InicioMis librosAñadir libros
Descubrir
LibrosAutoresLectoresCríticasCitasListasTest
>

Crítica de Celia_0504


Celia_0504
26 October 2021
Y por fin termine de leer las obras completas de H.P.Lovecraft, una de mis grandes asignaturas pendientes desde hace muchos años, desde la adolescencia. Si he tardado tanto ha sido porque estaba obcecada con hacerme con un tomo de sus obras completas, pese a que existen cientos de recopilaciones con solo algunas de las mismas. Pero yo quería tenerlas todas. Me alegro de haberme hecho con la edición de la editorial Plutón, pues no solo está muy bien de precio, también cuenta con una excelente traducción y el tomo esta estupendamente editado. Si tuviera que ponerle algún pero sería que me hubiera gustado que hubiera contado con algún pie de nota más para tratar con mayor profundidad las historias, el contexto histórico, las influencias que más incidieron en estas obras y como se escribieron, y que en el prólogo inicial se hubieran dado más datos sobre la vida y obra de Lovecraft. Pero como he dicho, por ese precio esta edición me parece más que meritoria (ya que otros tomos con las obras completas de este autor tienen un precio casi prohibitivo) y estoy muy satisfecha con ella.

Antes de enfrentarme a la reseña de este gran tomo, me parece importante señalar para los que no lo sepan que la prosa de Lovecraft se divide en tres temas fundamentales: están las historias de corte más clásico o macabro, las que se relacionan con el mundo de lo onírico, y las que tratan del terror cósmico o lovecraniano, donde se incluiría el famoso ciclo de los mitos de Cthulhu.

Empecé a leer el libro en enero de este año y no ha sido hasta junio, que por fin lo he terminado. Me creo que haya gente que pueda leerse las casi 2000 páginas que lo componen todas seguidas, pero yo tengo que reconocer que no hubiera podido así. Para mí la mejor forma de enfrentarme a Lovecraft ha sido ir leyendo sus cuentos poco a poco, cada mes ir leyendo 2,3 o 4 historias, intercaladas con otras lecturas. Si no, no veo cómo hubiera sido posible poder acabarlo, sinceramente. No quiere esto decir que no me haya gustado Lovecraft, ni mucho menos. Solo que es un autor que ha tenido cosas que me han gustado y fascinado mucho junto con otras que han logrado que sus historias se me hayan hecho, a veces, muy cuesta arriba. Leerle ha sido toda una montaña rusa, de momentos de disfrute absoluto junto a otros en que veía muy fatigoso acabar lo que había empezado.

Empezaré por lo que no me ha gustado con una metáfora en la que no he podido dejar de pensar mientras leía a Lovecraft. Es una comparación que una vez leí en una reseña sobre otra célebre obra de la literatura estadounidense, escrita por por otro no menos célebre escritor americano, y que también ha vuelto locos a más de uno o dos lectores. En dicha reseña, el autor comparaba la obra que le ocupaba y el estilo de su autor con un castillo abandonado en las higlands escocesas donde te invitan a pasar una temporada: al principio la idea te parece una pasada, toda una aventura. Pero a medida que pasa el tiempo acabas por ver todos los inconvenientes: las cosas no funcionan, hay mucho polvo, hay corrientes de aire helado, está lejos de todo centro habitado… el simil va al pelo no solo por la temática de Lovecraft, también por como me he sentido muchas veces leyéndolo.

Si hay algo que caracteriza el estilo narrativo del bueno de nuestro Howard Philip es su pesadez. Tiene una prosa densa y tupida a más no poder, árida la mayor parte de las veces. Apenas hay diálogos, y la mayor parte de las veces se tratan de largos monólogos o escritos en los que un personaje aporta información a otro. Y esto lo suple con descripciones, con muuuuuuuchísiiiiiiiimas descripciones todas ellas muy detalladas y minuciosas (en ese sentido me ha recordado mucho a su coetáneo Tolkien). Pero que muy detalladas, en serio. de hecho, en muchas de sus obras hay más descripciones que trama propiamente dicha. A todo ello hay que sumarle muy poca variedad en sus personajes: todos son estudiosos interesados en las fuerzas del más allá y con gran bagaje cultural, hombres de pocas palabras y carácter cercano a lo flemático que acaban siendo arrastrados a un mundo de personajes inconcebibles y deidades prehistóricas que conviven con criaturas que parecen sacadas de un bestiario medieval. Y todos ellos acaban siendo un trasunto de del propio Lovecraft (pero en ello nos centraremos un poco más adelante).

Y no solo hay repetición en sus protagonistas. Cuando llevas leidas muchas novelas y muchos cuentos ves que la mayor parte son variaciones de otras, sin que cambien muchas cosas, pues, al fin de al cabo, están relacionadas unas con otras. Y para redondear la guindilla el estilo literario de este escritor es muy lento la mayor parte del tiempo, si bien esto tiene su explicación y ha sido lo que menos me ha chocado de todo lo que he dicho anteriormente, ya que al final esto último se le perdona.

Que no todo el Lovecraft es malo para nada. El tipo era un excelente escritor. Y punto. Aunque por lo que haya dicho antes no lo parezca. Su grandeza radica más en lo que escribió que en como lo hizo. Impresiona la enorme capacidad y el ingenio de este autor para idear los mundos que creó y conectar cada trama y cada historia de forma coherente, de ahí que se acabe por entender la similitud entre las mismas y los personajes. No daba puntada sin hilo. Me quito el sombrero ante él y ante su inconmensurable talento como hacedor de historias y mundos y narrador. Y ante la capacidad que tuvo de hacer lo que le dió la gana y como le dió la gana, sin ningún tipo de concesión antes de nada y ante ningún estilo. Son obras increíblemente originales incluso hoy en día, sorprende por lo bien que han envejecido y como dentro de ella se aúnan otros géneros literarios como la novela de detectives. Leer las ha tenido algo de cercano para mí por la gran cantidad de obras, cuentos, películas y libros en los que ha influido, y si algo he disfrutado de esta lectura ha sido darme cuenta de que ese o ese otro detalle ya lo había visto en tal o cual obra.

Y además, como escritor su estilo tiene cosas también bastante positivas. Como he dicho antes es muy lento, sí, pero al mismo tiempo cuando coge carrerilla crea escenas que dejan al lector en tensión constante y le impiden parar de leer, haciendo de la lectura una montaña rusa de emociones. Y gracias a sus minuciosas descripciones uno no necesita mucha imaginación para sentirse en los escenarios que nos presenta y poder introducirse en la historia y en su contexto. Por todo ello es capaz de componer momentos en los que al lector se le acelera el pulso y nota como la piel se le pone de gallina y los escalofríos le suben por la espalda. Es, sin duda alguna, un autor del genero del miedo en todas sus variantes, del miedo tal y como podemos imaginarlo con criaturas terroríficas y escenas sangrientas, pero también trata el terror más sutil y psicológico.

Como curiosidad señalar que una de las cosas que más he disfrutado a medida que iba leyendo estos libros ha sido ir buceando en la biografía de Lovecraft, y ver como todos sus traumas, manías e ideas políticas y sociales influyeron en su obra y se manifiestan en la misma. Conocer todos esos detalles ha enriquecido mucho para mí la lectura. Y por supuesto me han permitido ahondar en una figura muy compleja, solo así se explica que ideara y pusiera sobre el papel lo que escribió.

Obviamente en un compendio de cuentos y novelas cortas tan extenso ha habido obras que me han gustado mucho más que otras. Reconozco que aunque las obras oníricas o sobre los mitos de Cthulhu me han parecido fascinantes e interesantes, mis predilectas viran más hacia las de corte gótico (en las que la sombra de Edgar Allan Poe se percibe nítidamente y sin complejos. Y yo encantada por ello) pues es un estilo que me puede con su terror más sutil, quizás más que el de la ciencia ficción propiamente dicha. Entre las novelas que más me han gustado destaco "El horror de Red Hook", “El Caso de Charles Dexter Ward”, “El testimonio de Randolph Carter” o “El Ser en el Umbral”, entre otras. Destaco especialmente “La Búsqueda de la Onírica Kadath” una historia densa y que puede hacerse pesada, pero que me resulto fascinante por lo que contaba y por ser una pieza clave para la imaginería lovecraftiana y eje de muchas de las tramas de la misma. En cambio “En las Montañas de la Locura” se me hizo totalmente bola. Soy consciente de que es una de las obras más importantes y conocidas de Lovecraft y me da mucha pena admitir esto, pero me costó mucho terminarla. Creo que se debe a que en ella encontré concentradas todas las cosas negativas que he dicho más a arriba, ya que fue la última novela corta que leí de este gran tomo de obras completas, y me recordó mucho a todo lo que ya había visto antes entre sus páginas, de ahí que no hubiera nada que en ella me sorprendiera o llamara la atención. Pero desde luego creo que ha sido de las pocas obras que no he podido disfrutar plenamente

En conclusión solo puedo decir una cosa: a Lovecraft hay que leerle al ritmo que uno considere, pero siempre con atención. Solo así uno puede descubrir porque es uno de los autores más influyentes que ha habido nunca, con una presencia que aún hace eco en autores y obras modernas, y dejarse sumergir en la locura tétrica y en la colosal imaginación que son las señas de identidad de su trabajo. Es un peregrinaje que todo amante de las obras y la literatura gótica y de ciencia ficción debe hacer en algún momento de su vida. Yo, personalmente, estoy contenta de haberme adentrado, por fin, en un mundo tan conocido y , a la vez, tan desconocido. A ver si pronto puedo leer las obras que hizo en colaboración con otros escritores.
Comentar  Me gusta         10



Comprar este libro en papel, epub, pdf en

Amazon ESAgapeaCasa del libro
Apreciaron esta crítica ()(1)ver más