La chica que coleccionaba palabras

Primero de todo tengo que decir que Nerea es increíble, no solo porque es una persona maravillosa y súper cercana, sino porque sus libros son autopublicados, ella se encarga de todo el trabajo y hace unas ilustraciones que son una auténtica pasada 😍.

Gwen tiene que irse a vivir con su abuela después de un grave incidente. Allí conoce al chico de las flores, un joven que le hará plantearse muchas cosas en su vida.

Nerea nos trae una historia muy tierna de amor adolescente, donde nos enseña claramente la diferencia entre el amor tóxico y el amor sano. Asimismo, nos encontramos una historia de superación de los miedos, de la pérdida, de evolución personal, de aprender a valorarse y quererse a uno mismo.

Es una lectura muy ágil y rápida, que te va a hacer sonreír, pero que también te hará tener el corazón en un puño en ocasiones. Los personajes son adorables en su mayoría, vas a querer abrazarlos. Gwen y Hugo me han encantado, pero tengo que mencionar también de manera especial a Wanda, una amiga de las de verdad, y a Italia, que aunque ha tenido pocas apariciones es un personaje súper fuerte y que me ha encantado su personalidad.

La ambientación es también una parte muy importante del libro, nos transporta a una isla, con playas rocosas, casitas acogedoras, un faro. Sitios preciosos que cualquiera querría visitar.

Es una lectura que cualquier público va a disfrutar muchísimo, pero sobre todo es muy recomendable para el público juvenil, porque tiene enseñanzas que son muy importantes en esa época.
Enlace: https://www.instagram.com/p/..