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Resulta una comedia romántica sin pretensiones, con personajes sencillos, tramas fáciles, no complica ni provoca nada, simplemente son lo que son. Quizás esa sencillez en la historia me hace recordar un poco a las novelas juveniles, sin maldad, sin malicia. Creo que este tipo de novelas tienen su público. Novelas sin doble sentido. Creo que la idea de la novela en sí y la continuación de las historias de personajes secundarios es interesante, pero reconozco que para mí se me ha hecho larga ya que todo mi interés se centraba en esa boda. Eso sí, los personajes son tiernos, humanos y simpáticos, con la alegría que aportan esos vecinos cotillas que, sin maldad, acaban sobrepasando los límites de lo admitido. Creo que debería revisarse la corrección ortográfica y de puntuación. Por lo demás bien, a secas. |
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