El reino del revés

Debo admitir que lo único que sabía de este libro es 1) que la portada es lo más maravilloso de la vida y 2) que es una versión de la historia de Mozart contada por su hermana, la que no pasó a la historia, todo con toques de fantasía. Y no faltó más que eso para que yo ya estuviera abordo del barco porque ¿quién no ama un libro que narre la versión de la parte oprimida, la que no tiene voz? Y aunque no tenía expectativas, el libro se superó de una forma asombrosa.

Nannerl es una joven prodigio de la música, siendo apenas una niña, ya domina grandes obras y las interpreta de manera magistral, pero no puede compararse a su hermano menor, Wolfgang, quien merece la atención del mundo, ya que a su corta edad ha demostrado tener un oído único para componer y parece que nadie se le puede comparar a la hora de tocar. Los hermanos Mozart destacan por su ser excepcionales, pero sólo uno de ellos está destinado a triunfar y no hace falta que nos preguntemos quién, ya conocemos la respuesta. Angustiada por este hecho, Nannerl busca la forma de ser recordada y cuando se le presenta la oportunidad la toma sin pensarlo dos veces, aunque eso implique poner en riesgo su vida, aunque tenga que ir a un reino lleno de criaturas mágicas y enfrentar ogros, brujas, monstruos y quién sabe qué tantos villanos.

Ya sé que no es la mejor sinopsis del mundo, pero me parece que toma exactamente lo justo y necesario para que quieras, necesites, ponerte a leer y descubrir el viaje que Nannerl tiene que pasar para poder ser quien desea ser. Y sí, es un libro basado en personas reales, los hermanos Mozart, y aunque conocemos de sobra la vida de Wolfgang, la historia de su hermana es bastante desconocida, por no decir invisible, para el mundo y Marie Lu decidió darle una voz, que dejara de estar en las sombras y que tuviera el lugar que la historia, el machismo y el contexto histórico le quitó.

Respecto a la trama tengo mucho y poco que decir, es un libro súper corto, apenas llega a las 310 págs, y nos centramos en la carrera musical de los hermanos, unos niños de apenas 10 y 6 años, ¿pueden creerlo? En serio son unos bebés que no saben nada de la vida más lo que sus papás deciden contarles y aquí viene la parte difícil, sí, son unos bebés, pero por lo mismo es más impresionante que sean talentosos, que toquen música, que puedan componer, esto les da nivel ante la sociedad y, por lo tanto, popularidad, que se traduce en presentaciones y dinero. Ajá, el padre de los hermanos Mozart se esfuerza hasta el cansancio en instruir a sus hijos en el clavecín para que sean perfectos sin importarle nada, ni siquiera robarles la infancia o perjudicar su salud, su único interés es el dinero, lo importante que será el apellido Mozart y que sean reconocidos. Llámenlo como quieran, pero eso es explotación infantil, está mal, es horrible y hasta lo podemos considerar un delito.

Algo que amé en demasía y de lo que me habría encantado tener unas 100 páginas más es el mundo de fantasía, el dichoso Reino del revés que se presenta ante Nannerl para cumplirle su sueño de ser recordada. Quedé enamorado de este mundo, se siente oscuro, desolado, triste y pareciera tener una bruma gris que te grita que algo anda terriblemente mal. Aquí habita uno de los personajes más únicos, Jacinto, el guardián de Nannerl y el que se encargará de cumplirle el deseo de ser recordada, aún por encima de su hermano prodigio, salvo que para que su deseo sea cumplido, antes tiene que realizar unas pequeñas misiones para llevar al mundo del revés a su esplendor antiguo. Yo estaba living con esto, amé las vibes de Jacinto, la forma en la que se describe y cómo evoluciona con el tiempo y, al igual que Nannerl, sentía ansiedad por la próxima aparición de Jacinto, necesitaba volver a ese mundo y conocer todos sus secretos. Obvio no fue perfecto porque apenas y tenemos vistazos del reino, las visitas son exprés y no dan tiempo de apreciarlo, es insustancial y casi hasta el final del libro nos empapamos de él, pero ya no se siente la misma emoción.

Uno de los grandes problemas que me encontré fueron los personajes. Sí, los amé y me parecieron increíbles, pero nunca encontré un crecimiento o madurez real en ellos, pareciera que se quedaron congelados en la edad en la que iniciamos (Wolfgang con 6-8 y Nannerl con 8-10) y hasta me dio la impresión de que todo pasa en unos cuantos meses y no en varios años. Eso sí me frenó mucho y en más momentos de los que me gustaría admitir me hizo preguntarme "¿pues cuántos años tienen?".
Nannerl, nuestra protagonista. A pesar de su corta edad me pareció bastante decida y determinada, sabe lo que quiere y tiene miedo de ir por ello, sabe su contexto, sabe que no tiene derecho a triunfar porque es mujer y que debe esforzarse más para ser apenas mencionada. En verdad pude empatizar mucho con ella y sentir su impotencia.
Wolfgang, el famosísimo Mozart que todxs conocemos. No sé cuál era la intención de Marie Lu, pero yo terminé detestándolo, si bien es cierto que lo conocemos con tal solo 5-6 añitos, me pareció en extremo odioso, consentido y arrogante, sobre todo lo último: sabe que es único, que es bueno y que nadie se le compara al talento que tiene y alardea de esto. Claro que tiene su lado tierno, es empático y solidario con su hermana, no logra ver las diferencias sociales que hay entre el hecho de ser hombre o mujer y la reconoce por lo que es: un talento único y una gran compositora. Y aunque a lo largo del libro se deja ver su fragilidad, miedos y que es una persona que goza de poca salud, nunca logré empatizar o preocuparme en lo más mínimo por él.
El padre Mozart. A él sí lo odié, es todo lo que está mal en el mundo y con cada aparición que hacía se me derramaba la bilis. Pareciera que la única razón por la que tuvo hijos fue para cumplir su sueño frustrado de ser un músico famoso. Lo peor es que sabe que Nannerl es genial y busca opacarla porque tiene la oportunidad de brillar con su hijO, no le importa lo que ella quiera, desee o sus sentimientos, lo importante es que sean famosos, que sean prestigiados y que ganen mucho dinero tocando y componiendo.

La forma de escribir de Marie Lu es increíblemente ligera, fluida y atrapante, simplemente tomas el libro y no puedes parar de leer, sientes a Nannerl contándote su historia y no puedes evitar que se te estruje el corazón, sentir impotencia y coraje. Agradezco que no esté cargado de descripciones inmensas e innecesarias, tiene el toque justo para que te puedas sentir en el sigo XVIII encerrado en un mundo en el que sabes que todo está mal y del que no puedes cambiar nada. Oh, casi lo olvido, al final Marie Lu pone una nota de porqué creyó importante contar la versión de Nannerl y OMG!, es todo lo que necesitaba para confirmar que es un libro con toques feministas y hace una clara crítica al sistema que oprime no solo a las mujeres, sino a todxs aquellxs que se alejan de la heteronorma de hombre cis blanco. Y ya sólo por eso vale la pena darle una oportunidad.

En resumen, El reino del revés, es un fantasy juvenil histórico que no te dejará indiferente ante la injusticia que sufrió Nannerl por el simple hecho de ser una mujer en la época equivocada, acompañado de un ambiente de fantasía que te hará querer más y que no querrás, o podrás, soltar. Sin dudas me quedo con bastantes ganas de seguir leyendo a la autora y me pregunto qué otras grandes historias me perdí.
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