El problema de los tres cuerpos

Voy a intentar no decir demasiado de la trama, porque es de esas historias que te sorprenden constantemente y cualquier cosa que sepas puede estropear la experiencia. Mientras la leía, nunca tuve una pista de hacia donde iba la historia, por más que acierte o no, siempre puedo hacerme hipótesis sobre hacia donde avanza una trama, pero con "El problema de los tres cuerpos" me ha sido imposible intuir, o creer intuir, nada de lo que podría pasar. Absolutamente nada me pude figurar. En mi vida he leído nada ni remotamente parecido, donde cada nuevo capítulo era una nueva sorpresa, que me volvía a descolocar, en el buen sentido, y eso es impresionante.

Uno de los temas que más me han tocado en la lectura es esa gran crítica al ser humano, como este destruye todo lo que le rodea, bajo la creencia de que el mundo le pertenece. Como desforesta los bosques por capricho, como provoca la extinción de otras especies por no considerarlas útiles para la vida humana o como sacrifica a otros por el "bien" común. Muchísimas reflexiones me dejaban con la boca abierta y me ponían los pelos de punta.

Otros temas muy importantes del libro son el colonianismo, el fanatismo religioso convertido en secta y los peligros que conlleva, la destrucción del medio ambiente o el avance de la ciencia como herramienta de lucha entre países, continentes o incluso planetas. Todos estos temas se mezclan perfectamente para ir creando una historia compleja y completa.

Una de las primeras cosas que me sorprendieron es que la historia parta de un hecho histórico real y durísimo como fue la Revolución Cultural China, uno de los momentos históricos donde más barbaries hicieron los seres humanos, que añade un punto más a esa visión sobre el ser humano que es capaz de todo, de las mayores brutalidades por cualquier motivo. Me encanta este periodo histórico, y ha sido todo un acierto encauzar la historia con este punto de partida.

Pese a que tiene muchos tecnicismos, pues a fin de cuenta es un libro que tiene como tema central la ciencia, y el avance de esta, nunca resulta excesivamente denso. Mentiría si dijera que no hay capítulos que se pueden hacer más complejos que otros, porque los hay, pero dentro de lo que cabe es una lectura con una narración ágil y directa, que engancha desde las primeras páginas.

El hecho de que sea tan difícil de saber hacia donde te llevan las páginas, le aporta casi un toque de suspense, de misterio, que te mantiene en tensión durante la lectura, pendiente de cada detalle para tratar de atar cabos. El final de esta novela te deja con la miel en los labios, porque pese a ser una novela espectacular, tiene un aura a introducción. Me muero de ganas de coger la segunda parte, porque el mundo que abre esta primera parece enorme y puede evolucionar hacia cualquier parte.