SHJOL

Novela negra que he disfrutado mucho donde destaco una trama muy original y al mismo tiempo muy oscura y fuerte, cosa que me encanta de este género. El ritmo de la novela es muy intenso, y al ser relativamente corta, en todo momento tenemos acción, hay pocas florituras por decirlo de alguna manera.

El desarrollo psicológico de los protagonistas es muy bueno, empatizando con los sentimientos de cada uno de ellos, cosa que es vital para disfrutar de este libro. Y como único pero, algún error narrativo como por ejemplo pasar de 1ª a 3ª persona en algún momento, pero que me consta que ha sido corregido ya en la nueva edición, así que maravilloso.

En conclusión, si sois amantes del género y os gusta conocer historias diferentes, os recomiendo mucho este libro ya que otra cosa no, pero sorprender y mantener un ritmo alto, lo tiene más que conseguido.

Frases destacadas.

“Esa es la magia de Dios. Aferrarte a lo imposible, ya que lo real te da demasiado miedo”

“Hasta la persona más buena puede matar a alguien si aprietas el resorte adecuado”

Lo primero que me llamó la atención de este libro fue su título, ¿no os parece curioso?.

Todo comienza con el robo del cuerpo de Laura una chica recién fallecida. Tras dos años, la investigación no ha avanzado pero se reactiva de nuevo al reaparecer el cadáver en el mismo sitio de donde se sacó. Poco después se produce la desaparición de otra chica de características similares. ¿Casualidad o no?.

Reconozco que he disfrutado mucho con la trama ya que tiene un personaje principal bastante atípico del que no os puedo contar mucho para no hacer spoiler. Digamos que a pesar de ser el malo y hacer cosas sin duda atroces y que te revuelven en ocasiones el estómago, consigues empatizar con él, lo que ha vivido y lo que está viviendo. Esa dicotomía amor-odio me ha encantado como lectora. Además, me ha parecido muy valiente para una autora novel atreverse a contar una historia tan poco políticamente correcta.

Aparte de esto, se tratan algunos temas relacionados con la psicología que nunca había visto plasmados en un libro y se nota el cariño que ha puesto la autora en documentarse bien y dar las explicaciones necesarias en el libro sin que resulte abrumador.

El libro está narrado a varias voces, aunque predominan la del Sargento Harris y nuestro atormentado antagonista. Los capítulos tienen una extensión perfecta y mantienen la tensión y el interés en todo momento, la prosa es fluida sin florituras que te saquen de la lectura, cosa que se agradece bastante en este tipo de novelas.

Igual que el personaje principal me ha encantado a pesar de su oscuridad, el segundo personaje principal Toma Harris, el policía que se encargará de investigar lo que está ocurriendo, no me ha gustado tanto. Cae un poco en los clichés que están siendo tan habituales estos últimos años en los libros de novela negra/thriller etc. y la verdad es que me ha sobrado un poco esa parte. Pero como la historia es tan original tampoco me ha molestado demasiado.

Hay varios giros a lo largo de la novela y algún que otro ¡Buuum! de esos que te ponen los ojos al revés, especialmente al final. ¡Ah! y me encanta el condado que se ha inventado la autora y del que nos proporciona un mapa en el libro.
Tuve las suerte de participar en un LC en la que tuvimos un encuentro final con la autora en el que nos explicó muchas cosas sobre el libro, la historia, el título y su portada. ¡Un placer!.

En definitiva que se lleva mis 4* por su originalidad y haber conseguido que conecte con el malo malísimo. Estoy deseando leer el segundo caso del inspector Harris y con qué trama nos sorprende Ana esta vez.

Tom Harris es sargento de la policía de Tin Tow, un pueblo en el que nunca ocurre nada. Pero en agosto del año 2012 las cosas cambian. Alguien profana la tumba de Laura Clark, una joven de dieciocho años enterrada dos días antes, y se lleva su cadáver. Y tan solo es el principio. 

Tenía mis dudas con esta novela, al no conocer a la autora, pero por suerte me animé con la lectura.

Ana Masago nos ofrece una novela negra que atrapa desde el principio. Es cruda y, en algunos momentos, algo desagradable pero no podría ser de otra manera debido al tema que trata. 

No voy a hablaros gran cosa de la trama porque es algo que debe descubrir el lector, pero si puedo deciros que la investigación será larga y dará varios giros antes de su resolución. 

Tenemos tres personajes claves en la novela, el profanador, el sargento Harris y la víctima de secuestro. 

La autora utiliza la primera persona, con la voz del sargento Harris, para la parte de la investigación, y la tercera persona para el resto. Y es algo que funciona bien. Lo malo es que, en determinados momentos, mezcla primera y tercera persona en un mismo capítulo y eso descoloca un poco. Aunque te terminas acostumbrado, creo que habría funcionado mejor en tercera persona todo. 

Me ha gustado mucho el policía, es muy metódico y maniático, pero no deja que sus problemas influyan en su labor. Se toma el caso casi como algo personal, así que seguirá con la investigación a pesar de que la competencia recaiga en otros cuerpos policiales. 

Me ha dado mucha pena del ladrón del cuerpo de Laura. Ya desde el principio vemos que tiene muchos problemas, y la autora nos va desgranando su vida y llegamos a conocerle bien. A pesar de lo terrible de sus actos no podemos dejar de sentir su propio dolor. 

Me ha gustado mucho también Stacy, un personaje que tarda en aparecer pero lo hace con una fuerza arrolladora. 

Ana nos ofrece una novela completa que es mucho más de lo que parece en un principio. Cierra y explica debidamente todos los frentes que abre. Poco a poco vamos descubriendo lo que ocurre porque la autora nos lo va relatando todo, pero sin ser pesada y dejando margen al lector para hacer sus propias teorías. 

Aunque al principio el ritmo es pausado, que no lento, llegado un momento todo se precipita y no puedes parar de leer. 

El libro se cierra perfectamente, pero la autora no ofrece un acertado epílogo en el que se da un giro que le pone el broche de oro al libro. Y el que yo ya imaginase por donde iban los tiros no cambia  nada. 

"Shjol" es una novela negra dura que atrapa desde la primera página. A pesar de su crudeza está narrada de tal forma que es fácil y rápida de leer. Me costaba mucho tener que hacer pausas en la lectura de lo enganchada que estaba. 

He tardado un poco en hacer mi opinión porque quería reposar un poco la lectura antes de valorarla. Y creo que los pequeños fallitos de autor novel son perdonables ya que no afectan a la trama, no es nada que no solucione una pequeña corrección. 

Si os gusta la novela negra os recomiendo esta obra. Merece mucho la pena. Ha sido todo un descubrimiento y espero poder leer pronto algo más de Ana Masago.

Leído en una LC del Club Literario Atreyu en la que tuvimos la suerte de contar entre nosotr@s con la autora.

Shjol me ha gustado por varias razones. La principal es porque Ana ha sido muy valiente y se ha arriesgado al coger una perversión sexual muy desagradable y ponerla en el centro de la trama. Es complicado salirse de lo convencional y la autora lo hace con solvencia ya que, al ser psicóloga, la novela está muy bien documentada.

Otro punto a favor es que el libro se lee muy rápido porque la historia engancha y los capítulos (algunos ultracortos) se suceden a velocidad vertiginosa.

La inacción de la editorial a la hora de subsanar algún error de "forma", no debe empañar el magnífico trabajo que ha hecho Ana. Por cierto, el final me pareció brillante. No lo vi venir y... ¡boom! 💥

“La llaman «la muerte blanca» y dicen que es una muerte dulce, ya que la pérdida de consciencia es paulatina. No te das cuenta de que te estás muriendo. Pero duele, vaya si duele.” ~ Shjol de Ana Masago.

Tom Harris es un investigador maniático que se encuentra ante la desaparición de una joven, Stacy, muy parecida a Laura, una muchacha que se ahogó en un lago y tras ser enterrada, su cadaver desapareció y reapareció al cabo de un tiempo. Tom cree que hay relación entre los casos pero las pruebas que tiene son nulas.

Como lectores sabemos que Tom tiene razón porque a la vez que nos cuenta la investigación, conocemos a Stacy y a su secuestrador, Jim, y la historia que viven juntos.

El libro destaca por la originalidad del tema que trata; un tema incómodo y en el que no voy a ahondar porque no lo sabría hacer con la profesionalidad que lo hace la autora en el libro. Os lo recomiendo aunque tiene algunas “cosillas” de esas que a mi me sacan pelín de quicio pero los que me conocéis ya sabéis que soy “quisquillas” para algunos temas.

He de decir que me ha gustado mucho el personaje de Tom Harris. El libro comienza con él y lo hace con fuerza, con una voz en primera persona que me ha encantado. Lo que no he entendido es por qué en partes de la voz de Tom se pasa a un narrador omnisciente que hace que pierda fuerza. Cuando Tom toma su voz propia, el libro y la sensación que transmite cambian totalmente.

El resto de la trama corresponde a lo que le está sucediendo a Stacy y a Jim; hechos narrados en tercera persona.

Lo que menos me ha gustado es el desarrollo de la investigación. No me he creído como han ido transcurriendo estos hechos con relación a la trama en general. Vamos, que los tiempos no me han cuadrado con lo que sería el avance “normal” de una investigación lógica. También me ha sobrado el epílogo. Creo que el FIN estaba muy bien puesto.

Los capítulos son cortos —algunos hiper cortos— y el libro se lee en dos patadas. Os lo recomiendo porque con sus “cosillas” es un libro diferente y que entretiene. Seguiré la pista de esta escritora.