Potro

Suelo leer sobre muerte, zombies, fantasmas, etc... Suelo estar dentro de una ficción que me acomoda a visualizar el mundo inventado que me proponen diferentes autores.

Sé que a veces leo sobre asesinos en serie que, pese a tratarse de ficción, podrían acercarse bastante a la realidad. Pero POTRO es una ostia en la cara. Una bofetada que te pone en un dónde y un cuándo real, y aunque sea una historia ficticia, resuena dentro de ella toda la miseria y putrefacción de unos tiempos y una sociedad que estuvo en decadencia: Bilbao, años 80, un escenario en plena transición con la presencia de ETA. Las drogas están en auge, en especial la heroína, y las consecuencias que deja tras de sí son impactantes.

La novela está narrada por un padre que pierde a su hijo adolescente a causa de su adicción a la heroína. Los saltos en el tiempo deshilvanan el pasado y el presente metiéndose de lleno en las sombras de una época bastante difícil. Relata una cruda realidad y nos muestra la tristeza de la mano de adolescentes que se sumen en el pozo de drogadicción, miseria, delincuencia, prostitución...

Sinceramente, el tema me llama mucho la atención y, para mi gusto, está muy bien narrado, es fácil de leer, cortito, y remueve un poco tu interior para ponerte por un día en la piel de la miseria.