Arrastrando todos los problemas que han ido surgiendo en libros anteriores y con una evolución de personajes brutal, este quinto libro nos ofrece todavía más oscuridad y caos en Perdido Beach. En todas las reseñas sobre estos libros lo he dicho pero es que me asombra cómo teniendo tantos personajes el lector encaje perfectamente a todos y los conozca, ya aparezcan mucho o poco. Y es que, a pesar de tener a Sam, Astrid, Lana, Quinn, Caine… como protagonistas, todos tienen un papel vital en la historia. Ésta vez la cúpula se está oscureciendo, y pronto se van a sumir en la completa oscuridad. Además, se juntan todos los problemas que fueron surgiendo: Caine es el rey (aunque Albert tiene mucho poder), Sam sigue con dudas pero ayuda todo lo que puede pero descubrirá algo importante, Astrid necesita poner en orden su cabeza, Edilio luchará por mantener el orden, Quinn sigue con su rol de pescador pero tendrá que echarle más valor… en resumen, todos siguen madurando y evolucionando. Es un libro que desde el principio contiene acción y una montaña rusa de impresiones para el lector. Aqui todos sobreviven de la mejor forma que pueden y usan su poder, la diferencia es su motivación para hacerlo. Por otro lado, el autor mete una nueva perspectiva: la de los adultos del exterior, centrándose especialmente en la madre de Sam. Veremos como los militares están intentando descubrir qué es lo que sucede en esa cúpula y cómo bajarla. Además de todo el secretismo que lo rodea. + Leer más |