Fin de la trilogía Helsinki, que supuesta mente llamaban la Agatha Christie del norte, y que yo no he encontrado la similitud por ningún lado. Se me ha hecho muy pesada de leer, confiaba en que esta 3º parte fuese mejor, pero no es así. Tiene partes muy lentas, en las que sigo pensando que sobra tanto detalle y tanta historia, que lo único que provoca es aburrimiento. Las abuelas eso sí, tienen una actitud envidiable. Es lo que más me ha gustado, su personalidad y lo que te ríes con ellas. Parte de la crítica social que aluden al cuidado de los ancianos y similar, le da un toque personal y da que pensar. Quizá para leer de a poco a poco sí, pero en mi caso no es de las que me han marcado o volvería a leer. |