una gran evolución en Feyre, una chica que al principio creía que ya lo tenía todo pero tuvo que reemprender su camino para buscar quién quería ser.

"La cuestión no es si te ama, la cuestión es cuánto. Demasiado, posiblemente. El amor puede ser un veneno."

A pesar de todo no es que Feyre me haya encantando sino que tiene cosas bastante estúpidas, sobre todo al inicio con Tamlin pero teniendo en cuenta como se zafa de lo que le disgusta, me alegra ver que es capaz de poner un nuevo rumbo a su vida. Es una protagonista que no está mal por lo general pero tampoco es que me encante. Sin embargo sí que destaca mucho su evolución y, aunque en general me haya parecido normalita, ha habido un par de momentos en los que he aplaudido su valentía y su coraje, entre otras cuando le da la patada a Tamlin/Lucien.

El que sí que me encanta es Rhysand, desde el primer libro caí rendida a sus pies porque es el mejor personaje de toda la saga. Es divertido, es oscuro, es pícaro, es malvado, es demasiado genial y siempre consigue sacar una sonrisa cuando suelta alguno de sus comentarios. También es genial que no se corte en hacerle un zasca a la prota en toda su cara. Es muy perfecto y un personaje muy bien construido por todas las facetas que tiene. Un plus que se lleva por hacer que lo adore en cada una de sus caras.



De Tamlin ya he hablado en modo general pero lo dejo en un apartado para él: no me gusta por como se comporta pero a la vez me da algo de lástima porque sus sentimientos son reales e intenta hacerlo lo mejor que puede pero no es suficiente y se acaba comportando como un obseso, una bestia con un juguete que no quiere que nadie mire ni toque, un juguete que parece no considerar más que eso, un mero objeto. No me gusta nada el modo en que trata a Feyre y, aunque a veces me de un poco de cosica que lo pase mal, no tiene excusa suficiente para hacer lo que hace y se merece que lo abandonara. Lo siento Tamlin, nunca fuiste mi favorito y te has comportado de una manera muy egoísta. Has acabado siendo el malo de la historia y me regodeé cada vez que te Feyre te rechazaba.

En este libro también conocemos a otros personajes como Mor, Amren, Cassian y Arziel. Estos 4 fantásticos son geniales y me han encantado cada uno de ellos. Mor es una guerrera bastante fiera pero con una personalidad muy genial. Su pasado es duro pero es de esos personajes a los que adorar y apoyar. Amren es un ser diferente y bastante curioso. No está nada mal, tiene sus cosillas graciosas y temidas pero sin duda el que sea un ser distinto es lo que le da más juego. Cassian me ha encantado por el ship que le tengo echado. Tengo un ship de este con Nesta -otra superguerrera humana- muy fuerte y tengo ganas de que saquen un libro suyo. Y Arziel me tiene curiosa y expectante por ver algo suyo. Eso de las sombras me resulta extraño y me siento tan curiosa como Feyre con su relación con Mor. Espero que sean canon y también tengan su propia historia porque cada vez que veo alguna mirada o algo estoy expectante de enterarme de algo.

Algo que me temía es que se construyera un romance entre Feyre y Rhysand y es que para mi este par no está hecho para estar juntos. Pueden flirtear de broma, pueden tirarse trastos a la cabeza y exponer su verdadero yo pero para mi esta parejita queda perfecta como amistad y apoyo y me niego a cualquier intento de romance entre ellos. Rhysand se merece algo mejor que Feyre y Feyre... le pega el vivir independientemente. Por esto, en los momentos en los que más de uno estaría fangirleando a tope, yo estaba como "No, no y no. No hagas eso, joder, ¿por qué tienes que hacerlo? *resoplido*". Sí, me ha molestado que la autora quiera pegarlos aunque realmente no está mal construido y no puedo ponerlo como fallo porque es más un sentimiento mío de que yo no quería a estos dos juntos y sigo sin quererlo y bufo cada vez que cruzan el límite.




Eso sí, me ha encantado la forma de darle la vuelta a la tortilla respecto del primer libro. Para mi ha sido todo un plot twist que la historia cambie tan radicalmente. Me encantaría decir muchas cosas pero spoilers y >.< así que simplemente diré: me ha sorprendido muchísimo ver que lo que se contaba en el primer libro no era la historia definitiva sino que no es más que una experiencia cuya importancia es relativa. En este libro se encamina hacia su verdadera... ¿cómo digo la palabra sin spoilers? En fin, que hay un cambio muy grande y que me ha encantado que la vida de Feyre haya dado un giro de 180º para acabar descubriendo cual es realmente su destino. He adorado el plot twist por completo porque la idea me parece fuerte a pesar de mi reticencia a que cierto ser.... Mira, paso SPOILERS que me encanta que la verdadera pareja no sea Tamlin sino Rhysand. Yo no quería que Rhys se uniera a esta pero me encanta que en el primer libro se centre tanto en Tamlin para al final ver que esa no es la realidad, que un cuento feliz se puede acabar para dejar paso a otro. Aplaudo a la autora por este cambio, por no hacer un triángulo amoroso sino cambiar de uno a otro con mucho arte y sentido y sobretodo la aplaudo por no haber dejado a Tamlin como pareja definitiva después de todo lo malo que hace. Bravo porque se ha salido por una tangente y me ha dado una historia distinta de lo que creía, por demostrar que lo que parecía definitivo no lo era. ¡Por fin Tamlin es el lado malo del amorío! ¡Viva! FIN SPOILERS Siento mucho tener que haber mencionado lo que más me ha encantado como spoilers pero juro que no encuentro otra manera de ponerlo... ¡Vivan los cambios!

Ahora vamos a algo malo, algo que me resultó... no molesto pero sí extremadamente conocido fue lo del lazo. No voy a meterme mucho en detalle porque quiero evitar los spoilers a toda costa pero digamos que ese lazo es exactamente igual al de los cambiantes de la saga de Nalini Singh. El lazo es igual, se comportan de igual manera y todo muy calcadito... Algo que para muchos puede haber sido como una gran ilusión para mi ha sido como "Madre mía, menuda copia". de hecho hasta los altos lores son como los cambiantes: arrogantes, machos, dominantes... Me apuesto lo que sea a que la autora se ha leído la saga de los psi/cambiantes y la de los ángeles (no recuerdo el nombre) por el detallito de las alas y el roce y tal y tal. Digamos que no ha tenido mucho efecto en mi porque cuando se pone a explicarlo todo yo no hacía más que acordarme de los cambiantes y era como "esta historia ya me la han contado". Un pequeño fracaso por esta parte, demasiado similar a lo que yo ya conocía.

Ahora bien, ¿qué es lo mejor?
Personajes nuevos que molan un montón.
Una corte diferente, más oscuridad y dinamismo.
Más Rhysand ¡OLÉ! *inserte flamenca del whatsapp*
Menos Tamlin ¡doble olé!
Menos romance extraño y cursi: ¡empezamos la ola por la izquierda! A la de una, a la de dos y a la de...
Evolución de Feyre hacia un ser más independiente que busca su propia felicidad.
Nesta, guerrera que lucha con uñas y dientes.
Ilyrios y costumbres, ¡lucha por libertad!¡lucha por la igualdad!
El final del primer libro no es la historia final de vivieron felices y comieron perdices. La historia caaaaambia mucho. PLOT TWIST de saga.
La ambientación sigue siendo increíble, el momento de la Tejedora es de 10, love it!
Lo que me he reído pensando en como le sentaría todo a Tamlin.
¿Y lo peor?
Yo no quería romance con Rhysand y eso me lleva a enfurruñarme en los momentos en los que el resto de la gente fangirlea a tope.
RHYSAND SUFRE T_____T Esto realmente no es malo, feels y tal pero es malo porque Rhys sufre y nop...
El inicio me aburrió. Me cuestan los inicios de esta mujer.
Aunque sea menos, sigue pecando de un cursi que.... Mi suelo tiene manchas arcoíris.
He notado menos macabridad en este libro que en el primero, o lo mismo es que estaba curada de la sorpresa pero me ha parecido más light. También la ambientación me ha sorprendido algo menos.
Tengo que esperar para el último libro...
Poco más me queda por decir. Una corte de niebla y furia es una estupenda segunda parte donde se realiza un giro de 180º dejándonos con un final de esos que no puedes soportar la espera del siguiente. Ay qué ganas de ver a Nesta dando guerra y ver como mis ships van cobrando forma. Sí, leo por los ships, que la autora me los vende muy bien.



Artículo original: http://librosdelcielo.blogspot.com/2017/06/una-corte-de-niebla-y-furia-de-sarah-j.html
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MerMM
 24 February 2023
Una maravillosa y apasionante sorpresa, así definiría este libro, después de acabar Una corte de rosas y espinas hice un parón, no tenía prisa por continuar la saga, había sido un buen libro, lo disfruté y se acabó y me quedé tranquila, pero el caso es que ya tenía el segundo comprado y alguna de vosotras me dijo algo así como “Ya verás con el siguiente, ese “lo peor” que has puesto cobra sentido”
En lo peor del libro anterior había escrito “No acabo de entender muy bien porque Ferye se enamora de Tamlin”, así que era cuestión de tiempo que me pusiera a leer Niebla y Furia.
Y lo único que voy a decir es que hacía tiempo que un libro no me atrapaba como lo ha hecho este, hasta el punto de tener que parar de leer para serenarme, y atemperar mis nervios, recordar que estaba leyendo un libro, una historia, pura imaginación. Es una sensación maravillosa, porque a mi edad no estaba segura que eso me pudiera seguir ocurriendo, he leído algunos libros, he conocido a muchos personajes, reales y no tanto y pensaba que a estas alturas había perdido esa capacidad de desaparecer del mundo, no la de sumergirme en una lectura y olvidarme del mundo, esa no la he perdido nunca, digo la de desaparecer, perder la noción del yo, no ser nadie y leer sin preguntas, sin juicios, sin ser. Lo dicho una gozada.
No me aparece mucho analizar las razones por las que he llegado a esta situación, ¿los personajes? Hay un millón de reseñas, no hay ninguna (y si la hay no la he leído yo) que les ponga pegas. ¿La trama? Desde luego hay épica, pero tengo mis dudas de si llega a brillante… o tal vez si, sobretodo la escena final ¿la interacción de entre Rys y Ferye? Es una danza constante ¿novedosa? hasta cierto punto, no hay muchos lugares comunes, eso es cierto, pero aun así no deja de ser la misma danza.
Lo recomiendo, absolutamente.
A QUIEN: Cualquiera que haya leído el primero y le haya parecido más o menos correcto.
LO MEJOR: La última escena…
LO PEOR: Ni idea… no me apetece buscarle peros.
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laberintosdetinta
 08 February 2018
Bueno, hace un mes, comenzando el año, publiqué la entrada de peores lecturas del 2017 en la que incluía los dos primeros libros de esta saga y aclaraba que, aunque no me han parecido lo más desastroso que he leído en mi vida, ambos me han decepcionado muchísimo, ya que esperaba algo más por las reseñas que había leído, pero no todos podemos opinar igual.
Finalicé la reseña de la primera parte diciendo que ponía todas mis esperanzas en este, ACOMAF, ya que había escuchado que la historia daba un vuelco increíble, y es cierto. de hecho, este en cuanto a trama y ritmo narrativo me ha gustado más, simplemente por el hecho de que engancha mucho; más que ACOTAR, cuya trama me parece de lo más simple. El problema es que, incluso con esto, creo que quizá, valorándolo en su conjunto (narrativa, personajes, recursos…) casi me parece peor.
En primer lugar, tenemos la narrativa, plana y sosa hasta aburrir. A ver, ya sé que Sarah J. Mass no va a ser Cervantes, porque ni siquiera es su pretensión, ella hace libros entretenidos y ya y eso es maravilloso, pero por favor, hay muchísimos libros cuya única pretensión son el entretenimiento que ponen un poco de mimo en la narrativa, en saber escribir, en utilizar técnicas diversas… Y encima el único recurso narrativo que se digna a utilizar es el Deus ex machina (conté cinco hasta que me aburrí de llevar la cuenta…). Nada me repele más que las soluciones baratas de folletín propiciadas por los maravillosos “ex machina”, los Macguffing sin sentido y los plot devices mal llevados. En fin, narrativa más plana que el encefalograma de Trump: si no he leído cien veces las expresiones “hizo una mueca”, “hizo un gesto vulgal”, “le di un golpe”, “le lancé una mirada maliciosa”... de verdad, Sarah, que los seres humanos hacen más gestos, te lo juro.
Por otro lado, las descripciones de las escenas eróticas con descripciones absurdas me dan ganas de tirarme por la ventana. Unas posturas anatómicamente imposibles, he de decir. Escribe mil veces mejor las escenas de tensión sexual (de hecho me parecen de las escenas más conseguidas que tiene el libro) que las de sexo en sí.
En cuanto a los personajes, en ACOMAF tenemos una ampliación de estos, cobrando protagonismo Rhysand, que ya se dejaba ver al final de ACOTAR. Realmente creo que Rhysand, junto con Lucien, es de los pocos personajes que me han gustado y, aunque todo el mundo habla de la gran transformación de Rhys, a mí me parecería más interesante si el personaje hubiera mantenido algo de su oscuridad (tiene una excusa para cualquier cosa mala que ha hecho desde el mismo momento en el que fue engendrado), parece como si a Sarah le diera miedo hacer personajes ambivalentes por si les cogemos manía o algo, cuando un personaje es más interesante cuantos más matices tiene.
Los demás personajes, Mor, Amren, Azriel, Cassian..., me dan un poco de vergüencita de lo mal desarrollados que están. La autora les da una característica básica y solo sabe girar alrededor de esta en lugar de seguir indagando en su psicología y desarrollando su carácter. Además, parece que solo saben relacionarse entre ellos con pullas y sarcasmos; son como unos adolescentes hormonados eternos. Que ya sé que el público objetivo de esta saga son los adolescentes, pero por dios, que se supone que son Faes, criaturas sobrenaturales tremendamente antiguas, y se comportan como críos.
Narrativamente, también veo muchísimo relleno y desviaciones de la trama con plot devices (el anillo de Rhysand, los libros... por ejemplo) sin ningún uso real y da la impresión de que la autora no sabe cómo añadir información relevante en su trama sin meter un objetito de marras que lo justifique todo, aunque luego no se use para nada.
Por otro lado, volviendo a que es un libro cuya pretensión última es entretener, y me parece estupendo, se me hizo tremendamente pesado y repetitivo que sus reflexiones más profundas y los monólogos internos giren casi siempre sobre lo bueno que está tal o cual personaje, sobre todo Rhys. O sea, me cansa a niveles estratosféricos, tanto que me costó avanzar en cierto punto de la novela. Que, por cierto, otra cosa que me parece aburridísima es que todos los personajes sean jodidamente perfectos físicamente y que la autora a través de su voz y la de los personajes, no pare de describirlo y de recordárnoslo. Esto me molesta a un nivel general, ya que en la literatura Young Adult casi todos los personajes tienden a ser adonis esculpidos en marmol griego y es poco coherente e irritante. Son Fae, ya has establecido que una de sus características definitorias como raza es la belleza sobrehumana, no hace falta que llenes tres de cada cinco páginas describiendo los músculos o las curvas de alguien, eso se llama fanservice.
Hablemos de las descripciones, mira, voy a romper una lanza en su favor, porque su saga Throne of Glass (Trono de cristal) la estoy leyendo en inglés y me parece que la traducción al Español hace poco en su favor. En este caso no sé si es fallo de la escritora o de la traductora pero, si no tienen que ver con la traducción, hay expresiones que no sé cómo no han sido eliminadas por el editor que haya corregido este texto: “músculos completos”: sí, los músculos suelen estarlo. “Mis senos se llenaron” para decir que está excitada o, por ejemplo, escenas que deberían haber sido corregidas como una en la que en la primera decripción Feyre se levanta y deja el plato en el fregadero y en el siguiente párrafo está al otro lado de la habitación y con el plato en la mano, son detalles nimios, lo sé, pero da sensación de una edición sucia y descuidada, lo cual no es fallo de la autora, sino del editor y corrector, incluso de la traductora, en este caso.
En fin, no todo ha sido tan malo. Como he dicho anteriormente, al menos el ritmo narrativo de esta segunda parte me ha parecido convincente, tenían ganas de seguir leyendo, pero me frustraba bastante el relleno que hay por doquier y eso me frenaba un poco. También amplía su Wolrdbuilding y podemos conocer otras cortes, cuyos planteamientos sí que me han parecido interesantísimos y coherentes, esto fue algo que eché en falta en su primera parte.
Otro tema es el feminismo de la obra. He visto muchas reseñas alabando este apartado en concreto de la obra y para mí ha sido un sí-pero-no. Hay detalles que me han encantado, por ejemplo, cómo se muestra que ella está anulada por un hombre sobreprotector y sus esfuerzos por salir de esa relación tóxica y de dependencia (que muchos lectores adoren a Tamlin como pareja solo evidencia lo asimilados que están los comportamientos machistas y tóxicos en nuestra sociedad), o el estado psicológico de Feyre después de salir de Bajo la Montaña, cuyas descripciones son muy buenas. Mi problema es que para ello tiene que conocer a otro tío, en lugar de empoderarse ella misma. No me malinterpretéis, está fantástico que haya alguien a tu lado que te ayude a sobrellevar ciertas cargas y te apoye mientras tú te autodescubres, pero es que literalmente él le dice lo que tiene que hacer, como si ella no fuera capaz: no hay un proceso de introspección, solo el nuevo interés romántico presionándola. Eso sí, se incluyen literalmente frases como “cuando una mujer dice 'no' es no” o “Yo no era una mascota, una muñeca, un animal. Era una sobreviviente y era fuerte. No volvería a ser débil ni indefensa. No quería, no podía permitir que me quebraran. Que me domesticaran"; que mandan mensajes muy poderosos, sobre todo a las chicas jóvenes que estén leyendo esta novela. Pero (de nuevo hay peros) luego la fastidia con frases como “Ya pareces una mujer de nuevo” solo porque se ha puesto un vestido con el cual “mostraba zonas que suponía que le gustaba mostrar a cualquier hembra” o expresiones “la rabia primaria de macho” y como estos ejemplos un montón de estereotipos de género más que parecen sutiles y casi se pasan de largo, pero ahí están. Por eso digo que es un sí-pero-no, porque veo que hay falta de coherencia en el desarrollo del feminismo en la obra. Además, Feyre se relaciona bastante poco con otros personajes femeninos, aunque hay más inclusión en esta segunda parte, eso sí. Aunque superaríaa el test de Bechdel, muchas de las conversaciones con sus hermanas son sobre hombres y la gran parte de conversaciones explícitas con Mor son sobre hombres o preguntas cotillas de Feyre sobre la vida sexual de esta. No veo mucho desarrollo de la amistad, aunque la autora no dude en describirlo como tal con celeridad. Eso sí, me posiciono totalmente a favor de que, aun con estos fallos de coherencia, el feminismo se encuentre presente en el libro, sin duda preferible a la basura machista y tóxica que hay en la mayoría de novelas en general y en las novelas cuyo público objetivo son los adolescentes en particular, lo cual me preocupa mucho más, ya que están en un periodo de socialización y de asimilación de los roles que ven en los demás y en los agentes educativos y culturales.
En fin, para ir terminando, esta es mi opinión sobre ACOMAF. Os diría que si teníais intención de leerlo no dudéis en hacerlo, ya que es muy probable que forméis parte de esa gran comunidad que lo está disfrutando mucho y eso es lo importante. Para mí ha sido entretenido, con muchos ships y tensión erótico-festiva, pero nada más. Si no le hubiera encontrado, en mi opinión, tantos fallos de caracterización y narración le hubiera puesto algo más de nota.
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Alpispa
 13 November 2022
Antes de leer este libro, no paraba de ver opiniones que decían que era incluso mejor que el anterior, hablando de él como si de una joya se tratase. Yo tenía miedo de leerlo justamente por eso, no quería llevarme un chasco. Cuando me aventuré con el libro, los primeros capítulos no me engancharon demasiado y no me gustaba mucho lo que estaba ocurriendo, así que me dije: bah, la gente ha exagerado, el libro va a estar bien pero no tanto como el primero. ¡JA! Ilusa de mí. Ahora que lo he leído completo puedo gritar a los cuatro vientos que este libro es ÉPICO. Qué bonito es ver cuando un libro cumple, no, supera tus expectativas. Te sientes como en una nube.
Sinceramente, al principio me enfadé un poco con la autora, puesto que no esperara que diera ese giro a los acontecimientos. Una corte de rosas y espinas nos brindó un final bastante cerrado, pero con algún hilo suelto del que poder tirar (un determinado trato...). Los personajes se han visto resentidos por los sucesos que tuvieron lugar, llegando a sufrir unos cambios que dejan huella. Bien, si leéis mi reseña del libro anterior, no os extrañará que me enfadara lo que la autora ha hecho con Tamlin. Yo lo quería, demonios. Y ahora empiezo el libro y me encuentro con una persona egoísta, dura, manipuladora, mentirosa, soberbia y tirana (y muchos más adjetivos desagradables que no voy a decir). Su manera de intentar dominar a Feyre, controlarla y quedársela solo para él, como solo la tenía en cuenta para lo que le interesaba, como ni se preocupaba por su bienestar y queriéndola solo como "mujer florero". Todo eso me hizo empezar a detestarlo, rompiéndose mi corazón cada vez más. Además, al recordar algunas cosas que pasan en el libro anterior, me di cuenta de que Tamlin lleva actuando mal desde hace tiempo, aunque yo no me diera cuenta. Supongo que eso mismo le pasó a Feyre. En fin, ambas hemos aprendido que no es oro todo lo que reluce.
En relación con esta parte de la historia, puedo decir, alto y claro, que esta es una novela feminista. Sarah J. Maas debe estar orgullosa de lo que ha logrado, porque transmite a la perfección cómo se siente Feyre y cómo debe valorarse. No es una mascota de nadie, no está hecha para ser dominada por nadie y ella es increíble en sí misma, pudiendo conseguir todo lo que propone. Como la moral de ella va menguando y necesita ayuda para salir de ese pozo en el que se ha metido, o más bien, la han metido. Se plasma muy bien el maltrato doméstico, no de violencia física, sino psicológica, además del encierro al que está sometida. Es un tema muy serio, dado que muchas mujeres viven esa situación en el mundo real y no saben cómo salir de ella. Bravo, Sarah J. Maas, por hacer una crítica a este mal que atañe a la sociedad actual en un libro de fantasía. Siempre hay que aprovechar la oportunidad de transmitir valores y ella lo hace de una manera sublime.
Este libro es otro retelling, esta vez de la historia de Hades y Perséfone. Solo con deciros esto, ya os podéis imaginar que Rhysand va a tener mucho más protagonismo, debido al trato que hizo con Feyre en el libro anterior. Rhysand, el cual me intrigaba pero del que no sabía si pensar que era un imbécil manipulador o había un corazón debajo de toda esa oscuridad. Rhysand, al que yo miraba con desconfianza al principio, pero que me fue conquistando con cada palabra y cada gesto. Su forma de tratar a Feyre, de enseñarle a desarrollar su máximo potencial, de sujetarle el pelo mientras vomitaba debido a las pesadillas que la acosaban por las noches. Rhysand es un personaje impresionante, con tantos matices que asusta. Por fin nos metemos en su piel, conocemos su historia al completo y sabremos qué hay de verdad en lo que nos contaron y lo que suponíamos de él. El alto lord de la Corte de la Noche nos enseñará que a veces, la oscuridad puede brindarnos la luz que necesitamos.
Además, se nos suman otros personajes secundarios muy bien construidos. Me refiero, exactamente, al círculo íntimo de Rhys, formado por cuatro componentes de lo más especiales. Amren, que me ha parecido la ama, tiene un carácter irónico con un deje cruel, goza de un poder asombroso y me intriga saber qué es ella en realidad. Me quito el sombrero ante ella, porque es la bomba. Mor, que siempre trae una sonrisa en la cara y palabras de ánimo, a pesar de todo lo que ha tenido que sufrir. Me la imagino grácil, feliz, amable pero perspicaz. Cassian, un ilyrio letal, muy buen luchador y con la lengua algo suelta, ya que a veces no tiene filtro. Despreocupado, espontáneo y seductor, pero en batalla es un oponente muy habilidoso. Para terminar, contamos con Azriel, el cantor de sombras, un ilyrio callado, sombrío e implacable, pero que alberga más sentimientos de los que muestra.
Todavía no os he hablado de Feyre, nuestra protegonista, cuya evolución en este libro es impresionante. al principio nos encontramos con una Feyre débil, que no duerme bien, que quiere sentirse útil y salir, pero no se lo permiten. Que no tiene con quién hablar, porque nadie le cuenta nada ni tampoco se preocupa por escucharla. Vemos a una Feyre que no quiere luchar más, que se preocupa por si su vida va a ser así de infeliz o si algo cambiará. Pero gracias al empujoncito que le da un determinado personaje, ella empieza a vivir, a sentir. A aprender de las cosas que fueron su debilidad en el pasado, a arriesgarse por los demás, a tratar con otras personas y a perdonarse a sí misma por lo que hizo. Se vuelve una guerrera, una luchadora que no se rinde ante nada ni ante nadie. Estoy orgullosa de ella y de su poderío, de su valentía, de su "no, yo valgo más que esto". Cada vez le cojo más cariño y sé que aún le queda por dar, cosa me mantiene expectante.
Otra cosa que me ha fascinado ha sido la ambientación. Me he paseado por las calles de Velaris, ciudad de la que me he enamorado por completo, admirando las estrellas, pero también el arcoiris o el barrio de los artistas. He disfrutado de cada rincón de la Corte de la Noche, de sus vestimentas finas, sensuales y cómodas y de los olores que llenan cada lugar.
Si os digo la verdad, no tengo ni idea de como plasmar en esta entrada todo lo que me ha hecho sentir el libro. Solo os diré que lo terminé hace días y todavía no puedo dejar de pensar en él. Me ha calado hondo, por todas esas emociones que me ha hecho sentir: miedo, rabia, amor, desazón, tristeza, sorpresa... En especial, he disfrutado de los famoso capítulos 54 y 55, así como de la noche de la Caída de las Estrellas. Sentía que el corazón se me iba a salir del pecho, este libro es una delicia, no lo dejéis escapar. Además, es muy completo, ya que no solo hay amor en él, sino estrategias, sangre, lujuria, sorpresas, celos... Sarah J. Maas consigue darle la vuelta a la tortilla y romper todos nuestros esquemas, cuando pensamos que ya conocemos a los personajes, nos sorprende con una vuelta de tuerca; cuando creemos que sabemos lo que va a ocurrir, introduce un giro de trama brutal. Este libro se corona como uno de mis favoritos, e incluso como mi mejor lectura del año, hasta ahora.
No puedo irme sin hablar del final. Un desenlace que me dejó de piedra. Apenas pude asimilar lo que ocurría, me quedé con la boca abierta. La autora termina el libro con la cabeza bien alta y dejándonos con la miel en los labios, puesto que los últimos capítulos son un torbellino de emociones que casi acaban conmigo.

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Celeste_Lightwood
 15 January 2020

Tras su enfrentamiento con Amarantha y sus padecimientos encerrada en Bajo la Montaña, el corazón y el espíritu de Feyre han quedado destrozados. Ni siquiera la pedida de matrimonio de Tamlin, el amor incondicional que este le profesa y la preparación de la boda consiguen cambiarle el humor. de noche, las pesadillas le acechan y las atrocidades que tuvo que cometer para salvar a los fae de las garras de la reina la atormentan y no la dejan dormir. Por si fuera poco, el tatuaje negro con una pupila en la palma es un recuerdo constante del sórdido trato que tuvo que hacer con Rhysand, el cual la recoge una vez en la Corte Primavera para que pase una semana en su territorio, la Corte de la Noche.

Con esta segunda parte de Una corte de rosas y espinas he tenido diversos encontronazos. Mientras en la primera novela Feyre me encantó, en esta al principio su personalidad me satura. Su alma ha quedado rota después de lo ocurrido en el final del libro anterior y esa losa es una pesada carga que tiene que soportar prácticamente sola. Y aunque entiendo su dolor y su forma de sentir, me ha resultado demasiado pesada remarcando una y otra vez en cada página lo vulnerable y destrozada que está. Utiliza este argumento constantemente para justificarse, tanto a ella como a su comportamiento, así como para justificar la actitud de Tamlin. Me ha recordado un poco a la forma de escribir de las autoras Iria y Selene respecto a sus personajes femeninos, porque todos ellos también tienen que lidiar con alguna batalla personal y es algo en lo que siempre están incidiendo. Feyre se me ha hecho agotador recalcando su condición constantemente. He comprendido sus sentimientos pero considero que la autora ha insistido con demasiado ahínco la vulnerabilidad de la chica, hasta el punto de hacerse insoportable en algunos capítulos. Sigue siendo la Feyre peleona y cabezota del primer libro pero es evidente durante la primera mitad de la novela que ha perdido parte de su luz y de su fuerza, algo que se nota sin necesidad de repetirlo a cada rato. Por suerte, logra salir del pozo en el que se haya zambullida y esa energía regresará. Ha sufrido, sí, pero ese sufrimiento también le ayuda a cambiar y a convertirse en una Feyre distinta, pero no peor por ello. Simplemente es una evolución natural de los acontecimientos y esto sí es algo que he apreciado. Asimismo, Feyre también aprende a anteponer su bienestar al de otros, especialmente al de Tamlin, y comprender que, en ocasiones, lo que es bueno para los demás no lo es para ella misma. Por eso, admiro el coraje que tiene al darse cuenta de que, por muy enamorada que esté, su relación con el alto fae es tóxica y por ello debe alejarse y plantarle cara a la situación.



Otra cosa que no he soportado ha sido el cambio de Tamlin. al igual que Feyre, los sucesos en la corte de Amarantha le transformaron. Ahora ha recuperado sus poderes, vuelve a ser un Alto Fae en el amplio y completo sentido del concepto. Sin embargo, el sufrimiento que le causó la muerte y posterior resurrección de Feyre gracias al poder de los siete Altos Lores le ha convertido en un obseso de su seguridad y su bienestar. Su actitud me ha recordado un poco a Christian Grey, lo cual es malo. Muy malo. Coarta su libertad (incluso llega a encerrarla en la mansión de la Corte Primavera), apenas la deja hacer nada por su cuenta y tiene terminantemente prohibido salir de la casa sin supervisión y salir de los terrenos inmediatos a la misma. Tamlin también tiene que lidiar con sus propios demonios y pesadillas y Feyre le disculpa por ello; no obstante, esta opresión irá minando su paciencia, como ya he mencionado arriba. Todo lo que me gustaba de él durante el primer libro, en este se derrumba como un castillo de naipes. Por otro lado, la actitud complaciente de Lucien me ha puesto de los nervios. A pesar de que es un personaje que me gustó mucho en su momento por su manera de ser, el honor servicial hacia su señor es superior a la salud física y mental de Feyre. A pesar de que esta acude a él en busca de ayuda y de que Lucien lo intenta (eso no podemos negárselo), en ningún momento está realmente dispuesto a enfrentarse de verdad a Tamlin y hacerle ver que su actitud es un completo error y que la está perdiendo.

A diferencia de los dos protagonistas que, a mi modo de ver, han empeorado bastante en Una corte de niebla y furia, el que sí me ha encantado a más no poder ha sido Rhysand (el motivo principal por el que he seguido leyendo). Su arrogancia y prepotencia empezaron a conquistarme en el anterior, ya que tenía un puntito difícil de obviar, pero ha sido aquí donde me ha fascinado. Gracias al acuerdo al que llegó con Feyre y a esa semana al mes que pasa "secuestrada" en su hogar, descubrimos mucho más acerca de él. Como era de esperar, bajo esa apariencia fría y distante guarda un corazón. Es pícaro, divertido, travieso y le encanta "putear" a Feyre desde el cariño. Además, mientras Tamlin está demasiado ocupado gobernando de nuevo sobre sus tierras devastadas y recién recuperadas como para atender la soledad y el desasosiego de Feyre. Rhysand la comprende debido al vínculo que comparte, el cual le permite adentrarse en su mente y sentir lo que ella siente. Se convertirá en un apoyo inesperado y en un amigo aún más sorprendente y será el único que parezca entenderla, a pesar del rechazo inicial de esta hacia él. Tamlin y Rhysand son enemigos feroces y el primero intentará romper, sin éxito, el trato. Ya que las lealtades de Feyre están con su amado y la relación entre ella y Rhysand no empezó con buen pie, los tiras y aflojas se mantendrán, sin importar los intentos de Rhysand por ayudarla (por ejemplo, la enseña a leer o a levantar muros mentales para evitar que un enemigo pueda espiar su mente). Sin embargo, Feyre rectificará y descubrirá que el lord de la Corte Noche tiene más facetas y es más complejo de lo que su máscara de frialdad e indiferencia trasluce. Conocemos mucho más acerca de Rhys, su modo de vida, sus verdaderas intenciones. E, incluso, la autora nos presentará a su círculo de amigos más íntimos. Por que sí, aunque no lo parezca, Rhys tiene amigos.

Mor, Cassian, Azriel y Amren son un grupo variopinto con cualidades únicas y a los que terminas cogiendo cariño irremediablemente. Feyre les conocerá y poco a poco forjará con ellos un lazo amistoso difícil de romper. Quiero destacar especialmente a Mor por su fortaleza, su carácter altivo y fuerte y la manera en que expresa que es una mujer libre y que hace lo que le da la gana. Todos ellos tienen su historia personal de sufrimiento y dolor y son personajes realmente complejos que merece la pena conocer. Son fantásticos y se les coge cariño rápidamente. Gracias a ellos también comprenderemos por qué Rhysand es como es.


También tenemos algunas pinceladas de Nesta y Elain, las hermanas de Feyre, y por fin sabemos algo de ellas, una vía que espero que siga explotando en el tercer libro.


En cuanto a la trama, para mí ha sido lo más negativo de Una corte de niebla y furia. Mientras que el anterior me enganchó por ser intrépido, cargado de acción, de giros de trama y con un argumento que te enganchaba de principio a fin, con esta segunda parte me he aburrido. La trama es más compleja, sí, y más interesante; el problema principal que he tenido es que me ha dado la sensación de que había muchas escenas de relleno. Entiendo que Maas pretendía que fueran parte importante para conocer el nuevo mundo en el que se inserta Feyre, la Corte Noche y todo lo que esto conlleva, sin embargo a veces sentía que no avanzaba, que se añadían escenas y misiones que realmente no tenían sentido y que si las suprimías no afectaban para nada al hilo principal ni a los sentimientos de los personajes.

Sin duda, lo mejor ha sido el final. La autora se marca un giro de trama espectacular que deja al lector pasmado y sin entender qué está pasando y cómo los acontecimientos han desembocado en eso. Las últimas páginas son frenéticas, con un cambio completamente inesperado que ni siquiera te esperas. Es magnífico cómo introduce ese giro repentino porque además te deja una sensación agridulce y unas ganas tremendas de empezar de inmediato Una corte de de alas y ruina. Gran jugada, Maas.
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paulavelc8paulavelc826 October 2020
—¿Tengo que negar que te encuentro atractiva? —dijo él despacio... mientras algo le brillaba en los ojos.
—Nunca me lo has dicho.
—Te lo he dicho muchas veces, todo el tiempo, te he dicho siempre que para mí eres muy atractiva.
Me encogí de hombros pero pensé en todas esas veces..., y en que yo siempre lo había considerado solamente un cumplido.
—Bueno, tal vez deberías hacerlo mejor.
El brillo de sus ojos se convirtió en el de un depredador. Un estremecimiento me corrió por el cuerpo mientras él apoyaba los dos brazos poderosos sobre la mesa y ronroneaba:
—¿Me estás desafiando, Feyre?
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alaoestebooksalaoestebooks29 November 2020
Me pregunto si había una parte de mí que sabía lo que me esperaba. Que sabía que nunca sería una afable campesina, sino una mujer que ardería como el fuego, y que sería tranquila y lo toleraría todo. Que tendría belleza para los que supieran dónde mirar, y que si nadie se molestaba en mirar, si todos tenían miedo, no me importaría mucho de todos modos. Me pregunto si, a pesar de mi desesperación, de mi desesperanza, estuve realmente sola alguna vez. Me pregunto si no estaba buscando este lugar... buscándoos a vosotros, a todos.
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TinuwelTinuwel17 December 2017
—Él cree que lo van a recordar como el villano de la historia.
Ella resopló.
—Pero me olvidé de decirle —continué despacio mientras abría la puerta— que el villano suele ser el que encierra a la doncella y tira la llave al río.
—¿Y?
Yo me encogí de hombros.
—Y él fue el que me liberó.
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Leo_PardaLeo_Parda31 May 2023
Cuando pasas tanto tiempo atrapada en la oscuridad, descubres que la oscuridad empieza a devolverte la mirada.
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iztamundosdelibrosiztamundosdelibros17 February 2021
“Por las estrellas que escuchan.... y los sueños que se hacen realidad”
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Una corte de rosas y espinas

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