No es un libro sencillo ni mucho menos. La prosa de Guillem López es muy sugerente, escribe de una manera envolvente, construyendo una atmósfera atractiva pero densa y poco translúcida. No es fácil de leer como no es sencillo de escuchar un disco de Devil Townsend, admiras al músico pero te cuesta retener la melodía. de Arañas de Marte me quedo con las emociones que me provoca, la sensación de delirio y el poder narcótico que transmite. ¿La recomiendo? Es una decisión muy personal, no creo que sea para todo el mundo porque cada uno verá una historia distinta. |