El cuaderno de desafíos de Dash y Lily

Hay libros que, cuando terminas de leerlos, sencillamente no puedes hacer otra cosa que cuestionarte por qué has tardado tanto en hacerlo.  Es más, ¿qué ha impedido que este libro llegara a ti antes? Por que estoy convencida de que los libros, como las personas, llegan a nosotros en el momento justo; ni un segundo antes ni uno después. Y que, tanto unos como otros, simplemente nos ayudan a conocernos a nosotros mismos. Pues somos un reflejo de aquello que nos rodea. 

Pues bien. si creo esto, me pregunto: ¿es este el momento ideal para que este libro haya llegado a mis manos; ni un segundo antes ni uno después? Y de ser así,  ¿qué ha motivado este acercamiento? Si lo pienso con calma, veo que tratar de hilar los pespuntes de cómo este llegó a mí, es cómo recorrer un camino lleno de migas de pan.

Hace unos meses, por Navidad, mi hermana me habló de una serie que había descubierto en Netflix, que le había encantado. Yo la escuché, apunté la serie en mi lista y ahí quedó el asunto. Pero una noche en la que no sabía qué empezar a ver, me acordé de esta serie y pensé en darle una oportunidad. ¡Ja! en darle una oportunidad, cuando en realidad era ella quien me la daba a mí. Pues después de ver los primeros capítulos, decidí que antes de seguir viéndola, tenía que leer el libro. Necesitaba leerlo!

Y hasta aquí me diréis: "Ok, pero esto pasa siempre; alguien te recomienda un libro, una serie, una película, una canción... ¡La vida está llena de recomendaciones! Y lo que es más frustrante, estas no siempre nos alegran el alma". Pero ¿qué pasa cuándo pasa todo lo contrario y algo nuevo y esperanzador surge de una lectura? ¿Qué pasa con  esta ansia, esta alegría, este grito contenido en el pecho que hierve por salir? Eso es lo que ha significado este libro para mí, para mi alma, que, a fin de cuentas, es quien disfruta de mis lecturas. La que se nutre con ellas y la que, si le concedo el honor, me saca a bailar en mi propia vida.

Sin palabras, así estoy, teniéndolas todas en la boca y en el corazón.

Cuanto más lo pienso, menos me gusta este libro. Simplemente no es para mí.

Este libro es más o menos lo que esperaba. Un romance esponjoso con dos personajes principales, ambos diferentes y con sus propias diferencias peculiares, que, a través de circunstancias improbables, se encuentran y se enamoran. Sin embargo, para un romance, no había mucho romance. Teniendo en cuenta que no se conocen hasta el final (disculpas por el no spoiler) y que comparten su intimidad entre ellos dentro de las páginas de un cuaderno, no parecía haber mucho entre ellos una vez que los dos se reunieron.

Conoce a nuestros personajes principales: Dash y Lily. Dash, un sesquipedaliano (un disfrutador de las palabras largas), y Lily, una aficionada a los libros pero estridentemente optimista. No tuve demasiado problema con ninguno de ellos (aparte de que los autores blandieran cada personaje con peculiaridades que parecían no dejar espacio para la sutileza o mucha profundidad), excepto que no me encontré alentándolos para que lo hicieran. reunirse, enamorarse, todo el asunto. Quizás soy demasiada realista para sumergirme por completo en eso.

Lo que más disfruté de este libro fue la comunicación entre Dash y Lily a través del cuaderno. En comparación con el diálogo de los personajes (muchos de los cuales me parecieron elaborados y escritos para que el lector dijera "Vaya, estas personas usan palabras grandes e inusuales, deben ser INTELIGENTES"), encontré que sus anotaciones en el cuaderno eran mucho más sinceras y honesto. Me gustó la obsesión de Dash y Lily por la lectura (sorpresa, sorpresa), aunque siento que esto también a veces parecía artificial para impresionar al lector. O tal vez simplemente no lo aprecié tanto como otras personas.

Además, no puedo decir cuánto me irritó cuando Dash le pidió a su amigo Boomer que fuera su mensajero para él, su "Apolo". Teniendo en cuenta que Dash parece enorgullecerse de ser erudito, uno pensaría que los autores habrían verificado quién era el dios mensajero de la mitología griega para esta referencia (es Hermes, no Apolo).

También me frustró lo sobreprotectora que era la familia de Lily con respecto a los niños. Me pareció más insultante que bonito (o "cariñoso", como se refiere Lily) que una mujer joven deba estar protegida de cualquier persona que no esté relacionado con ella porque, si se encontrara con dicha persona (hombre, sobre todo) no emparentado, nublarán su juicio y su capacidad para tomar buenas decisiones. Sin mencionar que LOS CHICOS SON MALOS Y SE APROVECHARÁN DE TI. Y esto fue sin que su familia supiera necesariamente que ella había estado comunicando sus pensamientos y sentimientos más íntimos a un extraño a través de un cuaderno rojo.

Pero realmente, aunque no lo volvería a leer, este es un libro que estoy segura de que muchos disfrutarán por las razones por las que yo no lo hice.

Yo no era una persona de tener "lecturas temáticas", pero el 2020 me obligó a hacer cosas raras y dentro de ellas fue elegir algunos libros acorde a la fecha. El cuaderno de desafíos de Dash y Lily fue novedad en España en marzo y en México en noviembre, pero casi desde su lanzamiento supe que era un libro para leer en diciembre... y no me equivoqué ni un poquito.

Lily es una chica que ama fervientemente la Navidad y hasta cuenta los días faltantes, pero este año es diferente, sus padres se van de luna de miel y se queda sola con su hermano, quien aprovecha la oportunidad para estar con su novio y, en un acto desinteresado para librarse de ella, crean un cuaderno con un desafío para que logre contactar con alguien ahí afuera, ¿alguien contestará el extraño desafío?
Ahora imagina que vas a tu librería favorita, la que conoces de memoria, y te encuentras algo que no encaja ahí, un cuaderno rojo, así que decides abrirlo y encuentras un desafío casi hecho a la medida para ti. ¿Qué haces, dejas el cuaderno donde lo encontraste o tomas el reto? Ese es el dilema en el que se encuentra Dash, ¿tomar un poco de diversión antes de Navidad o regresar a su monótona vida? La respuesta es más que clara, además se muere por saber más de la misteriosa chica que deja retos extrañamente intelectuales.

Desde la sinopsis intuimos que es un libro de personajes más que de trama, pero la forma en la que Dash y Lily llevan la historia es increíble, una montaña rusa de emociones y retos que no parecen reales o siquiera cumplibles y, sin embargo, página tras página te sorprenden con lo que hacen, la fragilidad y fuerza que muestran. Así que sí, estos muchachos son todo lo que necesitábamos en un libro juvenil: frescos, originales, auténticos.
Dash, nuestro protagonista masculino y escrito por David Levithan. Tenía bastante tiempo que no me encariñaba con un personaje tan gruñón, huraño, engreído y sentimental. No me malentiendan, Dash es el típico adolescente que "se sale del molde y es diferente a todos" pero de alguna rara y loca forma lo hace a su manera y con un sello de autenticidad, tiene una historia que lo respalda y para nada se hace el mártir o se regodea en su sufrimiento. Lo mejor es que a pesar de parecer un joven hermético tiene esperanza y busca el lado bueno de las cosas aunque se niegue a admitirlo. de Dash no tengo mucho que comentar, es de mis personajes favoritos, fin. Protéjanlo a toda costa, por favor, es un pancito dulce que recordarán por mucho tiempo.
Lily, nuestra protagonista femenina y escrita por Rachel Cohn. Ella es todo un caso, es la clásica adolescente llena de energía, con buena vibra y positiva a la que todos tachan de rara o extravagante ¡porque lo es!, y no tiene miedo en ser ella misma aunque eso la convierta en una incomprendida y quede marginada. al ser toda positiva, rosa y alegría, los hechos la afectan más y es vulnerable, por decirlo de alguna manera, pero se niega a admitirlo y tiene que ocultarlo lo mejor que puede. Con Lily me costó bastante trabajo conectar, pero mientras más pasaban las páginas más la entendía y en más ocasiones de las que me gustaría admitir quise darle un abracito y palmearle la espalda.
¿Mencioné que Lily es pura navidad y Dash la odia?, ¿solo en la sinopsis? JAJAJA, upsi. Y como esa, hay muchas cosas más en las que son polos opuestos, hasta puede parecer que son incompatibles... y sí, pero no. Es de eso romances donde justo sus diferencias los complementan y son las que los acercan a las cosas que tienen en común porque, punto muy favorable para la historia, nuestros muchachos justifican el porqué sí y el porqué no, valió oro que tuvieran una razón para hacer las cosas, que fueran orgánicas y creíbles y no que las hicieran solo para que la trama pudiera fluir.

Respecto a la narrativa tengo que admitir que ni se siente que son dos autores los que hicieron el libro, se los juro. Vamos, sí, Dash y Lily son infinitamente diferentes, pero la forma de contar la historia es muy similar y la cohesión de la trama es increíble, nunca me sentí perdido o en duda de cosas que no encajaran. Lo mejor es que lo van a querer leer de un jalón porque aunque no tenga los grandes plot twist que te tienen al borde de tu asiento queriendo desentramar todos los secretos, sí vas a querer conocer más a nuestros protagonistas y llenarte de energía con todo lo que hacen, dicen, piensan y de todos los que los rodean... no lo mencioné, pero los personajes secundarios dan vida y aportan muchísimo, en especial Boomer.
¿Es un libro navideño? Vamos a ver... se desarrolla en Navidad y su razón de ser es la Navidad, hay referencias claras sobre las festividades y varios de los desafíos son respecto a esto, OBVIO es un libro navideño y que disfrutas mucho si lo lees en esas fechas porque estás "ambientado" (y, si tienes suficiente suerte, te llegan a contagiar el espíritu navideño :P), pero yo creo que en cualquier fecha se disfruta igual. El cuaderno de desafíos de Dash y Lily tiene todo lo que se necesita para que un libro pase desapercibido al ser una historia con múltiples clichés y, sin embargo, estoy ansioso por leer la secuela porque es la dosis de azúcar, romance y emoción que no sabía que necesitaba.

Sé que para este momento ya habrán visto la serie, ¡PECADO! Bueno, no es cierto, pero el mito dice que leemos el libro antes de ver la adaptación y debo admitir que siempre me adelanto a ver la serie/película y si me voló la cabeza, me adentro al libro; en esta ocasión sentí que el ver la serie primero le quitaría potencia a mi experiencia e iría sesgado al libro y no me equivoqué: vaya historia tan preciosa, misteriosa y tierna. He escuchado/leído que a varios les gustó más la serie, pero creo que es cuestión de perspectivas: si te gustan las tramas sencillas, rosas y divertidas, obviamente le serie es para ti; si lo tuyo son las tramas con personajes introspectivos, que quizá entran en el cliché de adolescente filósofo adelantado al pensamiento de su edad y aún así se comportan de manera inmadura, con una trama en cierto modo predecible y aún así te mueres por que lleguen a determinado momento, pues el libro es totalmente lo tuyo. A mí me gustan ambas cosas, así que a ninguna le encontré desperdicio. Solo nos queda agradecer al tío Puck por salvar esta historia del olvido y darnos el romance hetero que merecemos.
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Este libro ha sido como recostarte un día de invierno con una mantita y un café calentito o un chocolate mientras la chimenea crepita y sientes el peso del libro que sujetas con una mano mientras lees. (Espero que no sea un tocho en el que habéis pensado porque entonces la escena pierde el encanto).

Quería leer algo navideño y se me puso delante este título, que ya os aviso que es literatura juvenil, muy juvenil, pero la verdad es que es muy tierno y los personajes son adorables. Tanto los protagonistas como los secundarios. Además, uno de los escenarios principales es una librería, con lo que nos gusta a los lectores que los libros huelan a libro 😉

Os presento a nuestros protagonistas:

- Dash odia la Navidad desde que sus padres se divorciaron, pero este año ha conseguido engañar a su familia y quedarse solo para no tener que enfrentarse a tanta celebración, espumillón y lo que para él es falsa alegría. Dash es un solitario empedernido.

- Lily adora la Navidad, pero este año van a ser diferentes porque sus padres están en Fiji celebrando sus bodas de plata. Lily es tierna, familiar y algo infantil.

Como un juego para entretenerse en estas Navidades tan distintas para ella, deja un cuaderno rojo escondido entre los libros de su librería favorita, es un cuaderno con un desafío. -¿Quién lo encontrará? ¿Seguirá el juego? ¿Será un chico? ¿una chica? ¿qué edad tendrá? -

Dash deambula entre sus autores favoritos y encuentra el misterioso cuaderno, - ¡Wow¡
¿Qué es esto? ¿Quién es Lily? ¿Acepto el reto? -

Y así amiguis comienza el intercambio de retos, desafíos y confidencias entre dos extraños que únicamente comparten la ciudad de Nueva York.

Es una historia bastante poco probable en la realidad, pero es bonita y original. Esta extraña pareja nos irá llevando por distintos escenarios de una navideña Ciudad de Nueva York, con sus luces, sus centros comerciales a rebosar y esas costumbres americanas que todos conocemos a través de películas y series.

Los personajes están muy novelados, es decir son figuras que no siguen los patrones habituales de los adolescentes. Ambos son super cultos, amantes de la lectura y se conocen todos los clásicos habidos y por haber. Exceptuando este punto en común, el cliché que rige toda la historia es el de “opposite to lover”.

Los capítulos se alternan entre las dos voces por lo que podemos ir conociendo como lo vive cada uno de los personajes en primera persona. Son cortos y rápidos de leer con una prosa muy fluida. Como curiosidad contaros que está escrito a 4 manos.
Sin duda es una lectura muy adecuada para la Navidad, especialmente en los países del hemisferio norte que comparten la climatología con los protagonistas.

Os lo recomiendo como lectura ligerita y si os gustan los libros juveniles. ¡Ah¡Por cierto, hace poco salió la segunda parte y si os da pereza leer la historia de Dash y Lily pero queréis conocerlos, siempre podéis echar un vistazo a la serie de Netflix.

Me declaro una gran fan de las historias con temática navideña. Cuando encuentro un libro sobre este asunto, siempre me lo apunto en mi lista de libros para Navidad. Parece fácil, pero existen muy pocos tomos cuyas historias se desarrollen en esta época del año. Por lo que para mí, cada uno de ellos se convierte en un pequeño tesoro.

Llevaba bastante tiempo queriendo leer “El cuaderno de desafíos de Dash y Lily”, me alegro mucho de que por fin le haya llegado su momento.

Además, tengo que comentaros que no ha sido una lectura corriente. Para leer esta novela, nos hemos reunido unas cuantas compañeras y así hemos llevado a cabo la lectura conjunta que propuso, durante estas navidades, el sello Puck. Gracias a ello, creo que incluso he disfrutado mucho más la historia de Dash y Lily.

Nada más empezar a leer, conoceremos a Dash, uno de nuestros protagonistas. Estas navidades serán algo distintas para él, ya que las pasará solo en casa, lejos de su familia. Pero que se encuentre así no quiere decir que vaya a aburrirse durante estos días. En uno de sus paseos por su librería de segunda mano favorita se encontrará con un objeto de lo más curioso, un misterioso cuaderno rojo que le propondrá un desafío:

“He dejado unas pistas para ti.

Si te interesan, pasa la página.

De lo contrario por favor, vuelve a colocar el cuaderno donde lo has encontrado”

¿Qué hará Dash? ¿Aceptará este misterioso desafío o pasará de él?

Hasta aquí puedo contaros. Para saber más tendréis que leer la historia completa.

Como os he comentado más arriba, este libro llevaba tiempo apuntado entre mis lecturas pendientes.

La historia estará narrada a dos voces, desde el punto de vista de Lily y del de Dash. La peculiaridad que tienen estas narraciones es que cada personaje estará representado por uno de nuestros autores. Es decir, David Levithan fue quien escribió los capítulos de Dash y Rachel Cohn los de Lily.

Gracias a las diferentes narraciones de cada personaje, podremos diferenciar mejor el estilo de escritura de cada autor. Siempre he querido leer alguna historia de David Levithan. Es uno de los autores que me han recomendado.

Personalmente, me han gustado más los capítulos de Dash. Me han parecido más sensibles y profundos. Dash es un chico amable, leal y algo gruñón. Pero también, un solitario que odia la Navidad con toda su alma. Y prefiere en estos días dedicarse a comer yogur en el sofá de su casa.

Es el personaje con el que más he conectado. Me ha hecho reflexionar. Y con el paso de las hojas, he empezado a cogerle cariño. Detrás de su arrogancia, se esconde una historia muy triste. En esos momentos en los que se sincera a través del cuaderno, nos mostrarán como es realmente. Descubriremos al verdadero Dash.

Las narraciones de Lily serán más cómicas y divertidas. Lily es una chica aventurera, activa y amante de la Navidad. Pero también tiene un lado más inmaduro e infantil. Hay momentos en los que me cansaba un poco de que le diera tantas vueltas a las cosas, en lugar de lanzarse sin más. Creo que esta gran diferencia entre las personalidades de los personajes hace que se combinen a la perfección. Formando pues la pareja perfecta ya que cada uno tiene lo que le falta al otro.

La lectura se hace muy amena y fácil de leer. Los capítulos son cortos y se vuelven divertidos y adictivos con el paso de las páginas. El libro, también, se lee súper rápido gracias a la gran cantidad de diálogos que encontraremos. Y a las partes donde nuestros protagonistas se comunican a través del cuaderno rojo.

El hecho de comunicarte a través de un cuaderno con un desconocido, me ha parecido una situación de lo más original.

He leído algunos libros donde los personajes escribían diarios para poder vaciar todas las emociones que han ido guardándose con el tiempo. Pero, nunca me había encontrado con una historia de personajes que compartieran un cuaderno para comunicarse entre ellos.

¿Puedes ser más sincero si no conoces a la persona con la que estás hablando? Puede que sí. Esa persona no te conoce, no te juzga. Sino que intentará entenderte.

Eso es justo lo que ocurrirá con nuestros protagonistas. Una serie de desafíos, a través de un misterioso cuaderno rojo, harán que entre Dash y Lily se establezca una conexión. Poco a poco, los dos van a descubrir que tienen algo en común, la soledad que esconden en su interior.

Pero ahora la pregunta que surge es ¿serán capaces de aceptarse, el uno al otro, cuando estén frente a frente del mismo modo que cuando compartían el cuaderno?

En conclusión, “El cuaderno de desafíos de Dash y Lily” ha sido una lectura muy ligera, con la que te enganchas nada más empezar. Cuando te quieres dar cuenta, te has terminado el libro. Y justo por eso, me he quedado con ganas de más. Esta es la primera parte de una trilogía. En este primer libro, se nos muestra como se conocen Dash y Lily. Pero todavía nos queda ver que es lo que ocurrirá con ellos después de este final. Tengo ganas de que llegue pronto esa segunda parte.

Sin duda, es un libro que os recomiendo para leer en Navidad. Es divertido y capta muy bien, además de una forma muy sencilla, el ambiente que se respira durante estas fiestas.
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