El problema de los tres cuerpos

Con tres patas podemos hacer una mesa bien estable. Y sin embargo, si juntamos tres soles tendremos un sistema caótico. Calcular matemáticamente las trayectorias que van a seguir los cuerpos celestes a partir de las ecuaciones del movimiento de Newton es un problema que no tiene una solución general. Es lo que se conoce como el problema de los tres cuerpos, que está relacionado y da título a esta novela de Cixin Liu, que se ha ganado una buena reputación bien merecida entre los que disfrutamos de la ciencia ficción. Los responsables de la serie Juego de Tronos ya están creando una adaptación de esta obra de Liu, lo que le va a dar más popularidad si cabe próximamente.

Lo fundamental es que el autor es un escritor de primer nivel, y eso se nota incluso si nos toca leer una traducción de la obra original en chino (que me atrevo con el inglés, pero a tanto no llego...). Es asombrosa la forma en la que maneja el tiempo en la narración, y como dosifica sabiamente la información; detrás de este libro hay un estratega brillante. Destacan también la construcción de personajes y su impecable tratamiento de los temas de física que introduce.

Los tres pilares temáticos de la historia, que no por casualidad es la primera parte de una trilogía, son China, el progreso científico y el primer contacto con una civilización extraterrestre. Este último es un tema clásico del género, que aquí tiene un enfoque muy interesante. Los personajes principales son chinos, y las consecuencias de la Revolución Cultural tienen una especial repercusión en alguno de ellos. Y me quedo por encima de todo lo demás con su oda a la importancia de la ciencia. Porque "solo hay un modo de contener el desarrollo de una civilización [...]: terminar con su ciencia".

SPANISH REVIEW

“El problema de los tres cuerpos”, la obra inaugural de la serie “El recuerdo del pasado de la Tierra” del autor Cixin Liu, ha logrado un reconocimiento global tras su edición original en chino en 2006 y su subsiguiente traducción al inglés realizada por Ken Liu en 2014. La novela, enmarcada en la Revolución Cultural, una era de fervor en la que la República Popular China se transformó, en esencia, en un culto a la personalidad de Mao Zedong, despliega un escenario en el que la intención es erradicar todo vestigio no comunista de la historia y cultura de China, recurriendo si es necesario a la violencia.

En este ambiente, el padre de Ye Wenjie, un renombrado profesor de física en la prestigiosa Universidad de Tsinghua en Beijing, es acusado de abrazar ideologías contrarrevolucionarias debido a su admiración por la ciencia occidental, incluyendo los trabajos de Einstein y Bohr. Es asesinado a golpes por estudiantes de la Guardia Roja ante la mirada aterrada de su hija. Posteriormente, Ye Wenjie también es perseguida y encarcelada por su afinidad con el pensamiento occidental. Sin embargo, es rescatada por dos científicos militares adscritos a la Costa Roja, un programa espacial de alto secreto del gobierno chino, quienes valoran sus extraordinarias capacidades como física.

“El problema de los tres cuerpos” adopta su idea principal del clásico de ciencia ficción “Solaris” (1961) de Stanisław Lem, que plantea si un planeta orbitando dos soles podría sostener la evolución de la vida. Cixin Liu amplifica el desafío al introducir un tercer sol en la ecuación. La trayectoria orbital de un planeta alrededor de tres soles plantea un problema matemático de gran complejidad que ha eludido su resolución durante siglos. En “El problema de los tres cuerpos”, el planeta orbitante, Trisolaris, experimenta períodos de relativa estabilidad que son interrumpidos abruptamente por caos climático.

Más allá de su impecable tratamiento de los principios científicos, “El problema de los tres cuerpos” plantea importantes cuestiones filosóficas, siendo la más crucial: ¿merece la humanidad ser salvada? A medida que Ye Wenjie se convierte en una de las científicas líderes en la búsqueda de vida extraterrestre, sus vivencias durante la Revolución Cultural han moldeado su percepción del valor de la humanidad. A diferencia de “Solaris”, que rápidamente se adentra en la pseudociencia, “El problema de los tres cuerpos” se asienta en principios científicos mayoritariamente creíbles. Cixin Liu infunde la trama con dosis significativas de entrelazamiento cuántico realista, teoría de la información, nanotecnología y física de partículas. Uno de los conceptos más fascinantes propuestos por la obra es una nueva partícula subatómica denominada “sofon”, capaz de cambiar su dimensionalidad como medio de almacenar información. Cixin Liu, además de manejar con maestría las ciencias duras, también aborda de manera brillante cuestiones sociológicas, particularmente en relación con la Revolución Cultural y su impacto en la psicología humana y las decisiones tomadas por los personajes.

ENGLISH REVIEW

“The Three-Body Problem”, the inaugural work of the series “The Remembrance of Earth's Past” by author Cixin Liu, has achieved global recognition following its original Chinese edition in 2006 and its subsequent English translation by Ken Liu in 2014. The novel, framed in the Cultural Revolution, an era of fervor in which the People's Republic of China essentially transformed into a personality cult of Mao Zedong, unfolds a scenario in which the intention is to eradicate all non-communist traces of Chinese history and culture, resorting to violence if necessary.

In this environment, the father of Ye Wenjie, a renowned physics professor at the prestigious Tsinghua University in Beijing, is accused of embracing counterrevolutionary ideologies due to his admiration for Western science, including the works of Einstein and Bohr. He is beaten to death by Red Guard students in front of his terrified daughter. Later, Ye Wenjie is also persecuted and imprisoned due to her affinity with Western thought. However, she is rescued by two military scientists assigned to the Red Coast, a top-secret space program of the Chinese government, who appreciate her extraordinary abilities as a physicist.

“The Three-Body Problem” adopts its main idea from the science fiction classic “Solaris” (1961) by Stanisław Lem, which poses whether a planet orbiting two suns could sustain the evolution of life. Cixin Liu amplifies the challenge by introducing a third sun into the equation. The orbital trajectory of a planet around three suns poses a highly complex mathematical problem that has eluded resolution for centuries. In “The Three-Body Problem”, the orbiting planet, Trisolaris, experiences periods of relative stability that are abruptly interrupted by climatic chaos.

Beyond its impeccable treatment of scientific principles, “The Three-Body Problem” raises important philosophical questions, the most crucial being: does humanity deserve to be saved? As Ye Wenjie becomes one of the leading scientists in the search for extraterrestrial life, her experiences during the Cultural Revolution have shaped her perception of the value of humanity. Unlike “Solaris”, which quickly delves into pseudoscience, “The Three-Body Problem” is based on predominantly credible scientific principles. Cixin Liu infuses the plot with significant doses of realistic quantum entanglement, information theory, nanotechnology, and particle physics. One of the most fascinating concepts proposed by the work is a new subatomic particle called “sophon”, capable of changing its dimensionality as a means of storing information. Cixin Liu, in addition to masterfully handling the hard sciences, also brilliantly addresses sociological issues, particularly in relation to the Cultural Revolution and its impact on human psychology and the decisions made by the characters.




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Hoy vengo a hablaros de esta pequeña obra de arte que es El Problema de los Tres Cuerpos de Cixin Liu. Este libro me lo han recomendado por activa y por pasiva infinidad de veces, pero me imponía respeto empezarlo, ya que sabía que estaba repleto de tecnicismos que no estaba segura de llegar a entender, y temía que el libro me decepcionase por ese motivo.
Por suerte no ha sucedido nada de ésto, más bien todo lo contrario, me atrapó desde sus primeras páginas con una serie de hechos y acciones que no esperaba en un libro de este estilo y que me ganó irremediablemente.
Es cierto que hay un punto en el libro, donde el autor se pone bastante más técnico, donde tuve que hacer un acto de fe y asimilar lo que ponía tal cual, y a partir de ahí, "tirar pa'lante", pero poco más puedo hacer con mis conocimientos de física de nivel de bachillerato, por mucha ciencia ficción que haya leído.
Aún habiéndome sentido sobrepasada en esa parte, el estudio sociológico que nos muestra en su obra me ha parecido sublime, así que, si os pasa como a mí, que pensáis que esta obra puede que sea demasiado para vosotros, si os gusta la ciencia ficción, ni os lo penséis, leedla.

Sobre todo este libro me ha parecido de una originalidad impresionante, había leído ya en algunas reseñas que no se trataba de un libro de ciencia ficción tradicional y no, no lo es, mientras que se podría considerar como un libro de los llamados de “primer contacto”, la manera en que se desarrolla la trama hace que, a pesar de que todo gira alrededor de esto, al mismo tiempo no parece ser la parte central de la trama.

Para los que nos gusta la ciencia ficción este libro en principio descoloca mucho, creo que esperaba ver naves espaciales, situaciones fuera de realidad y contexto, futuros atópicos o distópicos, situaciones científicas avanzadas, ya saben lo que comúnmente conocemos como ciencia ficción, pero lo cierto es que al menos toda la primera parte del libro resulta en una trama más bien de intriga.

Hay que reconocer dos cosas a este libro:

1. Que no se trata de un libro de ciencia ficción convencional, pero que tiene una situación de este género que sobrepasa lo esperado, con una calidad tremenda en conocimientos científicos, para los que amamos la ciencia ficción purista, este libro es alucinante.

2. Tiene una narrativa inteligente, tan dramática como intrigante, llena de giros de historia que sorprenden al punto de que, cuando termina el libro uno se encuentra con la boca abierta pensando “¡pero que carajos! ¿dónde está el segundo libro?”

Así pues, tenemos un libro de esos que son realmente fuera de lo común, que bien podría llenarle el ojo a los amantes del thriller como a los amantes de la ciencia ficción, con una narrativa inteligente, fresca, fuera de lo convencional y desde la primera página atrapante, que te va llevando de la mano, casi esperando que suceda una cosa para sorprenderte cuando no pasa lo esperado.

Me ha resultado muy interesante ver que a pesar de la enorme importancia de algunos de los personajes, estos no parecieran tener ninguna profundidad, para mí el autor le ha dado tanta importancia a la historia que todos sus actores pasan a un segundo plano sin llegar a ser personajes en absoluto planos, tampoco hay uno que se lleve la historia, simplemente todos cumplen con la función que tienen, lo importante es lo que pasa, lo que hacen para que la historia sea la protagonista siempre.

La última cuarta parte del libro es alucinante y además de eso muy interesante, el autor me ha fascinado con sus conocimientos y su capacidad de poner en negro sobre blanco teorías científicas que si bien no son del todo probadas o algunas ni siquiera sé si podrían llegar a realizarse, le ha dado un boom a mi cerebro, mis neuronas no daban para más y sin embargo todo ha sido explicado de tal manera en que he podido comprender la parte de la explicación del viaje de protones, de verdad hay que poner atención a cada palabra dicha en esta explicación, resulta tan interesante como importante para lo que se viene, supongo yo, en el segundo libro.

Sin duda uno de los mejores libros de este género que he leído.

Un gran libro de ciencia ficción, un paso hacia adelante en un genero bastante estancado y alejado de lo que fue la gran ciencia ficción del periodo entre la década de los 60 a los 80, donde los grandes autores indicaban que la ciencia ficción debía servir para hacerse preguntas (posibles o no) sobre como podía devenir la humanidad y ofrecer respuestas (por increíbles que fueran).El hecho de ser escrito por un escritor chino y que no se ha dejado influenciar por la narrativa occidental, le da un aire fresco.
En este libro, utilizando un sinfín de materias, nos argumenta puntos de partida y caminos que se podría encaminar la física, la ecología, las matemáticas, todo con retazos de la historia de la humanidad, así como una introspección bastante fuerte de lo que representó la Revolución cultural china y lo que supuso sobre todo para los científicos, un tema tabú durante décadas en China.
A todo esto podemos sumar la representación de la sociedad extraterrestre, de la que no necesita descripción física para que cree un cierto desasosiego en el lector y se pueda plantear preguntas un tanto incómodas.
Un libro brillante, pero no exento de cierta complejidad en algunos fragmentos bastante técnicos. Es de esos libros que requiera la atención en la lectura para poder seguirlo y comprenderlo.

Ha habido que esperar casi una década para que El problema de los tres cuerpos (2007), de Liu Cixin, se tradujera al castellano y finalmente se publicara en España. Y eso sólo sucedió después de que el autor chino vendiera una cantidad fabulosa de ejemplares de su obra y recibiera varios premios y cribirte a Un Humilde Lector.reconocimientos internacionales.

Pero en fin, más vale tarde que nunca. al fin este libro llegó a mis manos y empecé a leerlo a pesacribirte a Un Humilde Lector.r de saber que había sido recomendado por personajes como Barack Obama o Mark Zuckerberg, lo cual en principio no me inspiraba demasiada confianza. Sin embargo, honestamente puedo decir que la espera valió la pena.

Se trata de la primera entrega de una trilogía (bautizada como “trilogía de los tres cuerpos”), que se completa con El bosque oscuro y El final de la muerte. Es cierto que se puede leer de forma independiente, pero después de El problema de los tres cuerpos uno se queda con ganas de saber más. Yo al menos ya he puesto siguiente título en mi lista de lecturas pendientes.

Le he dado muchas vueltas a esta reseña para poder escribirla sin revelar la trama más de lo necesario, lo cual finalmente ha sido imposible. Así que vaya por delante este aviso de spoilers antes de seguir leyendo.
(Sigue leyendo la reseña en el enlace)
Enlace: https://humildelector.com/20..

El planeta trisolaris se encuentra en la órbita de 3 soles, 3 soles que ejercen su fuerza gravitacional sobre el planeta y sobre ellos mismos, un problema de difícil solución (de hecho hoy en día no la tiene) ya que es imposible predecir como esos tres soles o tres cuerpos van a reaccionar a la fuerza gravitacional de cada uno de ellos.
Pero este libro no sé ambienta en Trisolaris, con sus eras caóticas y eras estables (según las órbitas de sus soles) si no en china, una China que va desde la revolución cultural de los años 60 hasta nuestros días.
Con unos pocos personajes sin un gran desarrollo nos cuenta esta historia llena de filosofía sobre la vida humana, y si merece la salvación o la extinción. Hilando el pasado y el presente de los personajes nos va introduciendo en la trama en la que lo principal es la comunicación con una sociedad extraterrestre y cual es la reacción de la humanidad. Por una parte los fanáticos que crean una sociedad secreta para colaborar con ellos y por otro lado los que quieren luchar contra la invasion.
Creo que uno de los grandes protagonistas de la historia es la ciencia, se nota que el escritor tiene un gran conocimiento de la física tanto teórica como aplicada y aunque todo está explicado de una manera muy sencilla para mí ha habido momentos en los que tanta explicación me sacaba de la historia. Menos mal que la semana pasada vi la serie y eso me ha ayudado a asimilar muchos conceptos.
Tanto si eres amante de la ciencia ficción como si no lo eres es un libro que merece la pena leer y darle un par de vueltas al coco.

Un inicio de trilogía potente, adictivo e intrigante, con un final bastante cerrado y una premisa fascinante que sirve al autor para especular con gran originalidad sobre un sinfín de temas, llevando al lector a reflexionar sobre otros tantos. Historia, ética, ciencia, filosofía, geopolítica... todo hilado con ideas y conceptos tremendamente imaginativos.

Como siempre sucede con Cixin Liu, los personajes pasan a un segundo plano, convirtiéndose en meros vehículos para la trama, que (como contrapunto) es compleja y absorbente. Algo a tener en cuenta, junto con las altas dosis de contenido científico y tecnológico, si queréis adentraros en sus libros.

El problema de los tres cuerpos es una novela que me ha gustado, pero me ha dejado sentimientos encontrados. Quizá porque es muy diferente a lo que suelo leer, porque mis expectativas eran muy altas o porque mis conocimientos de física se quedan muy escasos para disfrutarla al cien por cien.

En general, la historia me ha gustado y, pesar de que tiene un ritmo pausado, me tuvo bastante intrigada y deseando saber qué estaba pasando.
Sin embargo, me ha dado la sensación de que la historia avanzaba muy poco y que este primer libro es demasiado introductorio. Además, la parte final se me hizo algo aburrida, ya que tiene un lenguaje más técnico y se describen, de manera algo repetitiva, ciertos experimentos.

Por eso, aunque la historia me ha parecido interesante, original y prometedora, y me ha dejado con ganas de saber cómo continúa, la sensación de que el autor podía haber ido un poco más al grano y que la parte final se me hiciera algo pesada y repetitiva, hacen que, ahora mismo, no me apetezca demasiado continuar con la trilogía. Así que esperaré un tiempo antes de leer el siguiente libro.

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Hoy les vengo a hablar de una de las novedades más esperadas del año: El problema de los tres cuerpos de Cixin Liu, el libro ganador del premio Hugo 2015 a la mejor novela, un reconocimiento que toma especial relevancia, pues es la primera obra no escrita originalmente en inglés en ganar esa categoría. Pónganse cómodos, hoy viajaremos a China para dejarnos maravillar.

“Quizá la relación entre la humanidad y la maldad fuera la misma que había entre el océano y un iceberg que afloraba en su superficie; a simple vista no parecían lo mismo, pero en realidad estaban hechos de una misma esencia, el agua, solo que en estados distintos”.

Hablar de este libro resulta particularmente difícil porque es el tipo de lectura que se disfruta mucho más, mientras menos detalles se conocen de antemano. Así que permítanme que les recomiende leerla sin desvelarle grandes partes de la trama. Les aseguro que se ha ganado a pulso todo el reconociendo que se ha generado, como por ejemplo, que sus lectores sean legión (en China se han vendido más de un millón de ejemplares) y su traducción al inglés, por parte del también escritor Ken Liu, es igualmente popular.

Narrada principalmente en dos épocas, iniciamos la novela a finales de los años sesenta, en medio la Revolución Cultural China, esa gran catástrofe que durante años transformó al país oriental en un “todos contra todos” donde los ciudadanos se enfrentaban entre ellos para demostrar su compromiso con la revolución y se perseguía y castigaba duramente a cualquiera que se considerase un “enemigo”. Allí conoceremos a Ye Wenjie, una joven y brillante astrofísica que es testigo de la muerte de su padre a manos de los llamados Guardias Rojos, un hecho que cambió su vida para siempre.

Años más tarde bajo el mismo régimen que asesinó a su padre, Ye Wenjie se ve inmersa en el trabajo en una misteriosa instalación militar llamada Costa Roja, pero la naturaleza de las operaciones que allí se realizan y su fin, son un secreto incluso para los trabajadores como Wenjie, cuya condición política no es ideal, pero que posee conocimientos que son requeridos en la base.

Ya en el presente, nuestro principal narrador es Wang Miao, un científico que estudia los nanomateriales y que repentinamente se ve envuelto en una averiguación que busca descubrir quién está detrás de las numerosas muertes de científicos que han ocurrido en los últimos tiempos y que señala como principales sospechosos a una organización llamada Fronteras de la Ciencia.

“La existencia de la mayoría de la gente no es más que un cúmulo de felices casualidades”

Cómo pasado y presente se unen, es uno de los grandes aciertos de la novela. Bases militares misteriosas, organizaciones con planes ocultos, miles de secretos, venganzas, traiciones, un juego de realidad virtual adictivo y grandes dosis de preguntas, iremos acompañando a los personajes por el sin fin de situaciones que nos hacen plantearnos miles de dudas y que no dejan en ningún momento de sorprender, del tipo de maravillas que te hacen soltar exclamaciones en voz alta si se está leyendo en un lugar público.

Es un libro que tiene elementos de ciencia ficción hard, pero que está escrito de manera que no hace falta tener conocimientos científicos para entenderlo, pues Cixin Liu se encarga de ilustrar cada concepto con ejemplos sencillos que hacen muy fácil su comprensión. La novela cuenta con la fabulosa traducción del chino de Javier Altayó, un trabajo que no debió de ser fácil precisamente por la cantidad de elementos científicos que posee (mil gracias a Javier por las acertadas notas que acompañan la traducción)

Mi recomendación es que si les gusta la ciencia ficción deberían darle una oportunidad a El problema de los tres cuerpos, pues Cixin Liu crea una obra original, fabulosa y sorprendente, una historia hilada con maestría y que se va uniendo poco a poco en un todo que es mucho más que la suma de sus piezas; es el tipo de libro que te hace querer leer ya la segunda parte porque simplemente necesitas más. Sí, efectivamente es otra novela que va directa a mi lista de las favoritas del año.