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¿Conocéis esa sensación de vicio absoluto con un libro y no poder parar de leer hasta que te lo acabas? Pues eso me ha pasado con este libro. Me ha sorprendido la forma de escribir de la autora y sin duda, quiero leerla muchísimo más. Una distopía en todo su esplendor. Ciencia ficción no demasiado complicada y llena de corrupción, personajes muy fuertes y a los que he amado, droides y una lucha constante por la supervivencia. Es que no le ha faltado de nada, no podría haber terminado con mejor sensación. DREAMLAND es una red social diseñada para hacer felices a los habitantes de este extraño y futurista mundo. Pero como ya sabemos, nada es lo que parece y todo tiene dobles intenciones. Y a medida que se van descubriendo todos los trapos sucios, es imposible separarse de sus páginas. He conectado bien con la historia y sus personajes, me han gustado todos, que eso ya es algo complicado. Me he emocionado, he sufrido y me he alarmado, sobre todo en la recta final, MENUDA RECTA FINAL. Esta se la guardo a la autora, no es nada personal (sí lo es) y estaré esperando con muchas ganas la segunda parte, porque no son maneras de dejar a los lectores. La estética cyberpunk cada vez me gusta más en formato novela y aquí me ha parecido de sobresaliente. Tanto el worldbuilding, los personajes y el contexto forman uno, dando forma a una obra que se disfruta por sí sola, sin pensar en nada más. Y eso que la he leído en uno de mis peores momentos y me ha salvado, por eso creo que ha sido tan especial para mí. Bastante original y que ofrece y regala más de lo que parece a simple vista. Lo comencé con unas expectativas neutras y la verdad es que me ha gustado mucho más de lo que me esperaba. Un auténtico acierto. + Leer más |