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No suelo leer este tipo de novelas, no por nada en especial, sino porque no suelo empatizar con ningún personaje y me acaban aburriendo. No sé si fue que lo empecé con las expectativas muy bajas o qué, pero me he encontrado una historia preciosa y muy peculiar de la que no entiendo cómo no se ha hablado más. Y es que en apenas 250 páginas nos hablan del suicidio, la muerte, el dolor, las enfermedades mentales, los transtornos y la diversidad, todo ello tratado de forma maravillosa. El desarrollo de la historia a través de estos temas, unido a la pluma de la autora (sencilla pero bonita) ha hecho que este libro haya sido prácticamente redondo. Si no lo conocíais, os lo recomiendo, porque estoy segura de que se va a hacer un hueco en vosotrxs. Es una libro triste que te deja un nudo en el estómago constante, pero también un libro de ver la belleza y encontrarse a uno mismo en medio del caos y la tristeza. |
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